Ambos se hallaban en el patio de la escuela, callados, sentados y relajados por el sonido de las hojas siendo arrtastradas por el viento.
Un par de pájaros se encontraban cantando a la par de las hojas que comenzaban a caer debido al viento.
El pelinegro azabache volteó a ver a su asistente, sorprendido de que se encontraba tan calmada le tocó el hombro con la punta de sus dedos.
Esta volteó arqueando una ceja, preguntándole que quiere.
—¿¡Por qué me lo preguntas tan aburrida!?—Le cuestionó con una gota se sudor marcada en su sien.
—¿Eh? Ni siquiera estoy molesta.
—Pero me lo preguntas como si lo estuvieras...
—Bueno... perdón.
—¡¿"Perdón"?! ¡Ten más sentimientos!—Dolido por el comportamiento de la chica se volteó dramáticamente cruzado en brazos, dándole solo la vista de su espalda a la contraria.
La fémina comenzó a reír por la reacción del azabache.
—Hanako-kun. ¿Estás jugando, no?
—¿Tú que crees?
—Te recompensaré con las donas de mi mochila si me dices que es lo que no te gusta de mí.
Los ojos del chico brillaron en cuanto escuchó "donas" no se lo pensó dos veces y dijo lo siguiente con rapidez:
—Enojona, aburrida, orgullosa, triste, otra vez triste, aburrida, engañosa y-
—Ya entendí.
—¿Y las donas?
—Hijo de pu- —Alzó la bolsa de donas para pegarle con fuerza a lo que él se levantó rápidamente sacudiendo sus manos con rapidez.
—¡Lo prometiste [...]-san!
—Pensé que te gustaba mi personalidad...—Volteó su mirada a otra parte avergonzada por como la describió el pelinegro.
— La verdad si me gusta, solo que dije cualquier cosa. No me equivoco con lo de aburrida pero... —Susurró lo último con una leve risa
—Lo escuché. —Enojada nuevamente se acercó hacia él, y comenzó a correr.
Cosa que Hanako también imitó.
Ambos se encontraban corriendo por el jardín.
El número siete siendo perseguido por su asistente por ser sincero con ella.
Aunque la chica jamás aceptaría el hecho de ser a veces cara culo con él.
Tenía sentido el por qué estaba así.
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Vengo a comentar que empezé mal el año.
Bueno, no tan mal.
Pues, solo tendrán más control con los alumnos, eso es todo.
Almenos no está la bruja de mi profesora de artes plásticas.