Saliendo de la tienda, Emi se reunió con los seis hermanos y Diavolo, quienes la esperaban fuera.
-Dónde está Lucifer? - preguntó el príncipe lanzando su duda para todos, para quien quisiera responder.
Al mismo tiempo, se acercó a Emi y le tocó el brazo con su mano derecha, quitándole cualquier marca que haya podido dejarle el golpe de aquel maniquí.
-Creí haberle pedido que cuide de mi aprendiz - prosiguió Diavolo con su consulta.
-Si Lord Diavolo- contestó Asmodeus - resulta que Simeon llamó, hubo un accidente grave con Arly en la práctica de pociones y el tuvo que ir por ella.
El demonio de la lujuria sobredimensionó un poco el asunto del problema con las pociones, para tratar de salvar a Lucifer de la posible llamada de atención.
-Oh - dijo Diavolo sorprendido - bueno, eso es entendible.
-Y me dejó a cargo - continuó Asmodeus - pero Mara pasó por mi costado en un instante. Es muy rápida.
-Si, lo noté - asintió Diavolo, quien también había apreciado ese detalle, recordando la fiesta y el asunto de la bebida y también la forma en cómo se acercó a los hermanos según lo que le contó Lucifer, quien tuvo que actuar rápido dos veces para atajar la mano de la mujer.
Los otros hermanos sólo sabían a grandes rasgos lo ocurrido en la tienda por Asmo, pero como Emi salió de la tienda al momento, no pudieron oír más detalles.
-Bueno, si nos disculpan, Emi y yo debemos volver al castillo a atender asuntos de tutoria - dijo el príncipe con una sonrisa, tomando las bolsas que Asmodeus tenía - gracias Asmodeus, por cargarlas. Y también por ayudar a Emi en las compras.
-De nada, no es nada! - dijo acercandose a Emi para darle un beso de despedida - es un placer! Nos vemos luego, querida amiga.
-Nos vemos Asmo - dijo sonriendole tiernamente - Y adiós a todos! - ahora se despedía de los hermanos agitando su mano - disculpen que no cene con ustedes, oh y despidanme con Lucifer.
-Bien, le diremos - respondió Belphie.
-Nos vemos! - se despidió Mammon.
El joven maestro posó su mano en el hombro de Emi y desaparecieron.
-Ahora sí Asmo, cuenta que pasó - exclamó Levi, ganándose la aprobación de todos.
Pronto, el demonio bonito se vio rodeado de sus hermanos, y con aires de importancia, empezó a contar sobre la bruja de Mara, la intrépida Emi y el valiente y encantador Diavolo, todo mientras movía sus manos, al tiempo que caminaban al café de la esquina.
La mujer dentro de la tienda veía como todos se marchaban a través del vidrio del exhibidor, ya más calmada pero con suaves temblores en su cuerpo.
De pronto fue sorprendida por unos ojos anaranjados que voltearon en su dirección. Beel había sentido la mirada de ella, y está solo le sonrió por formalidad y se alejo del vidrio.
-Debieron ver como toda su vanidad se esfumaba cuando lord Diavolo apareció - finalizó Asmodeus, burlonamente - se lo merecía.
-Los llamados son cosa seria - añadió Levi - no puedes negarte a ellos, es como si fueras un personaje en un juego.
-Creo que no deberíamos burlarnos - mencionó Beel con una expresión algo triste - debió haberse asustado, Diavolo es de los más poderosos aquí.
-Bueno, tienes un punto - afirmó Satan, concordando con su hermano - aún así, ella no es de mi estima.
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Lord Diavolo > I obey you
FanfictionLord diavolo decide mejorar su exitoso programa de intercambio añadiendo un humano más al proyecto para que viva con el.