Capítulo 6

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⚠Antes de leer⚠
Me había olvidado de avisar sobre la nueva historia que comencé a publicar por acá, la cual se llama "Rompiendo lo prohibido", sí, viene siendo una historia que va de la mano con esta. Y ya hay dos capítulos antes de este, por si quieren ir a leerlos.

Pero, si la temática no es de su agrado, itsmayx y yo intentaremos que puedan leerse de forma independiente.

Ahora sí pueden seguir leyendo.

Véronica

“Max Wilding, 19 años, beca por excelencia para la licenciatura en Derecho…”. Leo por encima de su expediente.

No voy a negar que me impresiona el hecho de que esté estudiando Derecho y tenga una beca por excelencia, pero estoy tan apurada que no puedo seguir leyendo cómo la consiguió, ni sus antecedentes, solo paso rápidamente a buscar su dirección.

Intenté llamarle, de hecho, lo hice, saqué el número y lo llamé, pero entre cuanto supo que era yo; colgó. Así que no me queda de otra más que ir a su casa.

Salgo de mi casa antes de que mis padres lleguen y le pido a uno de los chóferes que me lleve. Ni siquiera puedo razonar por qué lo estoy haciendo, solo sé que la adrenalina que siento ya es demasiada para mí. Se supone que debo estar arreglándome para una estúpida comida empresarial de mi padre, aun no entiendo por qué me obligan a ir, y en lugar de eso estoy camino a su casa.

Me meteré en problemas, eso es seguro, pero no puedo estar en paz por la culpa que siento.

No debieron golpearlo, nada debió terminar así.

—Señorita —Me doy cuenta de que me habla el chofer y, por la insistencia en su voz, supongo que tenía rato haciéndolo—, ya llegamos.

—Ah, sí, gracias.

Bajo del coche después de que el chofer me dijera que buscará un lugar para estacionarse, quedándome sola frente a una casa que... Wow.

Miro, a los lados, las otras casas y procedo a volver a mirar la dirección en mi celular. Ni siquiera me había percatado de la zona.
Frente a mí se cierne una casa no muy grande, pero tampoco pequeña, con una fachada minimalista, moderna, que encaja perfectamente con las demás.

¿Aquí vive Max? Me pregunto mentalmente porque no es meramente creíble. Si le dijera a los de la universidad que él vive en una zona segura, tranquila, para nada parecida a una de escasos recursos, y en una casa moderna; no me creerían.
Me acerco a la puerta y toco el timbre, el cual suena muy tranquilamente.

Espero algunos segundos hasta que una señora alta, no muy mayor, abre.

—Emm, buenas tardes —saludo con una amable sonrisa, misma que me es regresada por la mujer que fácilmente podría decir es de mi misma estatura—... ¿Se encuentra Max?

—Sí, sí, pasa —se hace a un lado de la puerta para permitirme entrar y después la sigo por las escaleras—, Está en su habitación, con Drake, no sé si lo conozcas, es su amigo, ¿Tú eres su amiga?

Habla con tanta naturalidad y confianza que me hace sentir como si estuviera con una persona que conozco desde hace mucho.

—Se podría decir que sí, supongo —respondo para nada convencida. ¿Qué tal si él ya le dijo que soy una mala persona?

—Max no ha hablado sobre nuevos amigos de la universidad, pero me alegra que los tenga.

Un timbre bajo, pero claro, se hace presente y ella detiene su paso, por ende, también yo.

Rompiendo lo coherente [borrador] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora