CAP, 01.

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Giacomo Di Crescenzo.

Hay algo fascinante respecto a ver a Dea toda embarrada de mí, cubierta de lagrimas y temblando mientras sube por todo mi abdomen dándome me besos. No puede más, está agotada porque la he destrozado de manera de despedida. No importa si mañana hay clases, ella es el tipo de persona que necesita esas dosis de mariqueras para seguir tras de mí cuan perra y no es precisamente porque ella se crea la princesa de algún tipo de película, es su naturaleza y mía saciarla. Hacerla temblar.

La pelirroja acerca los wipes que están en la repisa de mármol macael y no me pide que la limpie porque sabe que no lo haré. En el proceso en el que arrastra la toalla con humedad, se quita el maquillaje y deja ver su piel que está bronceada por los días que hemos pasado expuestos al sol, las pecas le brillan y los ojos negros se ven resplandecientes y agotados. Los labios están hinchados, de un color cereza absurdamente brillante que siempre hace contraste con la piel pálida.

—Sabes que estoy preocupada—Suelta lo que no debe de estar cerca de mis prioridades pero que me llama la atención, Dea prefiere sacarse las prótesis que carga en los senos antes que dejar caer la máscara con la que se presenta ante el mundo.

—¿Y eso se debe a?—Curioseo mientras masajeo su culo. Está encima de mí, los dos acostados en la cama color crema del camarote y nuestras intimidades chocando sin ningún tipo de intención oculta, lo que le frustra un poco a mi miembro.

—A Ludo—La mención de su gemela sólo me lo pone mas duro y ella ni cuenta se da. Así es Amedea Greco, cree que el mundo gira por y para ella.

—¿Qué tiene tu hermana?—Sube el rostro para mirarme fijamente, en búsqueda de quizá una interacción diferente que no va a suceder. Mi padre me dio las bases suficientes como para engañar a mi mamá y decirle que choqué sin intención con ella, llorando inclusive, cuando lo único que deseaba realmente era asesinar a la atrocidad que crecía dentro de ella. Stella Angelo me trajo al mundo y por ende su única misión es amarme a mí, excedo el círculo a máximo el esposo porque los tres funcionamos cual pirámide, en mi puta vida permitiré que tal mierda se rompa porque es la única estabilidad que deseo tener en mi vida.

No soy un niño estúpido, idiota o imbécil. Sé muy bien que mi padre tiene una obsesión insana con la prima, Suzanne Sculla, pero también sé que mas nada sucederá ahí porque su fidelidad a mi mamá es superior, le gana al deseo que puede sentir por la otra o inclusive al amor, lo que nosotros necesitamos es diferente. Medio salimos de la obsesión de Lorenzo hacia Suzanne cuando esta se casó con Despiadado Bleu sin mirar a quien, pero lo hicimos en definitiva cuando le explotaron el culo junto al marido en la camioneta que iban. Un asesinato altamente sospechoso según mi parecer, pero la información que me brindó Dante fue esa junto a un video y una frase ridícula y especulativa: muchas cosas cambiarán, joven. Las flores cambian de estado. Las estaciones cambian cada periodo de tiempo. Las cosas en mi casa siempre se mantendrán y ahora por fin podremos salir de tal tormento porque Stella es otra que también tenía algo altamente sospechoso con Despiadado Bleu y esa es una de las razones por las que ya quiero y necesito volver. Disfruto el tiempo con mis amigos, como perdemos el tiempo mientras paseamos por las costas sicilianas, sin embargo, necesito encarar a mi mamá para que me de razón de su estadía tan alargada en Russia. Dijo que se iba por un mes o una mierda así, pero terminó pasando meses, contando mi cumpleaños, lo que me hizo apagar el teléfono y aplicarle el hielo hasta que me de una razón con justificación suficiente.

—Desde que coge con Franco el cambio es absurdo, ¿viste que ya ni siquiera es pelirroja?—Todo se mueve en mi cabeza cuando escupe el mayor descubrimiento de mi viaje. Sabía que pasaba algo con ella desde el momento en el que me le acerqué hace dos noches y me dijo que por razones íntimas no podía hacer nada. Asumí que estaba en sus días y no que se follaba a mi maldito mejor amigo.

SIGILIO: Cadenas. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora