11. Te llamarás Lang Zhong

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Cuando Xu Bei le dio la ropa para que se la pusiera, comprobó que todo lo que había elegido la joven de la tienda le quedaba muy bien. Independientemente de si se trataba de la parte de arriba o la de abajo, no le sobraba tela.
La previsión de esa chica era realmente buena. A el chico le queda muy bien la ropa, como era un lobo que nunca había llevado ropa, se sentía bastante incómodo.

"No está mal, estás muy guapo, a la altura de tu padre". Como no estaba cooperando muy bien, Xu Bei empezó a desesperarse, "Venga, vamos a pensar en tu nombre mientras comemos".

"No quiero".

"¿Qué?" Xu Bei se quedó estupefacto. Tenía una forma de hablar tan escueta que todo lo que salía de su boca hacía que la cabeza de Xu Bei hirviera: "¿Qué coño dices? ¿No quieres comer o no quieres tener nombre?"

"Ropa". Justo mientras hablaba, empezó a tirar despreocupadamente del jersey que llevaba con una expresión de impaciencia en la cara.

"Eh, joder", Xu Bei en cuanto vio el jersey de lana siendo tironeado, y sin mucho esfuerzo, directamente se desgarró. "¡¿Puedes parar?! Ahora mismo no eres un lobo, eres una puta persona. Las personas tienen que llevar ropa. De camino hasta aquí ¿has visto a alguien desnudo por la calle?"

"¿Por qué?"

"¡¿Cómo que por qué?!" Xu Bei no era una persona muy paciente. El pequeño lobo no era capaz de hablar antes. Como mucho, le molestaba hasta que se enfadaba y entonces le daba unas cuantas pataditas con el pie. No esperaba que fuera tan irritante cuando adquirió la capacidad de hablar, "Te estoy preguntando que qué tienes en la cabeza".

"Hambre".

"Joder..." Xu Bei se tiró en la cama. Ahora esperaba ansiosamente que el chico volviese a transformarse en lobo. Por lo menos, podía patearle con sus dos pies. "Tendrás frío si no te pones ropa. ¿Sabes?"

"No tengo frío".

"¡Si no tienes frío, póntelo por mi! ¡Venga a comer!" Xu Bei no quería volver a explicarse, simplemente le gritó eso.

"Ajá".

El pequeño lobo no sabía usar palillos, Xu Bei le pasó una cuchara, tampoco la utilizó muy bien, lo que hizo que el apetito de Xu Bei se arruinase: "Hablemos sobre tu nombre, piensa primero cuál debería ser tu apellido".

"¿Apellido?" El pequeño lobo agarró la cuchara y luchó con ella durante mucho tiempo, al final la dejó a un lado y empezó a devorar la comida con las manos.

Al escuchar el sonido de los crujidos al morder los huesos, el corazón de Xu Bei se congeló.
No debería haber pedido costillas hoy. El lobo tenía un montón de huesos delante, mientras que él, en cambio, tenía un plato completamente limpio.

Xu Bei curvó una sonrisa en su cara para parecer lo más tranquilo posible: "Verás, mi nombre es Xu Bei, Xu es mi apellido. Qiao Qian se apellida Qiao, Ye Minmin se apellida Ye, Ban Datong se apellida... Bueno su apellido es Bastardo".

"Ajá."

"Déjame pensar, y si te apellidaras Xu, en cualquier caso, eres mi hi... jo". Cuando Xu Bei dijo esto, robó una mirada al pequeño lobo que estaba absorto en comer cosas.

"Ajá".

"¿Sabes lo que es un hijo?"

"No".

Xu Bei suspiró, era realmente aburrido intimidar a una persona tan tonta con el vocabulario de un bebé: "Olvídalo, no me burlaré de ti, eres un lobo. ¿Y si hacemos que tu apellido sea Lang?".

"Vale".

"Sin embargo, el apellido Lang no existe, ¿Qué tal si lo sustituimos por un homófono?" Xu Bei metió un dedo en su sopa y escribió un carácter en la mesa. "Mira, puedes cambiarlo por el otro carácter de Lang".

El Lobo Ártico Donde viven las historias. Descúbrelo ahora