Apostado. •HYUNIN•

Capitulo 25.

Hyunjin soltó mi mano, durante unos segundos, al ver aquel hombre.

Tenia sentido que tuviera una pareja antes que yo, pero que es lo que hace en su casa, ¿Por qué no se va? Y sobre todo ¿como entro? si en casa no había nadie.—Vete. —Hyunjin volvió a tomar mi mano, jalándome hacia él, abrazándome por la cintura, pareciera que me usa de escudo.

—Pero... ¿Quién es? —Beomgyu apunto con su barbilla, hacia mi.

Hyunjin soltó una risita sarcástica, dándome media vuelta haciendo que quedáramos frente a frente, tomo mis mejillas de una manera tan posesiva dejando un casto beso, un beso rápido, sin sentido para mi, fue como si me estuviera usando, como si quisiera demostrar que ahora esta con otro.

Por primera vez no cerré mis ojos durante un beso con Hyunjin.

—Por si no te queda claro, es mi novio, él único. —Hyunjin entrelazo sus dedos con los míos, siendo cada vez más posesivo. —Ahora Beomgyu puedes decirme ¿cómo enteraste a mi casa? —Pregunto Hyunjin.

—No cambiaste la cerradura. —Saco un llavero con un par de llaves y una foto pequeña de ellos dos... besándose.

Al ver esa foto solo quería agárralo del cabello y sacarlo de mi casa con todo y sus maletas, ¿acaso no escucho que soy su novio?, ¿no es obvio que Hyunjin no le quiere aquí?, ¿por qué no se va?

¿Esto es lo que llaman celos?

—Mi madre murió ayer, yo no tenía a donde ir, solo pensé en ti... — Beomgyu desvió su mirada, hacia la taza humeante en sus manos. —Solo te tengo a ti.

—No quiero ser grosero pero... —Interrumpí su plática, cada vez me daban más ganas de sacarlo a rastras de mi hogar. —Te espero en la habitación. —Solté la mano de Hyunjin, apenas unos segundos.

—¡No! Tú te quedas, él se va. —Grito Hyunjin tomándome nuevamente de mi antebrazo.

—Hyunjin por favor deben hablar, lo entiendo, ahora es mi turno de entender. —Le conteste en voz baja, sintiendo cada vez más flojo el agarre en mi brazo. —Te amo.

—Yo a ti Jeongin. —Dijo segundos después, Sonreí victorioso al escucharlo.

Quería quedarme a escuchar, pero se que debo confiar, confiar en Hyunjin...

Pasaron minutos, horas hasta que Hyunjin volvió a la habitación, tenía los ojos llorosos, una gran mano marcada en su mejilla izquierda pero a pesar de eso tenía una sonrisa, débil pero a final de cuentas sonreía, para mí.

—Aun no te duermes. —Llego a mi lado, sentándose al borde de la cama.

—Te esperaba, ya no quiero dormir solo. —Me incline un poco, abrazándolo por la cintura, besando su mejilla roja.

—Él pasará la noche aquí. —susurré, alejándome de él.

—¡Que! ¡No quiero! —Le reproche, haciendo un puchero inconscientemente, cruzando mis brazos.

—No tiene a donde ir —Dijo llevando su mano a mi barbilla haciendo que le viera a los ojos.

—Y ese no es tu problema, él te dejo, ahora vuelve como si nada, Hyunjin estamos juntos como puedo vivir con tu ex durmiendo en la habitación de enseguida. —Respondí, casi en forma de reproche.

—Solo es por unos días, no puedo dejarlo ir así, está mal, su madre acaba de morir Jeongin, no tienes idea de cómo se siente. —Hyunjin tomo de mi mano, atrayéndome a su cuerpo, acorrucándome en su pecho.

—Lo se, créeme que lo se. —Conteste con voz algo rota, al recordar a mi madre. Entonces sentí empatía por él, después de todo perder a tu madre es horrible. —Pero aun así no lo quiero aquí, dale dinero y que se vaya lejos, Hyunjin no lo quiero aquí.

—Pero yo si. —Intenté alejarme de su cuerpo, de sus brazos pero escaparme me era inútil. —Tampoco quiero que estés molesto, es tu turno de entender Jeongin, pasa de media noche no puedo dejar que se vaya, aunque te duela Jeongin, Beomgyu fue importante para mi, de hecho teníamos planes de casarnos.—Empezó hacerme masaje en la espalda recorriendo toda mi espalda con sus dedos largos. —Por que ahora solo tengo ojos para ti, eres mío... Y yo tuyo.

—Promete que no te escaparás a media noche para ir a su habitación. —cerré mis ojos disfrutando las manos de Hyunjin recorriendo mi espalda. —Promete que solo me miras a mi entre todas las personas del mundo... porque creo que ahora, yo solo tengo ojos para ti. —Sentí como sus manos abandonan mi espalda, yendo hasta mi barbilla levantándola hasta quedar frente de él.

Beso mi frente, mis ojos, mejillas y por último mis labios. —Perdón por lo de hace rato, se que ese beso estuvo mal. —Susurro en mis labios, Sonreí a la mitad del beso.

Lleve mis manos hasta su cabello provocando que se acercara más a mis labios, para profundizar el beso, así fue. Pude sentir su lengua entrando sin piedad en mi cavidad bucal recorriendo cada rincón de ella, siendo un beso lento y provocativo.

—No me hagas odiarte Hyunjin. —Tome sus manos haciendo que rodeará mi cintura, acurrucándome en su pecho. —No soportaría odiarte a ti también, suficiente tengo con mi padre.

—¿Te lo dije no? —Le mire confundido y sonrió. —Solo hare que me quieras cada día más. —Dejo un beso en mi frente.

—Eso no lo dijiste. —Le acuse, volviendo hacer pucheros. —Mentiroso.

—Lo dije solo que estabas dormido y no me escuchaste, pero ¿Lo estoy haciendo? ¿cierto? —Deje un rápido beso en sus labios escondiéndome en su pecho, sintiendo sus brazos a mi alrededor. —Lo hago. —Susurro. —No te preocupes por Beomgyu, si tanto te molesta le diré que a mi novio le molesta su presencia.

—Puede quedarse, pero solo unos días, no hables con él, no lo mires, no lo toques y sobre todo no vayas a su cuarto por las noches. —Cerré mis ojos, sintiendo el sueño llegar.

—No lo hare, no te preocupes. —Dijo de igual forma cerrando sus ojos para dormir.

Por primera vez dormimos abrazados, nos dijimos te amo, conocí a su ex, hicimos el amor, no esta enojado conmigo, tuvimos una cita.

Hoy es el mejor día de mi vida.

Y pronto conoceré a su madre.