Cuatro paredes Blancas [Dekukatsu]

Capítulo 13

<< lo hiciste?>>

—hice lo que tu querías, ahora dejame en paz— había salido del edificio para poder hablar por teléfono sin que alguien lo escuchase. Ahora tenía bastantes problemas, no queria desepcionar a ninguno de sus amigos, y menos a Kacchan.

<< ni siquiera me vas a dar las gracias por darte un trabajo junto a tu maldito noviesito doble cara? >>

—sabes que solo acepte porque me obligaste imbecil, además no te atrevas a llamar así a Kacchan — dio un gruñido y frunció el sueño.

<< JAJAJAJJAJAJA cómo tú digas hijo pero... >>

—no soy tu maldito hijo!  Mas te vale que me dejes de decir así—

<<jaaaa bastardo imprudente, te juro que estaba pensando en dejar el problema ahí, pero supongo que tu no aprendes>>

—NO TE ATREVERIAS—

<<Tu madre debe de estar asustada, hijo, no crees que te sobrepasate conmigo? >> se escucho una risita

—ELLA NO TIENE LA MALDITA CULPA KANO DEJALA— apretó los puños y se mordió el labio inferior, para ese punto sus colmillos habían crecido y no tardó en sentir el sabor a hierro en su boca.

<< me vas a seguir ayudando aunque no quieras hijo de puta, si te atreves a pasarte de listo, ninguno de los dos va a salir ileso>> se escucho un pitido del otro lado de la línea y Deku aplasto su celular provocando que el protector de su pantalla se rompiera.

Por suerte había tomado una dosis para evitar que su estrés se proyectará en sus feromonas , si no lo hubiera hecho, las personas a su alrededor podrían haber estado en peligro.

Se agarro el cabello y cerró lo ojos con mucha fuerza, quería llorar, tenía un nudo en la garganta lo bastante grande como para que no pudiera respirar como se debe. No sabía cómo iba a salir de este problema, cada vez se adentraba más en la fosa y las únicas luces que provocaba su felicidad estaban en peligro.

Le apetecía un cigarro, sabe perfectamente que es un idiotez comenzar de nuevo con esa adicción pero lo necesitaba. Sacudió su cabeza y se dio uno bofetada para despertar del trance.

Suspiro y camino con dirección al Departamento, divisó todo a su alrededor y dio una sonrisa amarga. Era su sueño estar en la policía, pero no de esa forma. Siguió caminando y se chocó con una chica un tanto más baja que el.

—oh! Perdón Deku!— parecía un tanto eufórica.

—Que pasó? Hallaron alguna pista? —

—SI! Gracias a ti encontramos a alguien que coincide en tu descripción, una chica problemática de los barrios bajos, ahora solo falta encontrar al traidor! No te alegra? — la joven le dio una enorme sonrisa.

El peliverde sólo rió un tanto incómodo y se rasco la nuca—me alegro de haber ayudado Uraraka—

La joven levantó la ceja, inclino la cabeza y cruzó los brazos—bien Deku, que te sucede? —

—de-de qué hablas? No-no me pasa nada—

—siempre que mientes tratamudeas Deku, estas preocupado por Bakugou? Tranquilo debe de estar bien en su casa—

—porque Kacchan estaría en su apartamento?— se puso ansioso y apretó a la joven en los hombros mirándola fijamente.

—espera, pensé que sabias, Bakugou esta en su Rut—Izuku se sorprendió, soltó a la joven y se giro.

—no me digas que vas a intentar ayudarlo, sabes que el olor de otro alpha en el Rut puede ser inmundo para nosotros verdad?—la joven lo agarró del brazo y lo veía preocupada.

—Uraraka será mejor que me sueltes— se estremeció al escuchar a su amigo, lo soltó y bajo la mirada, como si necesitará el perdón de ese alpha.

El peliverde se apresuró y condujo lo más rápido que pudo a ese conjunto de apartamento donde ellos vivían.

En sus más de 10 años que se conocen, nunca vio a Kacchan en su Rut. Al parecer era muy irregular y sólo le pasaba 1 vez al año. Nunca tuvo la suerte de ayudarlo,ya que siempre lo veía un poco débil y demacrado, simpre se enteraba muy tarde y solo quedaba resignarse.  Pero ahora era diferente.

Llegó a la puerta de su vecino y empezó a tocar muy fuerte para que le abriese. Espero y pensó lo peor. Los alphas por más que estén en su Rut, siguen siendo cuerdos. Solo espera poder cuidarlo, se puso muy triste al pensar que Kacchan tuvo que pasar eso todos esos años y sin ayuda.

Estaba a punto de patear la puerta y escucho el rechinido de otra abriendose.

—Que mierda haces Izuku?  Esos malditos golpes se pueden escuchar hasta adentro — Kaminari  había salido del apartamento de su amigo un poco somnoliento y cuando escucho esos golpes, pensó que había un tipo de pelea y se desepciono al ver al peliverde.

—Kaminari! Necesito tu ayuda, abre la maldita puerta— señaló la puerta del apartamento 37.

—estas loco? Porque haría esa mierda? Acaso quieres que la policía me termine encerrando otra vez? Ni loco! — el rubio se cruzó de brazos.

—Kaminari hazlo por favor— el contrario se estremeció al ver el rostro de su amigo, ojos brillantes con unos colmillos superiores sobresalientes.

—Bien bien, tranquilo, lo haré— Kaminari busco en su bolsillo y sacó una cuchilla pequeña.

Comenzó a falsear la cerradura y se sentía cada vez peor, podía percibir una mirada inquietante en su nuca. Solo vio una vez así a su amigo, y fue cuando llegó a esa cárcel en Inglaterra.

Por fin, y luego de mucho esfuerzo logró abrir la cerradura. Se levantó, ya que estaba en cuncliyas, y miró con ira al peliverde.

—no me obligues a hacer eso de nuevo idiota, además, que se supone que vas a hacer? Quieres robarle a tu crush o algo así?—

El contrario negó y abrió la puerta nervioso, se estaba preparando para lo peor, un alpha en su Rut.

Pero una briza de feromonas salió de ese lugar, un olor dulce y un tanto picoso. El pecoso paro en seco y el rubio a su lado se tapó la nariz.

—Que aquí no vivía un Alpha? No me digas que está teniendo sexo con un omega— el rubio se asqueo y se giro con dirección al otro apartamento, olor inmundo a omega en su ciclo de celo, no quería estar allí—suerte amigo! Con lo que sea que vayas a hacer— cerro la puerta y se sintió más tranquilo.

El peliverde se adentro en ese lugar y todo estaba completamente limpio, a diferencia de su apartamento. Siguió ese olor, pensaba que Kacchan había a encontrado a algun omega para pasar su Rut.

Escuchaba algunos gemidos ahogados, ahora si pensó lo peor. Abrió esa puerta blanca y se sorprendió al solo ver a Kacchan, debajo de una sabana y dentro de un nido con su ropa.

—Espera eso no tiene sentido, pero huele a omega... No me digas que tu... — abrió mucho los ojos y se quedó pasmado.

El cenizo al ver a la persona frente suyo empezo a gruñir y a sacar los colmillos superiores e inferiores. Pero se calmó al darse cuenta que era Deku.

Salió del nido y comenzó a oler al pecoso, para luego abrazarlo y darle un beso en la boca.

"¿Ahora que se supone que debo hacer?"