No juegues con mi mente (Steve Rogers y tu)

La cena especial

Las cosas fueron cambiando poco a poco, las peleas con Steve habían terminado, nos llevábamos de maravilla, y se puede decir que somos oficialmente una pareja.

¡YAY!

Eso mismo.

Nat obviamente fue la primera en enterarse, y unos días después se enteró el resto de los habitantes en la torre. Estos mismos, se lo tomaron de muy buena manera, incluso incitándonos a festejar, menos dos personas: Clint, quien nos reclamó que por nuestra culpa perdió 50 dólares con Tony; y Bruce, quien hizo un pequeño escándalo.

-______, no podés tener novio-

-¿Y eso quien lo dice?-

-Yo.- rodé los ojos

-Bruce, no sos mi papá, y ya estoy grande-

-No lo estás, y soy tu hermano mayor adoptivo, que es mejor que tu padre- lancé una carcajada

-Bruce, prometo no hacerle daño y cuidarla con mi vida- sonreí con el comentario de Steve, era un tierno.

-Oh si, claro que lo harás, mas te vale ni siquiera pensar en... Fondue con ella... por que si no- levantó su dedo acusadoramente

-Si no, ¿qué?- dije media ofuscada

-Llamo al otro tipo- y dicho esto, el científico se retiró de la sala, como una diva... juntarse con Tony no le hace bien... ¡claro que no! Ahora son dos las que se creen Beyoncé, no solo Stark.

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Una semana después de hacer lo nuestro oficial, Steve me invitó a cenar, dijo que el lugar era bastante elegante, así que tuve que usar un vestido. Por suerte, tenía el ideal.

Un vestido blanco, con cruces latinas estampadas, largo hasta medio muslo, y musculosa, tenía además una pequeña franja de encaje debajo del busto. A eso le sumé zapatos negros de taco aguja, un sobre del mismo color, y mi pelo suelto, sobre mis hombros. Una vez que completé mi escaso maquillaje, salí del cuarto.

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-Wow-

-Doble wow-

-Triple wo-

-Tony, no te metas- el susodicho comenzó a reírse -_____... estás...-

-Increíble, hermosa, sexy, te salto encima, si me dejás te doy fondue hasta que Clint deje de hablarle a sus flechas, Thor largue el martillo, y Fury-

-¡TONY! ¡ACABO DE DECIR QUE NO TE METAS!-

-Y yo no te hice caso... vamos no te asombres Cap, que es algo normal- ambos rodamos los ojos

-Como te decía estás preciosa-

-Gracias- dije colorada hasta la médula, este hombre me hacía poner mas nerviosa cada vez, y el hecho de que estuviera con traje de etiqueta negro, camisa blanca y una bonita corbata a tono del traje, tampoco ayudaba.

Por que vamos, ¡parecía un maldito dios griego!

Pero más vestido que los griegos.

Claramente más vestido, aún que dudo que me moleste si... nos deshacemos de tantas prendas...

¿No era que "nada de pensamientos pervertidos hacia Rogers"?

No, no, no, yo dije que VOS no podés pensar así, yo sí, estoy en todo mi derecho, soy la novia.

Ahg

-______...-

-Ay, si, perdón, me tildé-