Kosair, no voy a morir!「The Remarried Empress」【재혼 황후 -Jaehon Hwanghu】

CAPITULO VIX

EP-47 The Remarried Empress

—¿Que paso?—Preguntó Anee, tras ser abordada en un fuerte abrazo por Lilliam—¿Por qué lloras?

—¿A donde fuiste?—Lilliam sollozo, sobre el hombro de su hermana.

—Tuve algo que tratar con una dama de compañía. Pero, que es lo que tienes tú.

Anee solo escuchó sollozar a su hermana menor confundida. 

—¡Kosair!

Anee solo negó en el interior. Era frecuente escuchar sus quejas a cerca de los rechazos de Kosair Trovi hacia ella. Sin embargo, jamás la uso como paño de lagrimas o siquiera se molestó en contárselo, eso le pareció raro; Lilliam es bastante hostil y malhumorada cuando se encuentra con Kosair y sus sueños no son eso, sueños. Era imposible que Kosair en algún momento cambiara de opinión y llegara a Lilliam. A veces pensaba que el emperador era afortunado por estar lejos de Lilliam, sin soportarla en ningún aspecto.

—Lilli—Murmuro, palpando ligeramente la espalda de Lilliam—Lord Kosair es impulsivo, seguro estuvo enojado y dijo eso sin pensarlo, olvídalo y vuelve a ser tú.

Lilliam se separó de Anee, limpiando sus lagrimas con el dorso de su mano. Esa es la Anee que escribió en su obra, la Anee amable y compresiva. Una sonrisa surco su rostro, observándola devolverle la misma sonrisa.

Tras aquella pequeña charla, ambas mujeres salieron del palacio, esperando poder descansar en casa. 

—Rashta, cuidado con lo que dices frente a Kosair.—Advirtió el emperador, arropando a su amante en la cama—Tiene un mal genio y se enfurece fácilmente. Le ordenare que no se te acerque, pero no sé que podrá hacer si pierde los estribos.

—¿A que te refieres con que debo tener cuidado con lo que diga?—El semblante de Rashta endureció en el proceso.

—Otras personas me contaron que le dijiste cosas desagradables a la emperatriz, que era estéril, por ejemplo.

—N-No es cierto, su majestad.—Los ojos de la mujer se aguaron, mientras trataba de hablar sin que la voz se le rompiera—Su hermana, Lady Li estuvo allí y puede decir que no es cierto en absoluto ¡La emperatriz me dijo que era despreciable! Lady Li tuvo que defenderme.

Sovieshu cerro los ojos en un suspiro. Lilliam no la defendió, solo trataba de llamar la atención de Kosair, eso el emperador lo sabe muy bien; Cierta parte de su infancia la compartió con Lilli y aunque no eran demasiado cercanos, todavía ella era lo suficientemente popular en el imperio como para que los cuentos llegaran hasta sus oídos. 

—La emperatriz cuida mucho el modo en que la perciben los demás. Quizás demasiado se podría decir. No creo que haya hecho eso—Murmuro suavemente, mientras las lagrimas de su concubina se escurrían de sus ojos—En cuanto a Lady Li, Rashta ella es un alma exenta, lo más probable es que solo buscara algo de la atención de Kosair, no debes fiarte mucho de ella.

En aquel momento el miedo paso por Rashta, la probabilidad que el emperador se aburriera de ella y la echara de palacio, arrebatandole a su bebé no estaba muy lejos realmente. Ella solo atino a morder su labio inferior, sin saber que hacer, tal vez lo único que podía llegar a hacer por ella y por su bebé, era cuidarse así misma y no depender del todo del emperador y ¿Lady Li? La mujer antes de que la conociera era libertina y conocida por su desprecio hacia las personas de más bajo nivel, como Rashta, así que tampoco era una opción viable. 

Tras eso seria presa más fácil para personas como Kosiar, el vizconde Landra y el mismo Vizconde Lotteshu, ellos no dudarían en acabarla. Su mirada ensombreció al pensarlo, por lo cual una idea llegó a su cabeza, tal vez debía aprovechar el favor de Lilliam, la media hermana del emperador y realizar algunos pasos primero.

—No le dije a la emperatriz que era estéril y aunque me haya malinterpretado, llevo en el vientre al hijo de su majestad. Así que él no puede empujarme así.—Su mano se apretó contra las delicadas sabanas de su cama.

—¿Kosair te empujo?—El emperador pregunto perplejo.

—No fue muy fuerte, pero me empujo sin duda.—Levanto su mirada hacia el emperador, quiso murmurar que le preguntara a Lady Li, pero ella estaba enamorada de Kosair y por más que deseara ayudar a Rashta, defendería al hermano de la emperatriz.

El emperador se puso a meditar. Si Rashta hubiera afirmado que fue Navier quien la empujo, definitivamente no le creería. Sin embargo, existían probabilidades de que Kosair si lo hubiera hecho, como ya antes había mencionado, al tener un mal genio, un temperamento bastante explosivo no era demasiado descabellado. En este caso, Lilliam tampoco era una opción de testigo, sabe cuan prendada esta de Kosair y aún si él hubiera empujado a Rashta, respondería que era mentira. Ademas, ya era un buen tiempo que no se reunía con la duquesa de Wembley, por lo menos desde que su madre, la actual señora Becker, lograra ganar el titulo de Duquesa para su hija; Incluso para el señor Becker fue beneficioso tener a Lilliam bajo su techo.

Observo a Rashta por poco tiempo antes de proseguir hacia su estudio, dejando a Rashta descansar tranquila. Desde el incidente al atardecer, había manifestado que su cuerpo estaba adolorido y el medico por supuesto, también dijo que debía ser la ultima vez que este tipo de cosas pasaban.

—Marqués Karl, Kosair Lilder Trovi tiene prohibida la entrada al palacio, hasta que yo lo diga.

—Pero, su majestad. Lord Kosair es hermano de su majestad y heredero del duque de Trovi.—El Marqués inclino ligeramente el cuerpo hacia Sovieshu.

—Por eso el castigo que le impongo es poco severo. Estoy seguro de que era consciente de eso al empujarla.

—¿Lord Kosair, empujo a Lady Rashta?—El marqués estaba evidentemente sorprendido.

—Eso es lo que Rashta afirma.

—¿Por qué no llama a Lady Li? Dijeron que estuvo presente cuando eso ocurrió.

—Los rumores sobre ella son suficientes para saber que mentiría.—Suspiro, dejando reposar sus manos e el respaldar de la silla.

El marqués Karl asintió y se apresuro en salir. Era mentira tratar de convencer a su majestad que investigara más antes de castigar, él parecía ciego cuando se trataba de Rashta.

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