Amore Eterno ©

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El día acordado, ansiado por algunos y temido por otros, había llegado  nadie sabía cómo pero lo hizo todos estaban nervioso por lo que fuera a pasar y nadie quería estar presente pero habían dado su palabra, los Cullen estaban ansioso por lo que pasaría desde la ida de Bella nada fue sencillo, desde la plática dolorosa entre Edward y su hija hasta la disputa de los testigos por seguir o no, al final todo se resolvió llegando a este momento dónde todos se preparaban para ir a aquel prado que sería testigo del encuentro.
- todo está listo, partiremos en una hora.
- de acuerdo.
Carlisle miro con tristeza a su hijo tratando de imaginar la tristeza que sentía y queriendo hacer algo por el.
- Renesmee escucha y las cosas no salen bien Jacob te llevará lejos de aquí.
- y tú vendrás conmigo después.
Aquello lleno de tristeza a Edward quién no sabía cómo terminaría todo.
- no lo sé cariño pero prometo hacer todo lo posible porque así sea.
- lo prometes.
El asintio y su hija lo abrazo, el no quería que ese abrazo fue una despedida pero no quería hacerce ilusiones tampoco.
- ahora vamos con todos.
Salieron de la habitación hacia la sala donde todos esperaban.
- bien es hora vamos de una vez.
Todos asintieron y se pusieron en marcha.

También había más personas preparándose para aquel evento, Sol se encontraba aún en su casa preparando a sus hijos y a ella misma.
- por favor niños deben estar listo.
Pidió a sus hijos quienes estaban muy inquietos ese día.
- pero estamos emocionados mamá hoy conoceremos a papá.
Ella suspiró rendida ante la imperatividad de sus hijos.
- pero si no se apuran y se alistan no podrán conocerlo aún.
La voz de Jasper la alivio y asustó a sus hijos quienes rápidamente buscaban su ropa.
- no debiste asustarlos así.
- si no lo hacía ellos nunca iban a estar listos.
Suspiró rendida por la afirmación.
- lo sé y tú ya estás listo.
- si así que ves y cámbiate tu yo cuido a estos dos.
Dijo refiriéndose a sus sobrinos quienes se colocaban su ropa de manera apurada.
- bien en un momento estaré lista.
El asintio y ella salió de la habitación para ir a la suya y buscar que ponerse ese día.
- dios estoy que muero de los nervios.
Trato de calmarse viendo las opciones que tenía para ese día, al final eligió un conjunto abrigador ya que el día era frío.
- ¿dónde está?.
Busco entre su joyería el objeto más valioso para ella encontrandolo entre sus aretes.
- espero y tú lo uses igual que yo.

Llegaron al prado siendo los primeros en el lugar.
- creen que vengan.
- lo harán es lo más seguro.
Todos estaban atentos a cada movimiento y sonido que les avisará del peligro.
- ya vienen están muy cerca.
Se pusieron en guardia esperando la llegada.
A lo lejos comenzaron a aparecen siluetas negras que poco a poco se hacían más visibles, hasta solo quedar a metros de los Cullen. Frente a frente se encontraban algunos se escanean con la mirada y para los Cullen les llamo la atención cierto vampiro quien se veía más demacrado y descuidado, el primero en acercarse un poco para tratar de arreglar las cosas de una manera cordial fue Carlisle.
- Aro por favor no hagamos esto hablemos como el los viejos tiempos.
- lo dices aún cuando has traído a todos estos vampiros.
- son solo testigos, ellos te podrán decir la verdad.
Explico de manera calmada.
- cualquiera puede ser testigo.
Está vez fue Caius en hablar pero fue detenido por Aro.
- ¿quiero conocerla?.
Dijo viendo a Edward quién cubría de manera sobreprotectora a la niña.