𝗢𝘂𝘁𝗰𝗼𝗺𝗲 [𝗱𝗲𝘀𝗲𝗻𝗹𝗮𝗰𝗲]; 𝗺𝗼𝗱𝗼 𝗲𝗻 𝗾𝘂𝗲 𝘀𝗲 𝗿𝗲𝘀𝘂𝗲𝗹𝘃𝗲 𝗼 𝗮𝗰𝗮𝗯𝗮 𝘂𝗻𝗮 𝗮𝗰𝗰𝗶𝗼𝗻.
Michiko Tsunemori ha logrado sobrevivir a las cartas bajas, encontrándose sola en Borderland sin su mayor apoyo.
Perdida y sufriendo l...
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LEVELTWELVE; CYNICISM
NO RECORDABA LO QUE SE SENTÍA ESTAR SOLO, hasta que perdió a Michiko. No la había perdido en el sentido a lo que muchos solían referirse, pero definitivamente verla perderse entre la maleza de Borderland consumida bajo el dolor y la locura había sido un golpe bastante duro. La quería. Veía en ella a una amiga, a una hermana, a una compañera; aún si ella era incapaz de verle más que como un estorbo y alguien despreciable, él seguiría queriéndola de la misma manera.
La lluvia caía sobre su cabeza camuflando sus lágrimas, y sus pasos se escondían entre el sonido de las gotas caer con fuerza contra los edificios y coches abandonados. El K♠️ estaba rondando aún por Borderland, alzando con altivez aquella enorme pancarta que decía más de lo que parecía. Borderland se burlaba de ellos. Borderland les recordaba lo débiles que eran. Borderland los transformaba en monstruos.
Creyó ver al fondo como un dirigible estallaba, y sólo pudo pensar en Michiko de nuevo. Siempre que pensaba en ella, la angustia se apoderaba de él junto con el miedo. Apenas quedaban juegos disponibles, pero sabía que si quería encontrarla, solo debía seguir el dirigible de Q♥️.
- Maldita sea... - y, pensando de nuevo en los corazones que acababan de caer, recordó a Kou. Pateó con fuerza un arbusto, teniendo la mala suerte de que tras este había una piedra con la que se golpeó el pie. Gritó de dolor. Gritó de cansancio. Gritó de miedo.
- ¿Hideki? - llamó alguien tras él, sacándole de su agonía personal. Se giró de golpe al no haber podido identificar bien el timbre de voz por la lluvia, aunque la persona tras él fue definitivamente un paraguas en ese desastre-. ¡Estás vivo!
Recibió con el mismo entusiasmo a Saiko, dejando que esta se abrazara a él, ambos llenando por un momento su vacío en el otro.
- L-Lo siento tanto... -sollozó Hideki. Creía también haberla perdido a ella-. M-Michiko...
- ¿Es cierto? - se separó, mirándole fijamente. Estaba empapada, igual que él, y bajo sus ojos destacaban unas grandes y oscuras ojeras-. Hideki, ¿Michiko...?
- Está viva - asintió. Saiko jadeó, y hubiera caído de rodillas si no hubiera sido porque Hideki aún se aferraba a ella-. Ella ha perdido completamente la c-cabeza, ha tratado d-de suicidarse, ahora está demasiado furiosa y la he perdido - explicó resumidamente.
- Hablemos dentro - señaló un edificio-. Estoy con un grupo, Kuina y Ann están con nosotros.
Hideki aceptó la mano que le ofrecía, dando una última mirada atrás, donde las llamas del J♥️ parecían extinguirse lentamente por el peso de las gotas de lluvia que acompañaban el estado de todos allí.
