Lord Diavolo > I obey you

P R I M E R M E S - I

Todos sabían lo que debían saber, y ahora solo restaba esperar los seis meses que duraba la estadía de Emi, con todo lo que eso implicaba. Bueno y malo.

Barbatos había jurado proteger a ambos, y rogaba para sus adentros, con todas sus fuerzas, que el gran señor del infierno no visitara de sorpresa el castillo.

Era sábado, la primera semana de clases de Emi se había cumplido exitosamente, y en la oficina de Diavolo, ambos estaban sentados en los muebles de la pequeña salita de espera, los fines de semana eran clases y tutorias dirigidas exclusivamente por el lord.

-Todo esto es tan fascinante - Dijo Emi terminando de leer un libro, no muy grueso, sobre la historia de Devildom y los ángeles caídos.

-Mis libros son los mejores - sonrió triunfal - ayudará mucho que los leas todos de la mano con mis clases Emi, para complementar.

Eran aproximadamente las 5 de la tarde, la luz de la lámpara de pie caía directo en la mesa baja donde estaban los libros que Diavolo y Emi leían, ambos sentados en el sofá cercano.

Adoraban tener ese pasatiempo en común, que cómodo era leer así con una buena compañía. Y si tenía dudas, él dejaba su lectura a un lado y le respondía, aún cuando estaba en alguna parte interesante.

-Milord? - dijo Emi a manera de consulta, dejando su libro con separador en la mesita.

Diavolo levantó la mirada de su libro al segundo.

-Dime - sonrió.

-Qué le parece si nos conocemos? Si hablamos de nosotros a fondo!

-Vaya...- eso había tomado por sorpresa al demonio, quien asintió emocionado y dejó su libro también en la mesa.

-Estaba pensando- giró su cuerpo hacia él en el sofá - en hacernos preguntas, como un juego! - se emocionó.

-Si sí, entiendo, un juego! - giró su cuerpo hacia ella también, más emocionado.

-Quién empieza mi lord, creo que usted por supuesto - dijo amable.

-Mmmmm- él achinó los ojos - me gustaría que, cuando estemos solos, me hables de a tú, sin formalidades.

-Imposible - negó con la cabeza muchas veces, de forma infantil - el respeto es importante, en la relación que sea, y usted siempre estará por encima.

-Te lo pido de favor - dijo él, sincero.

-Oh...- Emi suspiró - de acuerdo, entiendo.

-Bien, entonces?...

-Entonces... Diavolo (?) empieza tu!

-Excelente - se cruzó de brazos feliz - pregunta!.... Qué pensaste de mi, cuando me viste en persona... Ese día en tu cuarto?

La miró expectante, enserio quería saber que pensaba, no usaría ningún truco, quería que ella se lo dijera.

-Bueno..- se removió en su asiento nerviosa - a primera vista, no te reconocí como el lord, estaba adormilada también, pero.... En los libros luces... Algo distinto.... Aunque pude percibir que eras tu... Entonces... eras un hombre alto, hermoso y misterioso, en el marco de mi puerta... Pensé que era un sueño - se avergonzó- porque tu rostro no es de este mundo, de hecho...

El demonio tenía los brazos caídos a los lados, sorprendido, y con un suave tono rosado en sus mejillas, la abrupta sinceridad de la joven lo golpeó de frente "Que bueno que me atreví a preguntar"

-Como me retratan en los libros? Dime - demandó confundido, ahora que lo pensaba, ella se enamoró de él por su forma de ser, pero tenía curiosidad por cómo los humanos podían interpretar su forma física.