Capítulo 4.

52 2 0
                                    

-Si, yo, hm... Creí que te gustaría algo así...- dijo Derek... ¿Nervioso? Diaj, que adorable.

-Oh, pues... Gracias.-dije yo, intentando sonreirle. Acción que fallo, por que me salió una mueca rara. Derek me miró intensamente, con ternura. ¿Qué mierda hacía? Yo me tensé aún más. No sabía qué quería, pero tampoco me interesaba en estos momentos...

-Me podrías dejar... ¿Sola?- le dije directamente. Seguramente soné muy borde, pero no estaba para líos ahora.

-No.-dijo él, acercándose peligrosamente más mi cama. Rápidamente me acomodé, ya que estaba más bien estirada, y me senté.

-No es el mejor momento, déjame estar sola, ya.- le ordené. Puedo ser muy... inocente, o dulce. Pero también tengo mi carácter, sobre todo cuando... Estoy mal.

-No quiero dejarte sola.- me dijo él, sentándose esta vez en mi cama, más cerca mío. ¿Pero ahora qué hacia? ¿No ve que ahora mismo no quiero ninguna gilipollez? Lo menos que necesito ahora es que un jodido Adonis esté delante mio diciéndome estás cosas. Le voy a saltar encima, y no es bueno eso.

-DÉ-JA-ME.- le ordené por segunda vez, a punto de gritar. Me ponía muy nerviosa que estuviera tan jodidamente cerca. No me gusta.

-Ten cuidado, pequeña. Cuando estoy cerca tuyo te pongo nerviosa. Solo te digo que no te enamores de mi, no soy chico para ti.- dijo él, mirándome fijamente. Mientras yo procesaba la información que estaba recibiendo mi cerebro. ¿QUÉ MIERDA SE CREE ESTE TÍO? Vale que sea guapo, y que tenga unos ojazos que... pf, y su culo... Mel, centra. Pero eso no es motivo para decirme eso. Qué se piensa, ¿qué con su carita me va a enamorar? ¡JÁ! Lo lleva claro este tío. A Mel nadie la enamora, NADIE. No decías eso antes... Me recordó mi subconsciente. Jo puta.

Mientras tenía esta pequeña batalla interior, me di cuenta como Derek se levantaba de mi lado, i antes de que se fuera, me levanté, e hice que me mirara.

-Eh tú, si te piensas que por que eres guapo me vas a tener a tus pies, lo llevas claro, chaval. Ten cuidado, vaya a ser que el que acabe enamorado de mi seas tú, y yo no soy chica para ti. - le repetí, con el mismo tono que él había utilizado. Derek me miró intensamente, me sonrió, y se acercó peligrosamente a mi cara, me dejó un ruidoso beso en la mejilla y se fue por la puerta.

¿Qué había pasado aquí?

Derek POV's

¿Y esta niñata qué se creía? Yo nunca me enamoro, y menos de... esa. Lo tiene claro si piensa eso. La que va a acabar enamorada va a ser ella. A quién quieres engañar, ¿Derek? 'Esa' tía que dices, desde que la has visto, te ha vuelto loco. Me reprimió mi subconsciente. Cabrón. Tenía razón, cuando la he visto al bajar las escaleras... Dios. Se veía tan dulce. Y... No, no puedo pensar eso. Es la hermana de uno de mis mejores amigos, además, es una niñata. Pero... Cuando la he visto tan... Mal... No sé que mierda me ha pasado que ha sido como si me mataran. Odio que las chicas lloren, pero al verla a ella ha si... Ha sido muchísimo peor. Y odio sentir eso. Por que no me pienso enamorar de esa niñata.

Bajé las escaleras encontrándome con un Lucas dando vueltas en el comedor, bastante preocupado.

-Eh tío, ¿Qué te pasa?- le dije yo, acercándome a él.

-¿Cómo está Mel? ¿Mejor?- dijo él, bastante preocupado. Y normal, él ama a su hermana... Y verla así...

