Capitulo 20:Me Quedare

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Los meses comenzaron a transcurrir y aunque no dejaban de buscar al chico pronto tuvieron que continuar con sus vidas normales, todos ellos. Bakugo "parecia" decaido por la falta del menor en su entorno, eso creían todos al menos, principalmente su animado grupo de amigo que intentaban siempre mantenerlo alegre , Midoriya estaba mas apegado al de cabellos rubios preocupado por su salud emocional.

Bakugo sabia perfectamente que debía fingir adecuadamente la situación, hacia tiempo le había dicho a sus amigos de su enamoramiento con el bicolor, aunque claro no les dijo que estaba mas que simolememte enamorado de su persona, sus sentimientos eran por demás fuertes y poco sanos. Los chicos pese a ser idiotas segun el mismo no serian del todo idiotas si se comportaba como siempre o demostraba su alegría por tener al bicolor en su departamento, lo notarían, notarían extraño que no estuviera aunque fuese un poco mal por la desaparición del chico que le gustaba. Así que dividió fingir, y se le daba bien.

—¿Quieres que te acompañe a tu casa Kacchan? Mañana te graduas de la universidad, puedo quedarme a dormír y ayudarte con los nervios —

—No, estare bien, te vere mañana Deku —

Se escabulló del peliverde antes de que pudiese cuestionarlo aun mas al respecto y de insistirle acompañarlo. Suficiente tenía con que siempre anduviera detrás de el.












[...]









Con el paso de los meses pronto se acostumbró a toda esa situación por la que estaba pasando. Por la luz que se filtraba debido a la ventana podía ver hacia afuera, notando perfectamente que ahora se encontraban nuevamente en primavera. Se acomodo en el sofá que daba hacia la vista por la ventana mirando hacia abajo, su tobillo atado por una larga, larga cadena que le permitía moverse por toda la habitación y hasta el baño.

En todo ese tiempo solo intento huir dos veces, en la primera acabo lastimándo al de cabellos cenizos haciéndolo sentir algo de culpa al notar la tranquilidad y amor en sus acciones cuanto le hizo volver a la habitación. La segunda ocasión pretendió saltar del balcón para así lograr irse, pero tan pronto puso sus pies sobre la baranda se arrepintió al percatarse de la angustia, el miedo, la tristeza que ocasiono en el par de ojos rubíes. Esa noche Bakugo lloro demasiado abrazándole, pidiéndole entre lagrimas, suplicándole que no le dejara, que no le abandonara, que no quería estar solo.

Dolió, le dolió verlo así. Y desde ese momento se comporto siendo tan tranquilo como siempre. El mayor le llevaba cosas para trabajar en sus diseños, además de haberle conseguido cursos en linea con maestro del extranjero ya que claramente dejo sus cursos a medias en la universidad al encontrarse alli dentro. Todo el tiempo de esforzaba de sobremanera en llenarlo de atenciones, de cariño.

Sin poder evitarlo con el paso de los días en los que constantemente pasaban tiempo juntos, conviviendo entre ellos, conociéndose mucho mas término completamente enamorado de Katsuki. Sabia que estaba mal, sabia que no era nada sana la relación que estaban llevando, Bakugo siendo dependiente de el y Shoto permitiendold todo eso sin reprochar o resistirse.

—Sho ya llegue...—

El mayor entro a la habitación yendo rápidamente a abrazarlo y besar sus labios con cariño como ultimamente lo hacían. El bicolor se levantó para recibirlo con una pequeña sonrisa cálida

—Kats..me gustaría eh...¿crees que pueda estar sin la cadena?, me gustaría recibirte en la puerta —

El par de ojos rubíes dudaron y finalmemte asintió con la cabeza agachándose con un par de llaves para para abrir la cerradura de la cadena que no lo lastimaba en absoluto. Y hasta cierto punto se había acostumbrado a ella.

—Vamos a comer, traje pollo frito y compre un pastel de chocolate —

Shoto asintió con la cabeza mientras se sujetaba a la mamo ajena con tranquilidad para dirigirse hacia el comedor, casi siempre comían en la habitación debido al miedo del mayor por que huyera de nuevo, aunque no lo haría.

No lo dejaría, lo cuidaría...aunque estuviera mal se quedaría alli.

LimerenciaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora