Arde

extra

Han pasado ya unos años y mi relación sigue igual. Recuerdo que al principio tenía un poco de miedo, pero me decían que era miedo porque se verdad me gustaba. Y así es.

Después de nuestra boda, que fue muy bonita. No voy a mentir, y os digo que me pase la mayor parte del tiempo llorando. La disfrute muchísimo, estuve con los míos, con los que me quieren. Mi familia y amigos. También vino el mundial de echarles, eso fue una locura, su sueño cumplido. Verlo llegar ahí ha sido tan emocionante, todos estamos orgullosos de él, y sobre todo, los que están en el cielo.

No puedo estar más feliz, estoy enamorada de la vida, enamorada de Charles, de mi familia, mi hogar y mis dos personitas especiales.

Hace dos años, justo tres semanas después de que Charles ganará el título, me enteré que estaba embarazada. Si si, embarazada. En ese momento me quería morir, no sabía lo que hacer, no sabía dónde meterme. Pensé que le había arruinado la vida a Charles. Pero fue todo lo contrario.

Todavía me acuerdo de su reacción, le di la noticia el día de reyes. Ya estaba de dos meses, y yo solo me había enterado hace exactamente unas dos semanas antes.

¿Qué cómo reaccionó? Lo primero que hizo fue llevarse las manos a la boca y luego a la cabeza, y empezar a llorar. Llorar como un niño pequeño, cuando no le dan algo. Y luego se acerco a mi y me beso mientras me alzaba al aire.

Cuando ya estaba en el tercer mes de embarazo fue cuando se lo contamos a nuestras familias y amigos y todos estaban como locos.

En una de las revisiones nos dijeron que no venía un solo bebé, sino dos. No uno, dos. Eso fue bastante inesperado.

Lo pasé algo mal con el embarazo, no podía comer algunas de mis comidas favoritas, estaba cansada y me pasaba casi todo el día vomitando en el bate. Unas ojeras que no había tenido en la vida, unos dolores horrorosos. Pero todo valió la pena.

En julio, nacieron mis pequeños. Nuestra pequeña Charlotte y nuestro pequeño Leo, nuestra parejita. Leo, es una réplica idéntica de su padre Charles, y Charlotte se parece bastante a mi.
Son nuestros tesoros más preciados, son mi vida.

El parto salió bastante bien por suerte, claro que fue dolorido. Pero sin complicaciones ninguna que eso es muy bueno. Dos horas y media aproximadamente duro el parto.
Charles no se separó de mí en ningún momento, estuvo ahí siempre apoyándome y dándome aliento.

Cuando escuche el llanto de mis pequeños, me derrumbe, por fin los tenía ya conmigo, después de nueve meses, por fin podía conocerlos y ver sus caritas.

Y cuando me lo pusieron en el pecho, dios esa sensación nunca la he sentido, es una sensación tan bonita, tan de verdad. Se crea un núcleo, una magia indistructible.

Cuando los dos abrieron sus ojitos por primera vez, nos quedamos embelezados, Leo tiene los ojitos más verdosos y azulados y Charlotte tiene los ojos como yo, color miel, una mezcla de marrón y verde.

Para el padrino y madrina de los bebés, madre de dios la que se monto. Todos querían ser. Y obvio que no se pueden escoger a todos, y no tenemos miles de hijos, sólo dos.

Después de darle demasiadas vueltas a la cabeza, por fin elegimos a los padrinos y madrinas de nuestros bebés.

Leo, elegimos que su padrino fuese Arthur, el hermano de charles, porque desde que nació ha estado con él, parece otro bebé más, está casi todo el día en casa. Pero para nada es un estorbo, además ayuda mucho. Y madrina, elegimos a mi mejor amiga Jimena.

Charlotte, elegimos que su padrino fuese mi mejor amigo carlos sainz, desde que conoció que estaba embarazada, él fue al primero que se lo conté, estuvo ahí en todo momento al igual que siempre lo ha estado. Y se que mi pequeña no va a poder tener mejor padrino que él. Y de madrina elegimos a isa, charles pensó en la idea de poner a la pareja junta y pues asi fue. La pareja padrino y madrina de mi niña.

A todos se nos cae la baba con estos dos terremotos, cuando empezaron a andar, teníamos que ir corriendo detrás de ellos, nos tenían como locos.

Amo a mis hijos, amo a mi marido, a mi familia, amigos, mi hogar.

Cuando estaba embarazada, no pude ir a todas las carreras, solo a las que estaban más cerca de casa. Recuerdo que lo pasaba mal, bastante mal. Estar en casi sin estar allí, sin saber que es lo que pasa al 100%, me ponía nerviosa y extresante, se que era malo para el embarazo. Por eso, me intentaba tranquilizarme un poco. Verlo por la televisión, era frustrante, prefiero mil veces verlo allí que es mejor.

Después del verano, porque tuve suerte que parí en verano, y que charles estaba en casa. Si que fui a todas las carreras y con la compañía de mis dos inseparables.

Vamos a todas los cuatro, Leo, Charlotte, Charles y yo. Los cuatro juntos siempre.

nuevo capitulo!!

este ya sí que sí que es el último y no sabéis la pena que me da 😢, pero como todo lo bueno siempre acaba. Y estoy aquí ha acabado.

espero de todo corazón que os haya gustado, tanto como a mi escribirla y compartirla con todos ustedes 🥺.

Ahora que ya estamos en el final, me gustaría leer vuestras opiniones sobre la novela, si puede ser posible.

Muchas gracias por todo ❤️

Sheila ✨