Capitulo 02.

560 85 13
                                    

Una semana antes de la apuesta de su padre.

Jeongin corría por los pasillos de su casa buscando su zapato, faltan menos de 30 minutos para entrar a la universidad y no encontraba su maldito zapato, maldijo por lo bajo, luego de verlo bajo del sofá, claro hay estaba.

—Aquí estas. —Hablo poniéndose el zapato viendo que estaba rasguñado y mordido.

Soltó una maldición al recordar que perro estaba jugando con su zapato por la noche, pero tenia tanto sueño que ni siquiera se levanto a quitárselo.

Camino a su habitación tomando su mochila, y el claxon de un auto fuera de su casa le hizo bajar las escaleras a paso apresurado, no sin antes pasar a la habitación de su padre.

—Despierta tienes que ir a trabajar. —Jeongin le movió un poco, hasta que el viejo pareció reaccionar.

—10 minutos más. —Contestó echándose las sabanas encima tapando su rostro.

—Me voy a la escuela, despierta ya. —Camino a la puerta cuando sintió su zapato con las cintas desatadas. —Necesito zapatos papá. —Hablo antes de salir de la habitación de su padre, dirigiéndose a la entrada.

Cuando estaba a punto de abrir la puerta su celular sonó, y la pequeña notificación de un mensaje nuevo ilumino la pantalla sonrió al ver de quien trataba.

Lix. 💞

"No me hagas esperar más, Jeongin llegaremos tarde".

Guardo su celular corriendo al auto observando a su hermoso novio, sujetar el volante del auto.

—Llegué. —Hablo apenas entro al auto del lado del copiloto.

—Bebé tardas siglos, empezare a llegar 10 minutos antes. —Contesto el contrario acercándose para besar los labios del rubio.

—Deberías llegar 30 minutos antes para que puedas pasar a mi cama, antes de empezar las clases. —Susurro a medio beso.

Y es que Jeongin era de esos adictos al sexo.

—Otra vez con lo mismo. —Felix se alejo para empezar a conducir, sin despegar la mirada de la carretera.

—Sabes que me gustas bastante ¿Cierto? —Pregunto luego de varios minutos en silencio.

—Si me lo dejaste claro aquel día en la fiesta de fin de año donde casi abusas de mi. —Dijo estacionando el auto, viendo el reloj en su muñeca.

—Ash te odie, mentiste. —Le acuso. —"Vamos a mi carro Innie" —Dijo imitando la voz de Felix. —Creí que tu querías acostarte conmigo en el carro en los asientos traseros, pero no solo me dejaste atrás ¡SOLO! Mientras tu ibas al frente para llevarme a casa.

—Estabas ebrio, no me acostaría contigo a menos que estés en tus 5 sentidos. —Bufo volviendo a ver el reloj. —Llegamos tarde 15 minutos no podremos entrar a la primera clase.

—Ese es el punto bebé, ahora estoy en mis 5 sentidos y sigues sin querer hacer algo. —Jeongin se acerco al cuello del mayor, dejando un beso, luego dos, hasta llegar a su boca. —Han pasado 3 meses desde esa noche te necesito. —Le susurro tan cerca de sus labios que estos rozaron.

—Jeongin por favor podrían vernos. —Hablo apartando a Innie para que regresara a su lugar.

—Pir fivir Jeongin pidrin virnis. —Hablo en tonos infantiles, rodando los ojos. —Me encanta que seas tan reservado Lix, pero a veces esa faceta tuya de niño bueno me vuelve loco.

Jeongin bajo del auto azotando la puerta, giro a través de su hombro para observar a Felix recargándose en el volante de su auto.

—¿Acaso no bajara a pedirme disculpas? —Se pregunto a si mismo después de unos segundos frente al auto.

Segundos que parecieron años, así que empezó avanzar, había llegado tarde, ahora tenia 40 minutos para hacer algo.

Camino por los pasillos de la universidad hasta que llego al aula de ajedrez muy ñoño para su gusto, pero no había nada mejor, se sentó en una de las mesas empezando a jugar con algunas piezas.

"Juega".

"Juega".

