Capítulo 12

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—que maldita mierda—todos estaban consentrados leyendo los resultados de la autopsia de todos los cuerpos.

Al parecer encontraron rastros de mordidas en los órganos destruidos, a primera vista parecía que ese maldito enfermo pisaba cada órgano a su gusto y los destruía, pero ahora estaban lidiando con una persona que le gusta comer ¿humanos? .

—está mal de la cabeza, realmente muuuy mal de la cabeza— la joven peli marrón dio una mueca de asco, cada día lidiaban con problemas relativamente normales y hasta asesinatos pero nunca algo tan sadico e inmundo.

—también encontre un cabello rubio y solo pude determinar que el o la que lo hizo era un omega, porque sus feromonas se inpregnaron en algunos lugares y no se dio cuenta—Izuku tenía la cara muy seria, les estaba explicando a todos lo que pudo encontrar en esa semana sin descanso.

—parece que el asesino sabe ocultar muy bien sus huellas—el peliverde rechino los dientes y frunció el seño.

—hasta pareciera que tiene ayuda de un policía—Kirishima soltó esas palabras y suspiró. Todos voltearon a verlo y se quedaron callados —que? Que pasa? Tengo algo en el rostro?—parecia que tenían la pista que les podría ayudar.

—tiene sentido, nadie puede hacer este tipo de trabajo solo, o el sospechoso fue policía o un policía lo está ayudando— Todoroki tenía la cara seria y los brazos cruzados.

—Esa mierda tiene más sentido, puede que haya un gusano en la policía que está ayudando a ese maldito enfermo—dio un gruñido, Katsuki se paró de su asiento y puso ambas manos en al escritorio—Quiero los registros de todos los nuevos que han ingresado a la policía este mes y de todos los buscados que son rubios y omegas—frunció el seño y se fijó en el chico de ojos verdes, el contrario se puso nervioso y desvío la mirada. Bakugou rodó los ojos y rió.

Enji había dejado el departamento en manos de Bakugou ya que los superiores estaban investigando el caso de un japonés asesinado en China, al parecer es un caso un tanto extraño, pero no se puede evitar.

Todos asintieron y comenzaron a teclear y buscar registros en la base de datos de la policía, tardaría un tiempo, pero se asegurarían de encontrarlo.

Katsuki abrió la puerta de la habitación y jaló a Izuku del brazo, para que salieran de ahí. Todos los presentes se miraron y dejaron salir unas risitas sarcásticas, sabían que sus amigos estaban en algo, pero no querían incomodarlos haciendo preguntas que no vienen al caso. Solo rodaron los ojos y sonrieron, para luego volver nuevamente a sus pendientes.

—Kacchan espera, si haces eso todos se van a dar cuenta, además, tienes que estar con ellos, eres su jefe— el peliverde estaba completamente rojo, siempre que podían se besaban o toqueteaban todo el cuerpo, estos últimos días el que empezaba todo era Bakugou, era sorprendente lo que podía hacer cuando estaba exitado.

—si no quieres que nadie escuche, más te vale morderte el labio. Y... Ya terminé el papeleo que tengo a cargo, no nos molestaran—dio una risa sarcástica y bajo la cremallera del pantalón de Izuku.

—ah~—no conocía a Kacchan así, generalmente él tenía que rogarle e implorarle que le diera un beso, pero una mamada... , en toda su relación solo pasó una vez, y luego el rubio lo ignoró por una semana completa por vergüenza.

—Katsuki~ ah~—el cenizo frunció el seño y paró, sacó el miembro de su boca y lo agarro con la mano derecha, para luego parar y ver a Izuku frente a frente.

Deku abrió mucho los ojos y empezó a temblar, cuando Bakugou se enoja, tiende a torturarlo o a ignorarlo por varios períodos de tiempo ( depende de la situación) , una vez intentó tratar de remediar el problema besándolo pero terminó en el piso y con dolor muscular, conclusión: no hagas enojar a Kacchan.

—Kacchan—

—Q-que?—

—no soy "Katsuki" soy Kacchan—el rubio empezó a masajear con un poco más de fuerza y tapó el conducto para que no pueda correrse—Kacchan, Deku, mi nombre es Kacchan—dio una sonrisa burlona y veia como el peli verde sacaba los colmillos.

—Claro Kacchan, ahora... Por favor...— Deku lo agarro de la cintura y lo apego a su cuerpo,para después hablarle muy cerca al oído.

Ah~ ah~ Bakugou no podía soportarlo, escuchaba los suspiros y los gemidos bajos que hacía Deku con la voz ronca, mientras el peli verde apoyaba su rostro en el hombro del cenizo.

Fue una excelente idea torturarlo, el rubio suspiro y su cabeza empezó a dolerle, la vista se le hacía más nublada y sus ojos comenzaron a brillar. Saliveaba entre jadeos y sus colmillos comenzaron a sobresalir. Por suerte, Izuku no se dio cuenta, de lo contrario, Bakugou no podría explicar el porqué le crecen los colmillos superiores e inferiores.

A diferencia de los omegas, los alphas sólo desarrollan más sus colmillos superiores en caso de una pelea con otro alpha, aunque la verdad no los necesitan realmente. Los omegas sólo lo desarrollan para poder marcar a un alpha, a veces pueden sacar ambos colmillos en señal de defensa o cuando realmente están exitados.

Sacudió su cabeza y aceleró el proceso, de lo contrario, el cuello de Deku no saldría ileso. Paso lo lengua por sus colmillos y cerró los ojos, encucho un gemido un poco más sonoro y supo que por fin terminó. Revolvió la cabellera del pecoso y le dio y beso.

—Tengo que irme Deku— se giró y salió de la habitación evitando por completo la vista del chico que lo veía con un rostro confuso.

Corrió lo más que pudo al baño, abrió el grifo y se puso agua en el rostro. Se dio un golpe mental y buscó en su celular el calendario. Gruño al ver el día marcado y buscó esas pequeñas pastillas masticables que llevaba siempre.

Golpeó el espejo y se cortó la mano, el dolor podía evitar que su ciclo de calor llegase muy rápido, le daba un poco más de tiempo como para ir a su casa y encerrarse.

Podía haberse mordido el brazo, pero simplemente no pudo pensar bien en ese momento.

Llamó a Kirishima y le dijo que su Rut le llegó, así que le encargaba el departamento a Todoroki hasta que el volviese. El contrario solo acepto y corto la llamada.

Paró un taxi y lo llevó muy rápido a su apartamento. Se encerró en su cuarto e hizo un pequeño nido de ropa que le había robado a Deku hace tiempo, busco alcohol y se lavó la mano virtiendo todo el envase sobre la herida. Se sacó todos los cristales incrustados, que por suerte, no habían ingresado por completo y se vendo la mano.

Comenzó a sudar y fue a su nido, se tapó con una sabana y mientras jadeaba cerraba los ojos imaginando que Deku estaba al lado suyo.

Cuatro paredes Blancas [Dekukatsu] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora