- ¿Hm? - Eros, estando ocupado mirando a su amada Psique desde lo lejos, levanta la mirada creyendo haber oído algo.
Presta atención a todo pero la melodiosa voz de Psique lo hace regresar su atención a ella. Sonríe enamorado, pero aún con aquella sensación de inquietud.
Psique y su padre se abrazan con fuerza y emoción por su reencuentro.
- Padre ¿Dónde está Thea? Quiero verla - Sonríe ampliamente.
- Ha salido a hacer unos trabajos, no debe tardar en regresar - Responde el rey.
- Estoy segura que sé dónde está si no ha regresado aún, iré con ella - Psique sale corriendo con emoción por ir a reencontrarse con su mejor amiga.
Pero no estaría preparada para lo que vería.
Thearis, en su intento de huida solo había conseguido alejarse un poco solamente del templo de Eros, pero había sido demasiado tarde y ya no pudo huir de lo que le esperaba.
- Ya no más... - Solloza apenas sin voz - Te lo suplico Aimar... detente... no puedo más... - El dolor en su cuerpo era insoportable pero el dolor en su corazón lo era aún peor.
Aimar sonríe con orgullo y se levanta dejando a la pobre Thearis tendida en el suelo, completamente destrozada...
- Ni tu amado Dios pudo detenerme, soy mejor que él... y tú Thearis... ya eres completamente mía -
Ella llora acurrucándose en el suelo y tratando de taparse de nuevo, Aimar se aleja sonriéndo dejando sola a la pobre chica, quien lego de un momento decide levantarse y caminar, aunque le duela su intimidad, hasta el templo de Eros nuevamente.
Psique había llegado antes que ella y se extrañó al no ver a nadie allí, pero al escuchar unas pisadas supo de inmediato que sería su mejor amiga y quería sorprenderla así que se escondió tras el pedestal de la estatua y sonrió esperando el momento justo.
Pero escuchaba los pasos lentos de la chica y como se tiró de rodillas frente a la estatua.
- ¿Por qué... ? - Cuestiona Thea y el tono lloroso de su voz no pasó desapercibido para Psique - ¿Por qué me pasó esto... ? ¿Que he hecho para que esto ocurriera... ? - Solloza.
Psique no pudo contenerse y se levantó para ver a Thearis quien al encontrarla allí se sorprendió, pero Psique lo estaba aún más. Vio la ropa desgarrada de Thearis y las marcas en su cuerpo... ella intenta taparse mientras agacha la cabeza e intenta evitar llorar.
- Psique... E..Estás viva... que alegría... G..Gracias a los Dioses que... - Psiqué la abraza y ella no pudo resistirse y lloró desconsoladamente en su hombro.
- Thearis... -
- Lo odio... lo odio, lo odio... - Gruñe entre dientes y llantos - Psique... él me destruyó... -
Sin saber que decir, Psique la abraza con más fuerza e intenta consolarla en silencio mientras encuentra las palabras adecuadas para esto... pero no las había...
Eros, quien seguía vigilando a Psique, veía la escena en su templo y sintió una verdadera lástima por aquella chica que siempre le había sido fiel y él la habia ignorado.
Hizo una mueca de malestar a la vez que se agarraba el pecho por una sensación de incomodidad y molestia. No sabía si era consigo mismo o por otra persona pero hacía que su corazón se estrujara, ver a Thearis hacia que eso le ocurriera, así que decidió irse.
Thearis y Psique esperaron a que la primera se calmara y finalmente decidieron regresar al palacio en silencio y esperando a que nadie las viera; lo habían conseguido, así que Psique se encargó de su amiga mientras esta estaba con un sentimiento amargo y de vacío que no le permitía ni siquiera pronunciar sonido.
Terminó con la vista en un punto fijo, ojos vacíos y mirada muerta era lo único que se podía ver en ella en estos momentos... se llevó una mano al pecho tratando de encontrar el colgante.
- No está... - Murmura sin más bajando la mano pero al instante comenzó a sentirse asqueada y sucia. Se sentía horrible - Baño... quiero bañarme... -
- Ven entonces -
Psique ayuda a Thearis a levantarse de nuevo y la lleva al baño donde llenan la bañera, Thearis no pierde el tiempo, se quita la ropa desgarrada consiguiendo que Psique sintiera aún más lástima al ver las heridas en su cuerpo; Thearis se mete a la bañera y comienza a frotarse como si quisiera arrancarse la piel.
- Es un asco... es un asco - Se agarra la cabeza y comienza a llorar de nuevo, Psique la vuelve a consolar.
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Mi Amado Dios 'EROS'
RomansaThearis había tenido como único Dios a Eros, el Dios del Amor y la Pasión, por su admiración hacia él terminó perdidamente enamorada del Dios. Psique y ella son mejores amigas desde hace tanto tiempo, y en el reino se las conoce como las dos más her...