Capítulo 43

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—Quizá no me creas, tal vez incluso te vas a burlar por la tontería que voy a decir... pero podría jurar que hoy Taehyung —el pelinegro sonrió al recordar la escena— se puso nervioso cuando hablábamos. 

Existió un breve silencio y Jungkook volvió a tomar la palabra.

—No estoy alucinando. Me dijo "pequeño" —reveló sin dejar de sonreír— puede que no sea el apodo más lindo de todos o que simplemente lo haya dicho por la diferencia de edades, es solo que para habernos comenzado a hablar desde hace poco, es un gran logro ¿No lo crees?

Era cierto, en el entorno en el que vivían conocer a una persona de algunos días, ya era conocerla de toda la vida. En cualquier momento podría ocurrir lo peor y el tiempo era valioso.

—Me encantaría escucharte justo ahora —dijo sobando la cadenita que tenía en sus manos— aunque te estuvieras riendo de mí, me encantaría saber lo que piensas de esto Jung Hyun.

Sin duda extrañaba a su hermano mayor, buscaba distraerse para no pensar mucho. Pero en los momentos de soledad los recuerdos no lo dejaban tranquilo.

—Trato de ser fuerte y feliz como pediste ¿Lo estoy haciendo bien? —cuestionó bajito.

Jungkook guio su mirada al frente observando, desde el techo en el que estaba, lo que quedaba de la ciudad. 

—Sabes, hoy el chico rubio del grupo que rescatamos decidió irse. Sospechan que esté detrás de la camioneta que perdió Hoseok, pero nada está claro.

Pensó un poco antes de comentar lo que realmente pensaba de lo ocurrido.

—Sé que está mal, pero siento que está teniendo su merecido —su ceño se había fruncido— Taehyung recibió un balazo por su culpa, no le importó que corriéramos peligro. Las buenas personas no hacen eso, así que pienso que se merece todo lo que le pase.

El chico hizo una pausa al darse cuenta de lo que decía.

—¿Es correcto mi enojo, Jung Hyun?

Sin darle opción a seguir hablando, el joven sintió algo estrellándose contra su cabello. Enseguida miró al cielo y vio pasar un ave.

¿Un ave en la ciudad? Sería tan extraño como ver un perro hablando, si es que todavía quedaba alguno.

—Al parecer, me excedí —comentó para sí mismo— pero tampoco debías mandar un pájaro para que me haga encima —renegó.

De todos modos el menor guardaba algo de resentimiento en sí.

—¡No de nuevo! —renegó al haber recibido un disparo más— Ya entendí, estuvo mal lo que dije ¡No sigas!

No tuvo más opción que salir corriendo rumbo al baño, ya había sido suficientemente regañado por lo que dijo.

[...]

—Por favor, háblanos Yoongi —pidió Seok Jin— no nos gusta que te guardes lo que piensas.

—No actúes como un niño —pidió Namjoon manteniendo su semblante serio— ya te repetimos hasta el cansancio que lo que ocurre no es tu culpa, ¿Qué más quieres para poder entender? ¿Que te lo explique con manzanas?

—Namjoon —nombró Seok Jin tratando de hacer que su amigo no siguiera.

—Es que ya me tiene cansado, me enoja que quiera culparse por todo lo malo que pase. —giró su vista a Yoongi— Esto también nos duele a nosotros, verte de esta manera nos enferma. 

—¿De qué otra manera quieres que actue? preguntó Yoongi sin levantar su vista— El hombre que amo está perdido, yo no puedo hacer nada e incluso puedo morirme antes de llegar a encontrarlo ¿Quieres que aún así vaya por la vida sonriendo y entregando caramelos? No me jodas. 

—Por lo menos podrías tratar de mantenerte vivo y dejar de pensar y decir estupideces como son las ideas que quitarte la vida —reclamó.

Yoongi tensó la mandíbula y miró de reojo a Seok Jin, al parecer lo había escuchado.

—Yoongi, entiende que no queremos que vivas de esta manera y todo por la infección —intervino el mayor de los tres— desde hoy por favor, esfuérzate por ser feliz. Que cuando encontremos a Jimin, lo primero que vea al llegar aquí sea a su pareja sonriendo. 

—No es fácil hacer lo que me piden, por favor no me hagan sentir peor —suplicó. 

—Al menos di que lo intentarás, que tratarás de dejar atrás malos pensamientos. —pidió Namjoon con los ojos cristalizados.

Yoongi se sintió mal al ver así a su amigo, así que para evitar más problemas y corazones lastimados. Prefirió mentir.

—Lo intentaré por ustedes —comentó apoyando y mano en el brazo de Namjoon.

—Lo intentarás por ti —corrigió Seok Jin.

Yoongi tan solo asintió, Seok Jin y Namjoon quienes eran como un par de hermanos mayores lo abrazaron y comenzaron a agradecer.

Yoongi no escuchó, en su cabeza no podía dejar de escuchar preguntas sobre el paradero de Jimin, en ese momento lo único que importaba era verlo de nuevo. Y si no lo dejaban ir por Jimin, entonces escaparía cuando todos se encontraran dormidos.

No podía perder la razón de su vida, no podía perder a Jimin y prefería morir tratando de encontrarlo a morir sin haber hecho ningún esfuerzo. 

De repente el sonido de la puerta siendo abierta con brusquedad interrumpió los pensamientos de Yoongi.

Era Yeseo, se veía alarmada y agitada. lo jóvenes no tardaron en mirarla atentos.

—¿Te encuentras bien? —cuestionó Namjoon soltando el abrazo que tenía con Yoongi y encaminándose a la chica.

—Es Hoseok

Todos la miraron confundidos y ella ingresó cerrando la puerta a su paso.

—Quería preguntarle más acerca de Jimin, pero no lo encuentro por ninguna parte, Taehyung tampoco lo ha visto y... 

—¿Y? —cuestionó Seok Jin desde su camilla.

—Y me temo que fue en busca de Jimin —reveló.

Imposible

Esa palabra resonó en la cabeza de Yoongi, ese maldito había golpeado a Jimin hace un par de noches ¿Aún así lo buscaba?

—Pensé que Hoseok estaba incómodo con nuestra presencia —habló Seok Jin.

—Quizá se siente culpable, es lo más lógico. Una persona llena de culpa y arrepentimiento puede ser capaz de cualquier cosa —comentó Yeseo angustiada.

Yoongi compartía esa idea, solo que aún no le convencía.

—¿Qué harán ahora? —cuestionó Yeseo sin dejar su semblante de preocupación.

—Te ves muy alterada —emitió Namjoon— ¿Qué te ocurre exactamente? Dudo que la partida de Hoseok sea lo único que te angustie.

—¿Es que no lo ven? —se acercó un poco más— el mejor amigo de Taehyung fue en busca de alguien que es parte de este grupo —señaló— si Hoseok no regresa, ¿creen que las personas de aquí estarán felices al saber que no volvió por culpa de Park Jimin?

—Hoseok tomó la decisión de ir por él, Jimin no tiene la culpa —aclaró Yoongi a lo que Yeseo respondió con una risa nasal.

—¿Enserio crees que estas personas lo verán así?  Porque yo no lo creo.

—¿Y ahora qué? —Yoongi miró a Namjoon y a Seok Jin.

—Debemos decirlo cuanto antes —emitió Namjoon.

—¿No escuchaste lo que dijo Yeseo? 

—Será peor si lo ocultamos y mentimos como la vez pasada. Esta vez hay que hablar.

Óbito Z |En Busca De YoomiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora