Capítulo 23: Lo que siento por él.
Thea.
No sé cómo explicar mi forma de actuar la noche de mi cumpleaños, es como si el simple hecho de estar cerca de Lucas no me dejara actuar coherentemente.
Sentía rabia, y tristeza pero no podía explotarla con él, era como si en mi cabeza no existirá la posibilidad de poder herirlo.
Eso pasa cuando una persona te enseña todo de sí, te enseña tanto que podrías destruirlo, pero si lo quieres, si de verdad lo quieres ni siquiera puedes llegar a pensar en hacerlo. Sabía todo sobre Lucas, incluyendo aquellas fibras sensibles que podían dolerle si las tocaba.
Pero no podía hacerlo, yo no podía herirlo por mucho que mi rabia pensará en hacerlo, mi cariño por él me lo impedía.
Debí alejarme de él esa noche, ya que todo lo que sucedió me hizo perder los estribos, sentí demasiadas cosas, pero en el momento que entramos a su casa sabía lo que iba hacer.
No planeaba besarlo, o al menos mi primera opción no era esa, pero al verlo salir sin camisa y solo su mono de pijama todo mi plan se esfumó.
Durante toda mi vida he pensado cada uno de mis pasos, nunca me había lanzado ante algo que no sabía que resultado tendría, pero aquella noche lo hice. Me arriesgué a besar a Lucas, con el miedo hasta las orejas, y entendiendo que si me rechazaba las cosas serían muy extrañas de ahí en adelante, me sorprendió que no lo hiciera y al mismo tiempo experimente la mejor de las emociones al besarlo.
Lo tomé por sorpresa y sé que por un momento se sorprendió que presionara mis labios sobre los suyos, pero no tardo en seguir el beso que a ambos nos dejó claro que ya no solo podíamos vernos como mejores amigos.
Después de esa noche el sentimiento que creí sentir por Lucas quedó muy claro. Lo quería y no solo como mi mejor amigo y él tampoco solo me veía con su mejor amiga.
Al día siguiente regrese a mi casa, y él se fue con sus padres a visitar a sus abuelos.
No regresaría hasta el martes y aunque las cosas entre nosotros estuvieran bien, ninguno de los dos había tocado el tema por teléfono.
Cuelgo la llamada que acabo de tener con Lucas, y me dejó caer en mi cama, seguimos siendo los mismos mejores amigos, y actuamos como siempre pero hay momentos donde ambos parecemos desear tocar el tema y no saber cómo hacerlo.
Escucho el golpe en mi puerta antes de abrirse encontrándome con Liseth aún con su uniforme. Ya habíamos llegado hace un rato y ahora me encontraba con un short y una blusa sencilla, pero ella siempre solía durar toda la tarde con el uniforme.
—¿Cómo te sientes volviendo a casa en autobús?— me pregunta acercándose—. Lo siento por irme con Félix, le dije que mañana nos iríamos juntas hasta que vuelva Lucas, no pienso dejar que te vayas sola.
—Es aburrido, siempre voy a clases con Lucas, y regreso con él— respondo— por suerte llegará mañana.
Se deja caer en mi cama, acercando su cabeza a la mía quedando una al lado de la otra.
—¿Cuándo te diste cuenta, Thea?
—¿De qué?
—De lo que sientes por él, y lo que él siente por ti— me giro para mirarla.
—¿Cómo sabes eso?— pregunto sorprendida de que me esté diciendo esto.
—¿Se lo dirás?— inquiere jugando con un mechón de su cabello.
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Experimentando el amor. (Libro 1 EEA)
Teen FictionThea y Lucas han sido vecinos y mejores amigos desde que tienen memoria, pasando la mayoría del tiempo juntos; pero todo eso cambia cuando el padre de Lucas decide enviarlo a un internado en el que deberá permanecer por un año para que deje de ser u...