Poco después de un mes, finalmente había reunido toda la valentía que le quedaba para poder ir a ver a la que pronto dejaría de ser su esposa para volverse en una mujer "libre" de compromisos; sentía su corazón latir como si quisiera salir de su pecho y no era para más, ella seguía siendo todo para él.
Entró al edificio cuyo departamento estaba y después de preguntar por el número, se dirigió al mismo.
Tocó la puerta un par de veces y nadie atendió a la misma, por lo cual estuvo a punto de irse cuando un joven de tez morena y aspecto informal lo detuvo...
-Disculpe señor
-¿Si?
-¿Vino a buscar a la señora Marigold?
-Si, soy su esposo...
-Entiendo... Ella suele subir a la terraza todas las noches, quizá ahí la puede encontrar, puede subir por el elevador... Solo tenga cuidado, es extraño que una persona haga eso...
-Descuida, gracias
Agradeció antes de dirigirse al elevador e iniciar a ir a la terraza hasta que las puertas se abrieran, permitiéndole salir, que fue cuando de primera estancia no la vio, sino hasta que caminó un poco y vio una sombra familiar de espaldas a él, a lo que se acercó con algo de cautela a ella antes de hablar...
"¿Mari?..."
La mujer al oírlo tomó una postura recta antes de limpiar sus mejillas para girar un poco y verlo...
-¿Qué demonios haces aquí?
-¿Estabas llorando?...
-Eso no te interesa, te hice una pregunta, contesta
-Convencí a Jules de que me dijera en donde te estabas quedando y vine a verte para devolverte esto... —sacó de su bolsillo un anillo y se lo enseñó— Lo dejaste
-Eso... —sintió un nudo en su garganta e hizo una mueca extraña antes de hablar— No es mío, es tuyo
-No, yo te lo di a ti cuando—
-Me pediste matrimonio, —interrumpió— pero en 2 días nos vamos a separar, ¿para que lo querría?... Vendelo y recupera tu asqueroso dinero...
-Mari... —se acercó a ella y la vio retroceder— Vine a pedirte perdón...
-¿Perdón?, ¿por qué?...
-Por tratarte como lo hice... —fingió rascar el lagrimal de su ojo para verla con una expresión razón triste— Solo causé lastimarte...
-La verdad duele, pero al menos podrás ser feliz...
-Es que no puedo ser feliz sin ti...
-¿Cómo que no?... —no pudo contenerse y las lágrimas comenzaron a salir— Dijiste que ya no querías estar a mi lado...
-Comprendeme, estaba mal y ebrio...
-Por Dios, no seas cínico... ¿Me pides comprensión ahora?... Traté de comprenderte y me lastimaste
-Lo sé, estuvo erróneo... —tragó en seco antes de guardar el anillo— Hablé de manera impulsiva, sin pensar y me expresé mal, dije que ya no quería estar contigo cuando me refería a algo momentáneo, yo jamás quise que te fueras... Pero admito que tampoco hice algo para que te quedaras...
-¿Por qué lo hiciste?
-Porque no sabía que hacer... Todo lo que habíamos trabajado, se esfumó por mi culpa...
-¿Cuántas veces te dije que eso no importaba?... Midas, te expliqué que aunque perdimos aquel negocio, iba a seguir ahí contigo
-Mari, tú no mereces a un fracasado como yo... —las lágrimas ya se habían abierto paso— Yo te había prometido que lograríamos ese negocio para poder crear la empresa de nuestros sueños y sin embargo perdimos la oportunidad... Te fallé... Y sé que a veces amar significa perder cosas... —se acercó a ella y la tomó del rostro— Pero yo no quería perderte, entré en pánico al pensar que serías infeliz conmigo lo que quedaba de nuestras vidas y terminé por alejarte...
La abrazó con fuerza mientras lloraba de manera inconsolable, mientras la fémina solo lloraba pero permanecía estática ante ello...
-Quería darte lo mejor...
-Las cosas materiales van y vienen, pero el amor no...
-Lo sé... Te perdí
-No comprendes mi punto... El amor no se esfuma de la noche a la mañana... Y aunque me dolió lo que pasó, yo te sigo amando...
El de tatuajes al oírla se separó un poco para verla, notando la triste sonrisa de su esposa...
-¿De verdad?... —la vio asentir— Yo igual te amo...
-Lo sé...
-Mari... Sé que un "lo siento" no va a arreglar, ni revertir lo que pasó, pero de verdad... Perdóname por ser un idiota y cretino que no supo pensar con la mente y el corazón, pues jamás te hubiera dicho algo así...
-Lo único que necesitaba era escuchar eso... Te perdono, Midas
-Fue difícil pasar año nuevo sin ti...
-El año pasado fue un mal momento de nuestras vidas...
-Si... Sé que en unos días nos vamos a separar, pero creo que... —sacó nuevamente el anillo y se lo mostró— No sé si aún estemos a tiempo de cambiar eso... —sorbió por la nariz— Quiero tener nuevos sueños contigo, quiero seguir escribiendo nuestra historia y seguir superando problemas a tu lado... Sin ti no tiene sentido mi vida...
-¿Hablas de un nuevo comienzo?
-Como siempre lo hemos hecho en nuestros problemas, solo que esta vez si sería un gran reinicio, donde jamás volveré a decir algo como lo que dije...
-Me parece bien, aunque yo prometo el tampoco tomar acciones tan precipitadas como el irme sin decir algo, pues tampoco te di la oportunidad de explicarte y estuvimos a punto de perder lo nuestro por un arranque del momento... Perdóname también a mi, actué sin pensar bien...
-Olvida eso, a partir de hoy hay que proponernos que los problemas que surjan, hay que resolverlos en el mismo día para evitar todo esto...
-Me parece bien, porque ahora que lo pienso, hicimos mucho drama...
-Suele pasar, lo importante es resolver nuestros problemas si lo que queremos es seguir juntos como hasta ahora...
-Tienes razón...
-Entonces... ¿Te vuelvo a poner el anillo que nunca debió salir de tu dedo?
-Si, por favor...
El hombre sonrió antes de colocarle el anillo para verla con una expresión más relajada...
-Me recordó a cuando nos casamos... Prometí amarte en la abundancia o en la pobreza...
-"En las buenas y en las malas"
-"En la salud o la enfermedad"
-"Hasta que la muerte nos separe"
-Siempre viendonos, siempre juntos y siempre tú.
-Así es, siempre tú y yo, cariño.
Bueno, este pequeño OS va dirigido a Gemilio2vv, quien me recomendó la canción de "Just You and I" y me gustó mucho, espero que haya sido de tu agrado. ✨
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"Midnight Thoughs" // Conjunto de drabbles.
FanfictionBueno, aquí hallarán pequeños "escritos" que se me ocurren de momento, muchos de ellos serán de Midas y Marigold, obvia.