~ OCHO ~

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Gun corría a toda prisa, todavía no podía creer la noticia que estaba saliendo en todas las noticias; el gran incendio de un importante bufete de abogados. Si fuese otro bufete, a Gun no le llamaría mucho la atención. Pero era el bufete de Off, y Gun se encontraba corriendo para acercarse al edificio. Pudo ver el espeso humo negro que salía de este, y algunas llamas en los pisos superiores. Desde su ubicación, parecía que el incendio empezó en el tercer piso, y se extendió hasta los pisos más altos. Se acercó hasta dónde la policía le permitió. Podía ver a docenas de bomberos saliendo del lugar con personas, ambulancias y paramédicos atendiendo heridos y la policía evitando que la gente se acercara al edificio con peligro de derrumbe.

Era un completo caos.

Su mirada pasaba de persona en persona, buscando a Off, podía sentir la preocupación creciendo en su pecho, y sus ojos comenzaron a picar por las lágrimas. No soportaría verlo herido. Necesitaba saber que estaba bien, sólo eso. Escuchaba a la gente gritando a su alrededor y se sentí aturdido por las sirenas. Su cabeza comenzó a dolor y las lágrimas bajaban lentamente por sus mejillas.

Que este bien, que este bien, por favor.

Estaba mareado de tanto mirar hacia sus costados, buscando a Off, algunas personas seguían saliendo del edificio con ayuda de los bomberos. Su alma casi sale de su cuerpo al ver esa conocida melena negra entre la gente. No llevaba su saco puesto y su camisa blanca estaba rota y sucia. Su cabello estaba revuelto y lleno de tierra, al igual que su cara. No podía estaba revuelto y lleno de tierra, al igual que su cara. No podía dejar de toser y sus ojos estaban rojos por el humo, lo llevaron lentamente hasta una ambulancia, dónde le dieron agua y oxígeno. No estaba tan herido, por lo que Gun se calmó un poco.

Un murmullo fuerte de las personas se fue apagando, al igual que las llamas. Gun no quitaba su vista de Off, pero podía ver a las otras personas heridas. Al parecer, no habían personas muertas, pero si con graves quemaduras. Según había escuchado de un periodista que estaba cerca suyo, el incendio fue intencional. Eso aterró a Gun, ¿Quién puede ser capaz de quemar todo un edificio lleno de personas? ¿Fue un ataque dirigido hacia el bufete? Sólo le hizo pensar en lo horrible que sería ser abogado.

Todo el edificio ya estaba apagado, y habían sacado a todas las personas de adentro del lugar. Gun vio como los policías dejaban pasar a varias personas. Gun vio como los policías dejaban pasar varias personas, que se acercaban preocupados a los heridos. No estaba seguro de acercarse a Gun, así que sólo se quedo quieto en su lugar, sin saber que hacer. El pelinegro, que siempre lucía fuerte y temerario, ahora se veía muy frágil y débil. Pudo notar como evitaba que las cámaras lo grabaran y se tapaba el rostro cuando tomaban fotos.

Gun miraba preocupado las heridas que Off tenía, aunque era un poco difícil debido a la distancia que los separaba. Quería acercarse, pero luego se dio cuenta que no serviría de nada. No era nada cercano a Off, no sabía como consolarlo, volvió a prestarle atención a las heridas del pelinegro, llevaba unos cortes en los brazos, hechos por las ventanas rotas, supuso Gun.

Pudo ver unas marcas en su mejilla y sus ojos aún seguían rojos. A pesar de estar fuera de peligro, Off seguía viéndose asustado y preocupado, miraba el edificio apagado totalmente y negaba con la cabeza con tristeza.

