No juegues con mi mente (Steve Rogers y tu)

Despertar

Luz blanca detrás de mis párpados... otra vez... y me dolía todo... no, de nuevo no morí... Fuif...

Eso sí, me deberías felicitar, 2/2. Fui a dos misiones importantes, me desmayé al final de las dos.

Todo un record.Ironía a parte...

Aplausos por favor.

...

O tal vez no...

Abrí los ojos, a diferencia de la vez anterior, estaba completamente sola; me incorporé muy despacio, y dolorosamente llegué a sentarme. Revisé mi celular, 30 llamadas de mi mamá... ahora que lo pienso, hubiera preferido estar muerta...

La llamé y le expliqué todo rápidamente, ahí me enteré que había estado "dormida" por un casi un día entero, o sea, pasado mañana era mi cumpleaños; le prometí que después la llamaría para hablar más tranquilas y le corté.

Justo cuando colgué con ella, entró la enfermera. Una mujer de entre 40 y 50 años, bajita, regordeta y con cabello castaño.

-Veo que ya despertó, señorita Kelly-

-Si, emmm, gracias...- e hice un ademán con la mano, para saber su nombre, no me gustaba ir leyendo mentes como si nada, trataba de usarlo solo si era necesario

-Joan-

-Joan... me podrá explicar que me pasó, por favor-

-Oh, claro querida, lo del tiro lo sabías ¿no?- asentí- bueno, resulta que pediste el conocimiento debido al sangrado, tenías una costilla rota, pero en unas horas terminará de cicatrizarse-

-¿Cómo? ¿Los huesos no tardan semanas en sanar?- la miré extrañada, esto era realmente raro.

-Si, es cierto, pero tuvimos que hacerte una transfusión, y el único con factor 0 negativo, era tu novio, su sangre modificada, hizo que te cures mucho más rápido, pero de todas formas te va a doler por un tiempo...-

-¿Novio?- aún más raro, yo y novio, no eran cosas que combinaran...

-Si... el Capitán Rogers... que por cierto lo tengo que llamar, me dijo que lo haga ni bien despiertes. Pero tranquila, si era secreto, no digo nada - y me guiñó un ojo, mientras agarraba su celular.

Solté una carcajada, mientras me sostenía la costilla. La muy perra dolía mucho. Pobre Joan, no entendía nada. Una vez que me calmé le aclaré

-No lo llames, quiero decirles yo, y no es mi novio, señorita Joan- le sonreí de lado

-Oh, yo pensé que si- comenzó a sacarme la intravenosa del brazo -estaba tan desesperado... él mismo te trajo en brazos, y casi se tira sobre la aguja cuando pedimos que alguien done sangre. Incluso estuvo toda la noche acá con vos, bueno, los demás también, pero él parecía un perrito mojado, te agarraba fuerte de la mano y todo... se fue a regañadientes cuando Fury los mandó a descansar esta mañana-

Inconcientemente me sonrojé y sonreí. Él se preocupó por mí...

Es tan lindo...

Basta. Habías prometido no decir cosas así sobre él.

Pensás que es lindo o ¿no?

Si, pero nada más.

Entonc-Ni una palabra más, y esto, a nadie, o te mando a Romanoff.

Okayyyyy

-Para no ser novios, se gustan bastante mutuamente-

-¿QUÉ?- a estas alturas, ya era un tomate de lo colorada que me había puesto