PROYECTO J-27

CAPITULO 4 EL DIA MAS OSCURO

Un año más de su muerte y si  ella estuviera con vida ahora sería una mujer de  37 años con una gran vida por delante,  pero por desgracia eso no es posible y me tocaba solo recordar con tristeza aquella fecha, así como el día de su cumpleaños, y el día en donde decidimos unir nuestras vidas con la ilusión de formar una familia y lograr nuestro gran proyecto científico, el cual aunque ella no puede ver, está casi terminado pues solo hace falta esa pieza para que quede lista la programación y aunque Ally y Nick  no estaban muy de  acuerdo en que ocupará la mayoría de mi tiempo en el,  me apoyaron en todo momento y me ayudaron para que mi tarea fuera más rápida y fácil.

Eran justo en esas fechas en donde me daba por deprimirme más, nuestro aniversario de bodas, su cumpleaños y sobre todo la fecha del accidente que cambio nuestras vidas para siempre y por eso para mí ese siempre sería el día más oscuro de mi vida...

Aún recuerdo a la perfección aquel 30 de mayo del 2027, ese día Lauren viajaría a Japón para un diplomado de robótica genética que había ganado en un concurso del instituto científico Nacional, ella estaba feliz por ese diplomado porque decía que sería perfecto para poder realizar nuestro proyecto, y por eso esperaba el día cada vez con más ansias, sin embargo unos días antes de aquel esperado viaje, Lolo parecía muy pensativa y actuaba extraño.

FLASHBACK  

-Estas bien cariño?

- Mmm?...porque lo dices?

Una noche antes de que viajará a Japón Lauren estaba ahí acostada en nuestra cama observando el televisor, pero parecía que ella no estaba viéndolo realmente.

- No lo sé, pareces muy pensativa...

- No es nada Camz, bueno tal vez estoy nerviosa por el viaje y por dejarte tanto tiempo sola...

Yo estaba ahí parada secando mi cabello y poniendo en mi piel la crema con olor a flores que a ella tanto le gustaba, cuando aquel comentario suyo me provocó una pequeña risilla, Lauren siempre se ponía igual cada vez que tenía que salir de viaje por trabajo, pero está vez era diferente porque se iba por  un mes y ella y yo nunca nos habíamos separado tanto tiempo desde que estábamos juntas.

- Ay mi amor no te preocupes  estaré bien, sabes que los días pasarán muy rápido y además cuando estés allá con todo aquello que vas a aprender, te olvidaras de mi...

Hice aquel comentario como una broma, pero al parecer para ella no tuvo ninguna gracia, porque por el reflejo del espejo ví como se levantó de la cama y se acercó a mi que seguía tratando de poner mi ropa interior.

-No te la pongas...

Ya me había puesto mis bragas, pero aún me faltaba una blusa de tirantes que era parte de mi pijama y al parecer mi mujer no estaba muy de acuerdo en que la usará esa noche.

- Porque no?

Pregunté con inocencia y su única respuesta fue comenzar a acariciar mis pechos con sus suaves manos, ella sabía cómo disfrutaba aquello y por eso también comenzó a dejar pequeños besos en mi cuello y hombros lo que  definitivamente sabía me volvía loca.

- Porque tal vez se me ocurre una manera para que pueda relajarme un poquito...

No hubo más palabras, solo me deje llevar cuando tomo mi mano y me ayudó  recostarme en nuestra cama para después sentír su cuerpo sobre el mío.
Esa fue la última vez que nosotras hicimos el amor, ella fue tan suave y delicada que por un momento también sentí un poco de miedo de que se fuera, pero decidí ignorar ese miedo y me dedique a disfrutar de sus caricias y al mismo tiempo de llenarla de placer.