Gun no soportaba verlo así, estaba asustado, herido, enojado, todo junto. Unas terribles ganas de abrazarlo lo inundaron. Quería curarle las heridas y luego besarlas con delicadeza. No quería, necesitaba estar cerca de él, guiado por un impulso, tomó aire y gritó el nombre de Off. Éste no lo escuchó, seguía mirando al edificio, tomó aire de nuevo y gritó aún más fuerte el nombre del hombre. Confundido Off volteó y buscó con la mirada a la persona que lo llamó. Había una gran multitud alrededor, y no podía encontrar al proveniente de la voz. Estaba por mirar de nuevo al edificio, cuando volvió a escuchar su nombre. Sus ojos comenzaron a examinar a la multitud y lo vio.


(...)


Gun Atthaphan Phunsawat

¿Qué estaba haciendo allí? ¿Y por qué lo estaba llamando a él? Poco a poco Off entendió. Gun lo había ido a ver a él, se quedó observándolo, sin poder creerlo. Estaba tan guapo como siempre, aunque su rostro estaba lleno de preocupación. Cuando sus miradas se cruzaron, los labios gruesos de Gun se curvaron hacia arriba. Toda preocupación, miedo, dolor, enojo desapareció del cuerpo de Off al ver esa pequeña pero reconfortante sonrisa. Sintió las famosas mariposas en el estómago y sintió la necesidad de tenerlo cerca.

Sin pensarlo demasiado se alejó de la ambulancia y caminó hacia donde estaba él. Gun no tardó ni un segundo en saltar a los brazos de Off, quien estaba temblando. Estaba sintiendo tantas cosas al mismo tiempo, y abrazar a Gun fue totalmente liberador. Sus heridas dejaron de arder, sus hombros ya no estaban tensos y sus piernas dejaron de temblar. Las mariposas ahora parecían elefantes en su estómago y su corazón latía aceleradamente. No sabía cuánto necesita un abrazo hasta ahora.

Estuvieron varios minutos abrazados, Off apoyaba la cabeza en el hombro de Gun, rodeándolo con sus largos brazos acariciando su espalda. Ninguno de los dos sabía cuando Off había empezado a llorar, pero ahora lo estaba haciendo desconsoladamente. Gun solo acariciaba su espalda. Notó el flash de varias cámaras y se giró un poco, evitando que tomaran fotos del rostro de Off, o por lo menos lo intento. Luego de unos largos minutos, el llanto cesó. El más alto se separó del otro, mirando al piso, un poco avergonzado. No le gustaba mostrar su lado sensible y menos en público. Gun sin poder evitarlo, acercó su mano al rostro de Off y limpio sus lágrimas. Luego ambos quedaron en silencio sin tocarse.

- Off.

Éste sintió un escalofrío al escuchar aquella voz, quería mirarlo a los ojos y besarlo hasta que se quedaran sin saliva, pero no se atrevía a levantar la mirada del piso. Tenía miedo lo que podría llegar a pensar Gun sobre él. Prácticamente se había derrumbado en sus brazos y se sentía muy apenado por eso.

- Señor Adulkittiporn, debemos hablar con usted sobre el incendio. – dijo uno de los policías del lugar.

Gun sabía que la policía quería ayudar, pero ¿No lo podrían haber hecho en otro momento?, Estaba tan cerca de Off y no quería volver a alejarse. El pelinegro asintió y le dio una última mirada al castaño, antes de seguir al policía.

No sabía si irse o esperar a que terminara Off para hablar con él. Ni siquiera sabía que decirle, pero quería volver a sentir su mirada sobre él. Por primera vez, no se sentía nervioso por estar cerca del hombre. Off se había sentido también en sus brazos, y pudo notar como se aflojaron sus músculos al abrazarlo. Gun estaba feliz de poder ayudar al hombre a desahogarse y de haberlo consolado.





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Vamos avanzando en esta historia, muchas gracias por seguir leyendo, que hayan tenido una muy buen inicio de semana, y no se olviden de votar y comentar mis personitas.... 

Nos leemos en el próximo capitulo. 

Regalo ~ OffGun ~Donde viven las historias. Descúbrelo ahora