Más que una apuesta (#4 Amores Y Apuestas)

23

Darell en multimedia. 

Darell:

—¡Darell! —Mi padre me grita desde el interior del remolque.

Me limpio el sudor de la frente con la mano y me quitó los guantes dejando la llanta que estoy por cambiar del Jeep.

Hay un jodido sol que me quema el cuerpo, mi padre abre la ventana del remolque. —Hijo, ahí estás.

—¿Qué pasa?

—Llego una en el correo. —Menciona levantando el brazo con las cartas que tienen en mano.

Me sacudo las mías y a su vez el sale del remolque para acercarse a mí, me extiende las cartas y basta ver el destinatario para no querer saber de ellas.

—¿Dinero?

Se lo regreso y el insiste.

—Te hará falta.

—No necesito ese dinero.

Mi padre me golpea en el pecho con él sobre. —Si lo necesitas, cuando la media beca se agote.

Trago saliva. —Aún queda más de año y medio y..

—¿Quieres estudiar o no, hijo?

Miro la carta y chasqueo los dientes recibiendo, no quiero este dinero y aun así lo necesito.

(***)

Llego a la universidad y como cada día las miradas de los que más me conocen me observan con la misma expresión de siempre y sobre todo observan las cicatrices que llevo en la cara, mientras los que nunca me han visto ponen sus jodidas caras de sorpresa para que después en los siguientes días se vuelvan como la primera opción que mencioné.

Rumores hay muchos e ignorar es la mejor habilidad que tengo, aunque estoy seguro que les carcome saber la verdad completa, algo de lo que prefiero no hablar.

Camino en dirección a la clase donde nos reuniremos antes de tomar el autobús que nos llevará al tour de la casa televisora, algo en el que no estoy interesado falta.

Mis pasos bajan al reconocer a las dos figuras ir como una pareja y junto las cejas.

Courtney Volker y Jackson Hill.

Sonrio sin ganas cuando se acerca a plantarle un beso en los labios y aunque ella retrocede, no lo rechaza del todo ya que medio sonríe.

Vaya mierda...

(***)

—Gusto verte de nuevo, Volker.

Su mirada se aparta de los alrededores, frente a nosotros está el guía del lugar y el profesor a pedido que nos reunamos con nuestro equipo para el siguiente trabajo.

—Courtney. —El jodido Jackson Hill aparece después de haberse perdido en los baños.

—No, no .. ¡Jackson! —Llama el profesor y el aparta los ojos furiosos de mí. —Esto es en equipos, Jackson. Ve con tu compañero.

—Mi compañero no ha venido... ¿Podemos hacer cambio de equipo?

—¿No? Entonces ven aquí. Serás de mi equipo hoy..

Jackson se niega.

—¡Ven aquí! —Insiste.

—Ya lo oíste, en grupos. —Menciono alzando el mentón en burla.

Acaba yendo con él y me quedo con Volker, unos pasos alejado del resto del grupo, ella anota lo que más le llama la atención y no puedo dejar de observar cada cosa que hace.

—¿No anotaras nada?

—Tengo buena memoria. —Respondo.

—Seguro. —Sigue anotando. —Algunos no..

Jackson Hill se gira en nuestra dirección e intenta ver a Volker, quien permanece tranquila.

—Supongo que lo de proteger el corazón es mentira. —Menciono con los ojos sobre el tipo.

—¿Que? . —Hace una pausa. —No.

—¿No?

—Rechazas que haga mi trabajo llevándote a casa..

Después de congelarme las orejas en media madrugada esperando por ella, aunque es algo que prefiero guardar y no reprochar.

—Si el problema es por el tiempo que estabas esperándome... voy a pagártelo.

La clase para en una sección e ingresa a una habitación, mientras ella y yo nos quedamos fuera.

—¿Conmigo buscas protegerte pero y el.. ?

Ella alza las cejas.

—Empiezo a comprender que no me equivoque al pensar que la balanza es diferente para ambos. —Añado.

—No sabes lo que dices.

—¿Cómo competir con alguien con el que ya tienes historia?

Sus labios se separan. —Vaya cobarde.

Arqueo una ceja.

—Si esa es la razón de todo..

—No lo es. —Le aclaro. Cobarde no va a llamarme a mí, joder.

Si lo quisiera iría por ella sin importarme nada, sin importarme si resulta herida o no...

—¿No vas a proteger tu corazón con Jackson?

—No necesito protección con él.

Un silencio nos abruma y lo que me dice me hace sentir extraño.

—¿Qué estás haciendo, Volker?

Sin duda, responde.—Hago lo necesario.

Yo viendo que se agarran de los pelos a lo Dhalia y  Dove en cap anterior.

Todo tienen un porque, nenis y Darell lo acaba de descubrir.

Nos leemos.

>>Yiemir.