Algo en su interior le repetía lo mismo.

Estaba aburrido un juego de ajedrez no era nada del otro mundo, entonces busco entre los estudiantes a alguien lo suficientemente tonto como para que pudiera ganarle.

Entonces le vio al joven ñoño de química, cada que miraba a Jeongin, no podía evitar bajar la vista, y ponerse colorado hasta las orejas, sin pensarlo mas camino hasta llegar a su mesa, poniendo ambas manos en ella.

—Seungmin-ssi. —Hablo con voz de bebe, cualquier otra persona pensaría que le estaba haciendo insinuaciones con ese tipo de voz. —¿Quieres jugar conmigo? —Dijo formando un puchero con sus labios.

Al ver que el moreno empezaba a tartamudear supo que ya no seria necesario pedirle zapatos nuevos a su padre, cuando podría ganar unos con aquel moreno.

—Lo s-siento no se ju-jugar, cartas. —Tartamudeo Seungmin, todos en aquella universidad sabían del vicio de su padre, Jeongin no se quedaba atrás, era conocido por apostar en cualquier cosa.

—No quiero jugar cartas quiero jugar ajedrez, contigo. —Jeongin llevo su dedo índice al pecho de Seungmin y batió las pestañas de arriba a bajo.

—¿Ajedrez? —Pregunto sorprendido, alejando el dedo de su pecho.

Jeongin asintió con la cabeza.

—Solo diversión, pero quizá quieras hacerlo mas interesante y apostamos 50 dólares, es todo lo te traigo. —Dijo sacando el dinero de su cartera.

Minnie dudoso observo a Jeongin y su brillo tan peculiar en sus ojos, entonces acepto.

La jugada estaba tensa o por lo menos así lo sentía Seungmin, vaya que Jeongin era bueno, o es que se la pasaba haciendo varias insinuaciones algo pervertidas hacia él, como morder su labio inferior, golpear su entre pierna con la contaría, o soltar ligeros gemidos cuando Seungmin logra quitarle un peón más.

Entonces cuando aquella reina logro comerse el último caballo de Jeongin este soltó un comentario muy claro.

—Seungmin-ssi ese era mi último caballo. —Puchereo. —Yo quería montarme en ese caballo que tienes. —Habló y podría jurar que vio como Innie llevo su vista hasta los pantalones del mayor. —Ahora no tengo en quien montarme.

—Si quieres te lo regreso. —Dijo casi en un susurro, volviéndolo a poner en su lugar, sin saber que ahora Jeongin tenia listo un jaque mate.

—Eres un amor Minnie. —Jeongin se inclino ligeramente para dejar un beso en la mejilla del contrario, movimiento que aprovecho para cambiar posiciones de algunos peones para tener el camino libre y acabar con esto.

—Llevo buscándote desde hace 30 minutos Jeongin. —Contestó el castaño a espaldas de Innie tomándolo por la cintura alejándolo del otro.

—Ay Lix. —Jeongin hablo con desinterés. —Estoy por terminar puedes retirarte, búscame cuando en realidad tengas ganas de estar conmigo. —Hablo sentándose otra vez en su lugar.

—Olvidaste tu celular en mi carro. —Felix puso el teléfono a lado de Jeongin, sentándose a su lado, para luego ponerlo sobre sus piernas, empezando a hacer carisias en la espalda del menor.

—Gracias. —Contestó ignorando el hecho de que tenia a su caliente novio debajo de el tocando su espalda.

—Vámonos mamá salió de viaje no llegara hasta en dos semanas, quédate en mi casa. —Le susurro al odio, y Jeongin sintió todo en el erizarse por completo y su estomago dio un vuelco.

—¡Jaque mate! —Grito tomando los billetes de la mesa, dejando a un Seungmin confundido, mientras arrastraba a Felix de la muñeca.

¿Acaso Jeongin solo le coqueteo para ganar?

Y se había ido de la mano con otro.

Su novio quizá.

Claro Felix después de todo era estúpidamente guapo y derrochaba encanto, sin contar la gran cantidad de dinero que tenia.

Apostado. •HYUNIN•Donde viven las historias. Descúbrelo ahora