-Tranquilo bro, está... Mejor que antes. Ya verás, poco a poco se acostumbrará y todo irá mejor.- le dije yo, intentando tranquilizarlo.

-Gracias Derek... Ojalá que dentro de poco ella esté mejor.- finalizó Lucas, saliendo del comedor.

Y yo me quedé sentado. Pensando en esa niñata que ocupaba mi cabeza.

Mel POV's

3 días después

Bueno... Se podría decir que las cosas van mejorando. Poco a poco voy aceptando que James ya no está aquí. Me llama por la mañana y por la tarde, cada día. Eso, ayuda... Lucas hace poco me llevó a un centro comercial para comprarme nuevos atuendos y accesorios. Y bueno, Derek... él sigue igual. No lo conozco mucho, más bien... Desde ese día en mi habitación no hemos podido hablar mucho.

Mañana empiezan las clases, y mi hermano ya me ha inscrito al mismo instituto que él, Derek y Finn van. Finn... Finn es un amor de chico. Es... super 'cute'. Me llevo genial con él, en estos pocos días le he cogido muchísima confianza, y... Aunque siempre me esté llamando guapa o cualquiera de sus idioteces (ganándose un gruñido de mi hermano, y de sorprendentemente, de Derek), es un amor de chico.

Ya tenía todo preparado para mañana. Aún no tenía pensado que mierda ponerme el primer día para ir... Pero bueno, supongo que elegiré algo sencillo.

La alarma de mi móvil sonó y juro que iba a tirarlo por la ventana. Luego pensé que lo amaba y me calmé. Apague la alarma y hice el intento de levantarme. Cosa que no fue posible ya que me caí al suelo. Me levanté poco a poco y me metí en el baño para darme una ducha rápida, así me despejaba antes. Veinte minutos después me encontraba saliendo del baño, en ropa interior, para dirigirme a mi armario y escoger el atuendo adecuado para mi primer día. Justo cuando iba a abrir la puerta del armario, escuché como se habría la puerta de mi habitación.

-Mel, despier... Jo-der.- dijo un Derek, totalmente dormido mirándome de arriba abajo.

-¡Cabrón! ¡Sal de aquí ahora mismo, inepto! ¡Bestía inmunda! ¡Veeeeeeete!- grité yo, corriendo hacia la puerta y cerrándola en sus narices. Y normal, ¡ESTABA JODIDAMENTE VESTIDA SOLO CON ROPA INTERIOR!

Me calmé durante unos minutos, y, tras poner la silla de mi escritorio en la puerta para que nadie entrara, me encaminé otra vez hacia el armario. Opté por unos tejanos de tiro alto, un top blanco y una chaqueta de cuero negra. Lo combiné con un collar de búho que me regaló James hará cosa de unos meses, y fui otra vez al lavabo a maquillarme. No me gustaba muchísimo maquillarme, solo lo justo, así que me hice una finísima, pero visible, raya de arriba en los ojos y me puse rimel. También recalqué mis labios con un labial rosa palo. Al acabar, recogí mi mochila y bajé las escaleras, encontrándome con los tres orangutanes. Finn me miró de arriba abajo, Derek me miró, se sonrojo (se veía super adorable) y bajó la mirada, y mi hermano casi mata a Finn.

-Finn, idiota, ¡ni se te ocurra mirar más, o juro que te dejo sin dientes!- gruñó mi hermano, acercándose peligrosamente a él. Yo me puse en medio y le di un beso en la mejilla.

-Buenos días, orangután- le dije, riéndome.

-Buenos días enana. No me gusta que vayas así... Voy a tener que matar a muchos tíos hoy, ¿eh?- dijo mi hermano, guiandome hacia la mesa para desayunar. Pero, justo antes de sentarme, pude escuchar claramente como Derek decía 'Y yo..', para luego irse escaleras arriba.

Acabamos de desayunar, y todos nos montamos en el Jeep para ir al instituto.

Primer día, allá vamos.

Una vez más.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora