𝐓𝐇𝐄 𝐅𝐈𝐅𝐓𝐇 𝐒𝐀𝐕𝐈𝐎𝐑 ━━ᵗʰᵉ ᶜʰʳᵒⁿⁱᶜˡᵉˢ ᵒᶠ ⁿᵃʳⁿⁱᵃ

𝓒𝓐𝓟Í𝓣𝓤𝓛𝓞 15

◆━━━HERMIONE GRANGER━━━━◆

El aire se sentía frío y triste, olía a sudor y sangre

Aunque hubieran ganado la batalla, iban a perder a una guerrera.

Después de que todos los narnianos restantes supieran la historia de Hermione, no dudaron en mostrar su gratitud y admiración por la joven bruja.

Asaln le pidió a Peter y a Edmund que Hermione fuera llevada al campamento para su "despedida" algo doloroso para ambos chicos cargar a una Hermione tan débil.

Después de ponerla en una especie de camilla, Susan, Lucy y los señores castores no se separaban de ella, lloraban y sollozaban.

Por otro lado, Peter, Edmund y Aslan se mantenían a distancia, sufriendo en silencio.

—Tiene que haber una solución, ¿no?—  dijo la pequeña Lucy sorbiendo su nariz —Tal vez podamos…

—Ya basta, Lucy— la interrumpió Susan en un susurró mientras acariaba el cabello de Hermione, no se quería separar de ella —no te hagas más esperanzas, no más por favor.

Lucy la miró triste, dejando caer más lágrimas, Hermione tomó su mano y la apretó con fuerza mostrando una débil sonrisa.

—Lamento no poder quedarme, Lu— susurró —pero mi trabajo aquí ya terminó.

Los minutos iban pasando, y Hermione cerrando más sus ojos poco a poco.

—Creo que es mejor que todos nos... despiadados— dijo Aslan acercándose a ella. Todas las criaturas rodearon a Hermione —Hoy, estamos aquí para despedir de este mundo a una de las guerras más valiente que ha pisado Narnia, una joven con coraje e inteligencia. ¡Qué tenga un favorable viajen en el más allá!— Exclamó mientras los narnianos aplaudían —Nos despedimos de ti; Hermione Granger, guerrera suprema y general de Narnia, bruja del mundo mágico y noble defensora.

Todas la criaturas hicieron una reverencia, al igual que los Pevensie y el mismo Aslan dibujando una sonrisa en el rostro de Hermione.

Aslan se acercó a Hermione y lamió su mejilla para luego acurrucarse en su costado en forma de abrazo —Adiós, querida. No sabes cuanto me duele que te vayas.

—Supongo que a cada quién le llega su momento, Aslan. Mi momento de partir llegó.

—¿Tienes miedo?

—No. Estoy feliz de que pude llegar al final de la batalla y que pudimos vencer a Jadis.

—Todo gracias a tí.

Aslan dio una última lamida a la castaña en la frente para alejarse y darle paso a los castores.

—Eres una gran chica, Hermione. No lo olvides— Sollozó la señora Castor

—Gracias por todos sus cuidados, señora Castor.

—Gracias a ti, querida, por defender nuestro querido hogar— dijo el señor Castor, y sin aguantarlo más abrazó a Hermione con fuerza llorando, la Castor imitó su acción.

—Los voy a extrañar.

—Y nosotros a ti, cariño— dijo Castor dejando un beso es su frente, se alejaron y de inmediato Susan y Lucy abrazaron a Hermione.

—Gracias por estar aquí siempre— le dijo Susan sin soltarla, Hermione no pudo evitar llorar, despedirse de las dos niñas se estaba volviendo difícil, ella había prometido no llorar, pero con ellas dos era imposible.

Eran como sus pequeñas protegidas.

—Siempre lo estaré, Su. Tal vez no en cuerpo, pero mi corazón y mi alma prevalecerán aquí.