-Camina rápido Off. – Repitió Tay tirando de él para que se apresurará.
- ¿Puedes parar? – Pidió Off – Es San Valentín, ¿no tienes otra cosa que hacer en vez de andar molestando?
- No, quiero salir contigo hoy
Off se encontraba sin ánimos quería estar solo, la única persona que quería a su lado en aquel día dijo que estaba ocupado, así que el decidió encerrarse en su casa a mirar películas románticas mientras comía helado. No quería ser acompañado por otra persona que no sea su pequeño castaño, deseaba que éste lo acompañara durante toda su vida. Lamentablemente sus solitarios planes se arruinaron cuando Tay llegó y lo sacó a rastras del sofá, y ahora se encontraban caminando hacia un paradero desconocido para Off.
- Tay en verdad quiero irme a casa.
- Ya llegamos. – dijo el otro, ignorando lo dicho anteriormente.
Off observó el lugar que estaba frente a él. Era un restaurante demasiado sofisticado para él. Frunció el ceño al notar que era uno de los restaurantes más caros del país y además, creía que era imposible conseguir lugar justo en ese día.
- ¿Aquí vamos a cenar?
- Así es.
- Ya veo por qué me has obligado a usar traje.
Tay rio y abrió la puerta dejándolo entrar primero. Off entró y su boca se abrió al ver el interior del restaurante. Era bastante hermoso y lujoso, habían velas y candelabros por doquier, las cortinas que cubrían los grandes ventanales eran de color vino que daban un toque elegante al lugar. El aroma a comida era agradable y el murmullo era leve. Todas las mesas del primer piso parecían llenas, por lo que supuso que irían al segundo piso. Volteó para preguntarle a Tay pero no lo encontró. Se acercó a la puerta y lo busco con la mirado. Sus cejas se alzaron al verlo acompañado de New con las manos entrelazadas. Ambos lo miraron a través del cristal y se despidieron con sus manos libres y una gran sonrisa para luego alejarse.
- Malditos bastardos. – Susurró Off, con los dientes apretados. Le habían jugado una trampa y estaba más que seguro de saber quien fue el que ideó el plan.
- ¿Off Adulkittiporn?
Off giró la cabeza y vio a una jovencita unos años menos que él. Llevaba una camisa blanca y pantalones negros, y sonreía con amabilidad. – Lo llevaré hacia su mesa, por aquí.
Off asintió y la siguió sin decir una palabra, no sabía cómo reaccionar ni que pensar, sus manos sudaban y tenía la piel erizada a causa de los nervios. Todavía no podía creer el hecho de estar en ese restaurante. Subieron las escaleras y su confusión aumento al ver que en el segundo piso ninguna mesa estaba ocupada. Todas estaban cubiertas por manteles rojos, pero las sillas se encontraban vacías, además, sólo la mesa del centro tenía velas encendidas y platos por lo que Off supuso que allí es donde iban a cenar.
- Siéntese aquí. – Dijo la joven mientras dejaba dos menús en la mesa central. Off obedeció y le agradeció a la amable muchacha. No pudo evitar recordar a Sammy, ella era muy amable y divertida, la extrañaba.
Miró todo el segundo piso, el lugar era fascinante, desde las escaleras salía un camino de velas pequeñas que emanaban un aroma a vainilla exquisito. Rodeando su mesa habían pétalos de rosas blancos, las lámparas sobre él eran antiguas y la vista de los enormes ventanales era preciosa. La luz de la luna entraba por ellas, parecía mágico. Estaba distraído observando todo, que se sobresaltó al oír el suave sonido de un violín. No tenía idea de dónde provenía, pero le gustaba. Una de las puertas que estaban en ese piso se abrió y Off se levantó de su asiento para ir a ver que había dentro. Mientras caminaba el violín se oía cada vez más cerca y su corazón latía cada vez con más velocidad. Entró y se encontró con una simple mesa, en dónde había un gigante ramo de flores diversas y una cara roja. La música del violín se oía a través de un parlante colgado en la pared. Tomó el ramo y sonrió con emoción, era simplemente hermoso. Dejó el ramo y tomó la carta abriendo el sobre, sacó el pequeño papel y la leyó en voz baja:
ESTÁS LEYENDO
Regalo ~ OffGun ~
Teen FictionOff era un hombre desconocido que desayunaba todos los días en la misma cafetería que Gun. "Nunca me han regalado nada para el día de San Valentín" le comentó Off a la mesera con la que siempre charlaba. Y Gun decidió que iba a ser el encargado de d...