INTRODUCCIÓN:
Mikellino es el rey de un reino llamado Diamante, es un incompetente que no sabe que el poder del dinero y las riquezas están quebrando al reino entero, siendo así odiado por el gran parte de los pobladores, pero se solucionará cuando...
Hola soy yo, su querido narrador de confianza, les quiero decirles que hoy no narrare.
Mikeno2006: ¿¡Que!? ¡Después del capítulo te pago!
Jeje... Está bien, más te vale, o si no renuncio.
Mikeno2006:
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Continuando... En el anterior capitulo, una reunión urgente es convocado, y el rey que estaba muy a gusto con el exe, se va de regreso al castillo ¿Qué pasará?
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En el castillo, el rey llega hacia el lugar del reunión, dónde la reina Lynela y el rey Flexkato están sentados conversando de otros asuntos mientras que esperan al rey.
Mikellino: ¿Qué paso?
Lynela: *molesta* Tenemos mucho de que hablar Mikellino.
Flexkato: ¿Con que olvidando el trato eh?
Mikellino: Perdóname... Es que tuve un asunto que me hizo olvidar de nuestra trato.
Lynela: Arg... Siéntate, discutimos esto de una vez.
El rey se sienta en el sofá con los demás, y como si fuera una gerencia, comienzan a hablar.
Flexkato: El trato que hice con el rey Mikellino, es que el me ayudara contra la guerra que estoy lidiando, contra el reino del "innombrable", así que... Es momento de que cumpla sus palabras.
Lynela: Mikellino, hay que apoyar al reino Azulito, se que tuvieron diferencias en el pasado, pero es momento de unirnos para vencer a Nightmare.
Mikellino: Arg... Todos sabemos que nadie gana contra el reino Oscuro, es imposible, por algo es que Nightmare es considerado como el rey más peligroso.
Flexkato: Claro... Lo dice el que le debía 36 diamantes macizos por un pilar.
Lynela: Escuchen, las cosas ya no son como antes, Nightmare ganó porque batallo contra uno por uno, si nos unimos, podemos vencerlo al menos una batalla.
Mikellino: Eso es el problema, si los demás reinos se meten y perdemos, nosotros también sufriremos las consecuencias.
Flexkato: Claro... Debiste de pensar en eso antes de aceptar mi trato, ahora, si me hundo será por tu culpa.
Mikellino: Acepto hundirme contigo de echo...
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