De Enemigos a ¿Amigos?

Capítulo 5: Ahora tendrás que pagar

David: 

-¿Qué rayos pasó David?- me gritó mi padre muy enojado.

-No lo sé, si?- dije asustado.

-¿No lo sabes? ¿Te tengo que recordar lo de la cancha de fútbol y lo de la cafetería?- dijo mi padre viéndome.

-No fue mi culpa, yo solo me defendí, me echó harina en la cara y luego me quitó mi ropa enfrente de todo el salón, ¿qué iba a hacer? ¿dejarlo solo así?- dije enojado, porque me estaba culpando a mi.

-Raúl, ya déjalo, el solo se defendió, probablemente no fue la manera, pero al menos esta bien y no le pasó nada- dijo Sofía tratando de calmar la situación.

-No necesito que me defiendan- dije molesto viendo hacia al piso.

-Llevo casi dos años casado con Sofía y sigues faltándole al respeto- dijo mi padre aún más molesto.

-Es mi problema, si? Es mi problema si no me dejo intimidar y es mi problema si sigo en desacuerdo con tu matrimonio, de acuerdo?- dije para luego darle un golpe a la mesa e irme a mi cuarto.

Subí a mi cuarto y me encerré, me tiré a mi cama y empecé a sollozar, y luego de un rato escuché que alguien tocó la puerta.

-Vete papá no quiero hablar!- grité desde mi cama.

-No soy tu padre- dijo Sofía- ¿Puedo pasar?- preguntó, pero no respondí.

-David- dijo Sofía y tocó la puerta- voy a pasar.

Y escuché como con una llave abrió la puerta. Yo solo me tapé con mi sábana. Y sentí como se sentó a un lado de mi cama.

-Tranquilo, tu padre ya se calmó, pero tú ¿cómo estas?- dijo poniendo su mano en mi hombro, pero yo aún seguía tapado.

-¿Te puedo destapar?- preguntó Sofía.

-Depende, esta mi papá?- pregunté a punto de llorar.

-Ey, tranquilo, no está, salió a ver una cosas de la empresa, por eso subí a verte, te voy a destapar, okey?- dijo pero no obtuvo una respuesta de mi parte.

Me destapó y al ver mi cara me abrazó, le devolví el abrazo y trataba de tranquilizarme mientras sollozaba.

-¿Mejor?- me preguntó Sofía luego de un rato.

-Sí- dije y me acomodé mejor en mi cama- lo siento- dije algo avergonzado.

-¿Por qué?- me preguntó mientras limpiaba algunas lágrimas que quedaban en mi cara.

-Cuando dije que seguía en desacuerdo con tu matrimonio con mi papá, soy un tonto, tú siempre haz sido buena persona conmigo y yo no- dije un poco triste.

-Ey, tranquilo esta bien, y no digas esas cosas de ti, no eres ningún tonto, tú seguías dolido por la muerte de tu madre y por las actitudes de tu padre y antiguas madrastras- dijo acariciando mi espalda.

-Es que siempre fui egoísta contigo y nada justifica mis actitudes- le dije.

-Tienes razón, las actitudes no se pueden justificar, pero si se pueden entender y créeme te entiendo bien , yo tuve un padrastro- me dijo.

-¿Enserio?- pregunté mientras la volteaba a ver.

-Si y el fue un idiota conmigo, por eso me prometí que si algún día tenía hijos los trataría bien, como me hubiera gustado ser tratada- me dijo- Pero ya que no tuve hijos, puedo hacerlo con mis hijastros- dijo y asentí.

-Yo no sabía eso- pregunté viéndola y ella rio levemente.

-Tus hermanos sí lo sabían, por eso me aceptaron, porque les conté, si me hubieras escuchado, probablemente nos hubiéramos llevado bien al principio, pero no importa, todos cometemos errores, lo que importa es lo que hacemos después- dijo mientras me acariciaba levemente la espalda.