Historias Únicas [AruAnnie]

Tensión

No es que yo viviera con el mal pensamiento todos los días, no era como si necesitara tener una liberación de tensión constante ahora que compartíamos techo. Pero había algo que me tenía con los nervios de punta y era esos malditos turnos de noche que tenía que hacer por su puesto como oficial de policía de investigaciones y ese uniforme con pantalones altos y blusa algo suelta por comodidad que la veía ponerse todas las tardes antes de irse a la central de investigaciones.

Solo era por dos meses, pero ya no veía la hora que terminara el proyecto interno que tenían para poder dormir con ella todas las noches. Annie también se quejaba, especialmente porque le gustaba descansar hasta tarde, pero sabía que era una oportunidad única para poder optar a un cargo más arriba e incluso solo ir tres veces a la semana a la central y ganar una especialización interna para perfeccionarse en su labor.

Pero ya era mucho, más y cuando la veía salir de la ducha apenas yo llegaba de mi trabajo en la universidad. Siempre con el cabello mojado, descalza y la toalla envuelta en su cuerpo, caminando de un lado a otro terminando de hacer algo para comer. Siempre le decía que no era necesario, yo sabía cocinar perfectamente y así es como ella llegaba todas las mañanas y le dejaba el almuerzo listo para que ella se levantara a comer.

Solo era una parte, porque luego de que se preparaba, hablaba conmigo mientras se abrochaba su blusa con naturalidad, dejándome ver su trabajado abdomen y como el brasier liso juntaba sus bonitos senos.

¿A quién iba a mentirle? Necesitaba pasar tiempo intimo con mi prometida, la necesitaba todo un fin de semana solo para mí. Poder platicar con ella sin la presión que a los minutos uno de los dos debe irse a trabajar, quería poder consentirla en todo, dormir juntos y follar como si no hubiera un mañana.

-No deberías tener temor o vergüenza en admitirlo. -Dijo Eren mientras nos servíamos algo en un bar cerca del centro de la ciudad junto a Jean y Connie, como todos los viernes.

Eren trabajaba en el hospital de Shiganshina, era interno, tenía unos turnos asquerosos, pero decía que debía de aprovechar para generar ingresos y poder tener las vacaciones que quería.

-Tú dices eso porque no tienes problema con los tiempos, además, jamás he sido de esos que le piden o exigen algo a sus novias... Annie es libre de hacer lo que quiera, no quiero que se sienta presionada. -Dije tomando mi mojito de menta y mango a ver si eso me relajaba la tensión que tenía en el cuerpo.

-En eso estás equivocado, Armin. -Dijo Jean apoyándose en la mesa.- Cuando uno está en pareja todo debe funcionar bien hasta la intimidad, me sorprende que no lo sepas con lo inteligente que eres. Deberías decirle hoy, digo ¿Hoy termina su turno de noche, no?

-Si, pero...

-Nada Arlert, Jean tiene razón ¿Te imaginas que solo compartan ciertas cosas y no intimidad? -Dijo Eren.- La cosa no funcionaría, además, todos necesitamos liberar la tensión sexual.

-Por eso Eren se va de putos de vez en cuando -Dijo Connie tomando de su shop de cerveza.

-Oye... -Eren entrecerró los ojos mirando a nuestro amigo.- Recuerda que tu vas conmigo en esas "de vez en cuando" y no contaré las cosas que te comes.

-¡Jaeger!

Quede mirando a Eren y Connie mientras empezaban a tirarse indirectas muy directas.

-Armin, solo sé tú, ustedes están enamorados y créeme, tal vez Annie también quiera una noche en la cual ambos se falten el respeto -Dijo Jean con una gracia de confianza.- Pero no puedes guardarte tanta frustración adentro, además, hace mal para la salud y si ambos quieren, no creo que necesites más razones, solo... Guíala, tócala y si tanto te pone el uniforme de oficial que ocupa, utiliza eso a favor de ambos.