⚜ De hombres y ángeles ⚜
(Editado)
Pov. Mia
— ¿Y ahora qué? —. Preguntó Magnus con aburrimiento al vernos. Traía una copa de algo verde humeante en una mano, y con la otra sostenía el borde de la puerta con ayuda de sus anillos en formas de garras.
Clarissa y Simon jadearon cuando Luke comenzó a desplomarse otra vez. Todo su mentón estaba cubierto de baba espumosa y tenia espasmos cada cierto tiempo.
— ¡Lo atacaron! —. Respondió con dificultad Simon, la posición con la que sostenían a Luke tampoco ayudaba.
— Necesita un brujo —. Habló Clarissa jadeante, sus ojos estaban nublados por las lagrimas.— Te necesita a ti.
Me adentré a el departamento de Magnus con delicadeza, tratando de no molestar a los chicos. El departamento de Magnus estaba extrañamente limpio y ordenado, todo lo contrario a la apariencia del brujo.
— Pónganlo aquí —. Pidió el brujo mientras colocaba una sábana blanca en el sofá.
Ambos con mucho cuidado colocaron a Luke en el sillón, dejando caer su cuerpo lentamente, sin embargo, el lobo chilló de dolor apenas rozó la tela manchándola a su vez.
— Agh —. Jadeó el hombre lobo por el ardor. Hice una mueca por el intenso olor de la sangre que inundó la habitación. — ¿Dónde estás? —. Comenzó a murmurar desesperado.
— Luke —. Lo llamó Clarissa con preocupación.
— No puedo encontrarte —. Siguió susurrando mientras movía desconfiado sus manos, tanteando todo lo que pudiera alcanzar.
Deje mis armas en una mesita del brujo y me recargué en una columna. Me sentía sobrante en todo esto de una u otra manera.
— ¡Jocelyn! —. Comenzó a gritar.
— No, Luke —. Respondió Clarissa al ver qué el hombre lobo la confundió con su madre —. Soy Clary, ¿Me oyes?
Me removí incomoda. ¿Qué diablos íbamos hacer si la clave se enteraba de que por nuestra culpa moriría un hombre lobo?, no solo iba a ser enviada a Idris de por vida, sino que me obligarían a limpiar el equipamiento de los demás por lo que me quedara movilidad.
— Clary, escúchame —. Pidió el hombre lobo entre su delirio, mientras yo solo podía rezar para que no muriera. — Debo contártelo, por si acaso...
— No, no pienses en eso —. Pidió Clarissa llorando, se escuchaba muy mal.
Dudé si acercarme o no. ¿Seria correcto?, ¿Me recibiría, o me rechazaría?
— Escúchame —. Insistió —. ¡Necesitas saber!
Clarissa siguió negándose a escucharlo hasta que Magnus con un chasquido de dedos, y una pequeña nube purpura, durmió a el hombre quien cayó rendido entre la sabana.
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The Morgensterns (EDITANDO)
Fanfiction☼ 𝐋as gemelas Morgenstern ☾ ⚜ 𝐽𝑎𝑐𝑒 𝐻𝑒𝑟𝑜𝑛𝑑𝑎𝑙𝑒 𝑦 𝑡𝑢́. ⚜ 𝑁𝑖𝑛𝑔𝑢𝑛𝑜 𝑑𝑒 𝑙𝑜𝑠 𝑝𝑒𝑟𝑠𝑜𝑛𝑎𝑗𝑒𝑠 𝑚𝑒 𝑝𝑒𝑟𝑡𝑒𝑛𝑒𝑐𝑒𝑛 𝑒𝑥𝑐𝑒𝑝𝑡𝑢𝑎𝑛𝑑𝑜 𝑎 𝑀ia 𝑀𝑜𝑟𝑔𝑒𝑛𝑠𝑡𝑒𝑟𝑛. 𝐸𝑙 𝑟𝑒𝑠𝑡𝑜 𝑒𝑠 𝑑𝑒 𝑙𝑎 𝑒𝑠𝑐𝑟𝑖𝑡𝑜𝑟𝑎...