Capítulo 29

392 87 90
                                    

—¿Qué es esto? —cuestionó asustado al notar una aguja inyectada a su mano— ¿En dónde estoy? ¿¡Namjoon!? —exclamó alterado.

Jimin y Yoongi se acercaron hacia Seok Jin, él los miró asustado y con los ojos bien abiertos.

—Seok Jin, cálmate por favor. Sufriste un accidente y ya han pasaron unos días desde entonces.

—Yoongi —el joven apenas lo reconoció— ¿Namjoon está bien? ¿Por qué no está aquí?

—Primero toma aire y tranquilízate —pidió— Namjoon está bien, al igual que todos nosotros.

Seok Jin soltó un suspiro de alivio antes las palabras de Yoongi.

—¿En dónde está él? —preguntó tratando de sentarse

—Salió con las personas que nos  ayudan. Por favor no te muevas —Jimin tomó la palabra.

Seok Jin obedeció a todo lo que se le pidió, Jimin le hizo unas preguntas para verificar que todo estuviese en orden.

La memoria del joven estaba intacta, aparentaba encontrarse estable.

Solo había que esperar el regreso del señor Lee para que lograra examinar al joven como se debía.

—Tengo hambre —Seok Jin miró a los otros— no se los diría si fuese realmente necesario.

—Iré a ver lo que encuentro —soltó Jimin poniéndose de pie.

Cuando el rubio abandonó la habitación, Seok Jin aprovechó para hablar con Yoongi.

—¿Cómo están las cosas entre Jimin y tú?

—No sé a lo que te refieres —dijo mostrándose desinteresado— acabas de despertar hace un rato y preguntas esas cosas.

Seok Jin para nada convencido, arrugó el ceño y aclaró la garganta.

—¿Sabes lo difícil que es para mí pensar que puedo matar al hombre que amo en cualquier momento?

Yoongi lo miró confundido por lo que acababa de decir el mayor.

—Eso dijiste antes del accidente —continuó— lo recuerdo bien.

—Esas palabras se prestan a confusión, lo estás entendiendo mal.

—No, entiendo perfectamente. Te conozco desde siempre, trabajé para tu familia, te cuidé y sé cuando ocultas algo.

—Las cosas ya las aclaré con él. Disfrutamos de la amistad que tenemos —explicó Yoongi

Seok Jin apretó los labios.

—No, estás sufriendo. Cada segundo que pasas a su lado es un recordatorio de tu posición con él. El hecho de no poder tomar su mano y decirle todo lo que sientes, te carcome.

Las palabras de Seok Jin eran ciertas, había explicado mejor que nadie la manera en la que se sentía Yoongi.

Mejor que él mismo incluso.

—Si sientes cosas tan fuertes por él, deberías sincerarte antes de que sea tarde y sí, me referiero a tu enfermedad. Morirás en cualquier momento ¿lo harás sabiendo que no pudiste confesar lo que sientes?

Yoongi prefería morir sabiendo que se había quedado callado, a morir sabiendo que había logrado destruir a Jimin.

—Acabas de despertar hace un poco de tiempo y ya estás actuando como un consejero, mejor preocúpate en seguir vivo —sugirió Yoongi dando palmadas en el brazo de su amigo.

Seok Jin no estaba contento con la respuesta, pero no se sentía de la mejor manera para seguir hablando.

En ese momento ingresó Jimin con un poco de comida blanda en manos.

Óbito Z |En Busca De YoomiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora