Una mirada rota, una mirada perturbada... sus pupilas parecían vacías, sin alma... había lágrimas, muchas, también había algo más en aquellos ojos que me miraban fijamente, cuya expresión me resultaba alarmante... cuya mirada era ...
Era... algo peculiar...¿Qué era lo que poseían aquellos ojos?
¿Aquellas familiares pupilas?
Yo reconocía ese color de ojos.
Ah si, aquellos ojos le pertenecían a Tom.
Estos mismos se abrieron de par en par cuando relamí mis labios. Me sentía aturdido tan pero tan aturdido como confundido. ¿Me había desmayado otra vez? ¿Estaba en su regazo? Era demasiado cómodo para ser su regazo... pero la vista...
—¿Cómo te sentís? —Una vez sentado, entendí que estábamos en nuestra habitación, sobre la cama, Tom me miraba desde arriba, perturbado, algo angustiado.
Me sentía muy aturdido. Cómo si alguien hubiera metido mi cerebro en una licuadora y luego lo hubiera puesto otra vez en mi cabeza.
-¿Me desmayé? - Tom parecía no entender mi pregunta, se mordió su labio inferior y desvió la mirada. - Perdón... no quise desmayarme... sólo recuerdo que hablábamos... y luego, no sé. - Empecé a sentirme culpable, culpable de no poder mantener una conversación. - Perdón si te deje preocupado.
Me miró, estaba más perturbado de lo normal. ¿Estaba por tener un ataque de ansiedad? Se veía como un niño asustado.
-¿Tom? - Volvió a hacer eso con su labio inferior, volvió a mordérselo, parecía que iba a lastimarse con la fuerza que lo hacía. -¿Qué ocurre? ¿Te asusté?
-No es nada. - Me dijo, sin mirarme a los ojos. Seguía angustiado. Me levanté.
Me dirigió la mirada, algo estaba diferente, parecía ser el Tom de antes... el Tom que yo había conocido. Se abalanzó sobre mi, abrazándome con fuerza, con cierta saña. Sus brazos rodeaban todo mi cuerpo, y me apretaban tanto que tuve que reacomodarme para poder respirar bien. Le correspondí.
-¿Algo pasó? - Si tan solo pudiera recordar de que iba nuestra charla, recordaba partes, y casi nada sobre ello. Sabía que habíamos hablado sobre como yo había llegado aquí y luego... casi no podía recordar nada. Estaba muy agotado, y cuando estaba tan agotado mentalmente antes de desmayarme, no recordaba bien los acontecimientos previos.
No dormir te consume la memoria.
Incluso, había veces que dudaba de si las cosas realmente habían pasado, o había sido un sueño.
No dormir era peligroso.
-Lo siento... - ¿Tom estaba llorando? Su voz se escuchaba como si lo hiciera. Cuando comencé a escuchar sus sollozos lo confirmé. Estaba llorando.
Nos mantuvimos en la misma posición un buen rato, hasta que él se calmó. O al menos su respiración.
Nos separamos, un poco, no quise invadir su momento de liberación emocional con millones de preguntas. Pero moría por saber que había pasado.
No me miró a los ojos, simplemente se quedó cabizbajo. En pleno silencio.
-Te voy a contar...
¿Contar?
-¿Sobre qué?
-Sobre mi vida, mi familia. Creo que te lo debo.
¿Qué ocurría con él? El hombre con el que yo había estado hablando antes de caer dormido/desmayado, era alguien frio, seco, en cierto punto enojado. Pero este ser humano frente a mi, era otro hombre, un hombre que creí no volvería a ver. Pero lo tenía frente a mi.
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Power, guns and Control- Segunda parte.
Teen FictionLas cosas cambiaron para Tom Kaulitz, la soledad ya no es parte de su vida diaria. Por fin tenía a alguien en su vida, pero...¿Era realmente lo que quería? Nueva ciudad, recuerdos, dilemas... Las cosas estaban fuera de su control. Debía encontrar...