Emerald: El Héroe De Las Sombras

Uno no tiene que pelear solo siempre

Esa noche había detenido cinco asaltos, seis contando el primero, y solo había recibido cuatro golpes, y pasó un mes  rápidamente.

Aprendió 4 cosas.
1.- No siempre va a haber basura para encontrar un arma improvisada.
2.- Lo mejor es, siempre llevar un kit de primeros auxilios.
3.- Llevar guantes de cuero es buena idea.
Y 4.- Debía llevar su libreta de apuntes si no quería que sus murmullos se volvieran demasiado ruidosos.

A la semana se había quemado el cerebro pensando en que llevaría con el como arma para emergencias, había considerado muchas cosas, terminó consiguiendo un pequeño taser, y un bastón retractil.

Había batallado para conseguir uno bueno de metal y acero en vez de uno de aluminio, pero era práctico, y fácil de transportar, no era un experto usándolo pero su manejo era decente.

Contra personas con un quirk eléctrico es poco útil y los guantes de cuero lo vuelve mucho mejor.

Empezó a llevar una mochila ligera con un su kit de primeros, una navaja, libretas, lápices, ya que una vez el agresor lo descubrió antes de que consiguiera tener un plan gracias a sus estúpidos murmullos.

Y pasó otra semana, y fue suficiente para adaptarse a su nueva rutina, dormir temprano y levantarse temprano, su horario de sueño era malo pero suficiente. Durante el día iba a clases, comía entrenaba hacía tarea y veía videos de héroes, esta vez no solo analizaba sus peculiaridades y estilos de lucha, hacia lo mejor para recrear sus movimientos de pelea que no requirieron peculiaridad para fomentar la memoria muscular, bastante útil si le preguntaban.

Trataba de estar distraído la mayor parte del tiempo, con el acoso empeorando, si no mantenía a su mente distraída era lo único que ocupaba su mente, pero por suerte aún no había sido atrapado por lo que sus actividades nocturnas no se vieron afectadas.

De alguna manera, el ponerse la máscara, saltar por los techos, cosa que cada vez le sale mejor, ayudar a la gente, era lo suficientemente bueno para hacerle olvidar todos su problemas, como si dejara de ser el tímido inútil de toda la vida, y dejara paso a su alter ego de vigilante.

Para su suerte solo lo había visto una persona, a los que salvo y a quienes se enfrentó, nunca lo vieron bien ya que siempre se mantuvo en las sombras, y el estaba más que bien con eso, después de todo, el que lo vieran no era necesario para que pudiera ayudar a las personas.

A excepción de esa persona que había necesitado primeros auxilios, pero estaba lo suficientemente obscuro para que no notará nada significativo de su persona. Despuésde todo había sido buena idea llevar su kit de primeros auxilios.

Y realmente tenía suerte, ya que todos los asaltos en los que se involucró, fueron en callejones y solo contra una o dos personas. Su análisis no era completamente inútil, después de todo, gracias a él, había usado las peculiaridades de sus oponentes a su favor y en su contra, por lo que la mayoría del tiempo solo tenía que esquivar y solo golpear un par de veces para noquear.

El realmente se estaba sintiendo bien al hacer eso, y si bien estaba cansado la mayor parte del día, ayudar a otros lo valía.

Esta noche había parado 2 asaltos, y había salido ileso, realmente era sorprendente la diferencia entre las habilidades de los villanos y Kacchan, el seguramente lo haría mucho mejor que el, ese es el motivo por el cual el merece ser un héroe y el deberá cuidar de otros desde las sombras, dejando el reflector a quienes lo merecían.

Izuku sacudió la cabeza, el debía dejar esos pensamientos de lado para cuando estuviera como civil, mientras esté como vigilante debía prestar atención a su entorno en busca de alguien que necesite ayuda.