Xu Bei miró detrás de él a la gente que se acercaba con armas en sus manos y se desesperó un poco, no había forma de avanzar.
Había un acantilado justo delante él, miró, no había raíces, solo un manto de nieve blanca, si se caía, su corta vida que duró 26 años habría llegado a su fin.
Pero realmente no quería morir aquí. No, realmente no quería morir, sin importar dónde fuera.
Decían que el cielo es precioso, pero nadie está dispuesto a ir, y mucho menos una persona como él que solo podía acabar en el infierno a ojos de su madre.
Maldito seas, Ban Datong, me las arreglo para esconderme en un sitio como este y aún así acabas encontrándome, ¡Ya le gustaría al FBI ser tan bueno como tú!
Se dio la vuelta y se apoyó en un árbol marchito al borde del acantilado, mirando el impactante rastro de gotas de sangre que había derramado sobre la nieve al rodar y huir, un poco fuera de sí; estaba mareándose por la pérdida de sangre.
"Ban-ge, Da Ban ......," Xu Bei miró a Ban Datong que se bajó lentamente del enorme Hummer (1), su corazón se apretó, pero su boca no fue sincera, "No vale la pena que te esfuerces tanto por encontrar a alguien tan inútil como yo"
Ban Datong no dijo nada, frunció el ceño bajo el frío viento, con una mirada de falsa compasión caminó lentamente hacia Xu Bei, miró la gran herida en su pierna, aún seguía goteando sangre y le mostró una sonrisa muy satisfecha: "Xiao Bei, dijiste que ge no es una persona tan impersonal, ¿verdad? Si no hubieras huido una y otra vez, ge no te habría herido..."
Al decir esto, Ban Datong se quitó los guantes, pasó los dedos por la herida de Xu Bei y metió un dedo en ella con violencia.
"¡Joder!" Xu Bei exhaló un grito entre dientes, y le costó mucho esfuerzo morderse la lengua para poder controlar el grito que amenazaba con salir de su boca, un sudor frío brotó de su frente bajo el pleno invierno, que rápidamente se cristalizó como una fina capa de escarcha.
"Ahora querrías gritarme ¿no?" Ban Datong sonrió, sacó el dedo lleno de sangre y se lo llevó a la boca, lamiéndolo, "¿Te gustaría decir "que le jodan a tu madre"? Es una pena, ya no tendrás la oportunidad..."
Xu Bei sentía tanto dolor que le costaba hasta respirar, cuando por fin pudo tomar aire. Supuso que no podría escapar hoy y temía que al final acabaría siendo un cadáver bajo la nieve.
Miró a Ban Datong con los ojos entrecerrados y sonrió: "No será fácil cuidar a tu madre, tanta gente queriendo joderla, al final tu padre fue el único que lo consig...Antes de que terminara el final de la oración, Xu Bei sintió un borrón ante sus ojos, seguido de un dolor agudo, tan severo que no entendía de dónde venía el dolor antes de tumbarse en la nieve.
No fue hasta que la sangre le corrió por la cara y la boca cuando se dio cuenta de que le habían golpeado en la cabeza, y al mismo tiempo pudo ver la barra de hierro que sostenía Ban Datong.
Si hubiera sido más honesto, podría haber conseguido una muerte rápida o algo así, pero en este caso, no era imposible que lo acabara haciendo pedazos con la vara y luego lo dividieran en trozos más pequeños.
"Xu Bei, eres un maldito canalla, te señalé un camino claro, pero tú tienes que fingir ser jodidamente arrogante, creyéndote gracioso y todo..."