¿Las... cuatro Yordles?

-CAP. 7 LA RESURRECCIÓN DEL CAÍDO, LA VENGANZA DE ¨VIEGO¨

Las 4 Yordles daban una larga caminata de regreso a su casa, pero Vex no tenía ganas de charlar en ese momento; Quería cuanto antes un lugar solitario y oscuro para descansar.

Poppy: —Eso fue muy peligroso, enfrentarse a Sett ¿Por qué lo hiciste?

Vex: —Con poder haces que los demás te teman, ese era mi objetivo, pero al parecer no fue suficiente— Contestó deseando un espacio para que dejaran que preguntarle cosas.

Lulu: —Pero ¿Por qué quieres que te teman, si no han hecho nada malo?

Vex: —Agh, Ustedes no entenderían nada, no saben nada de mí ¿Podrían dejar de hacerme tantas preguntas?— Giró su cabeza a los lados sacudiéndola, intentando sacarse esas voces irritantes de la mente.

Tristana: —Estás muy distante desde que llegaste, tan sólo queremos que te relajes y te lleves bien chévere con todos, ya sabes...

Lulu: —Los amigos se ayudan entre sí, no dudes en llamarnos si te pasa algo malo— Lulu le sonríe alegre a la tristóloga, quien tan sólo continúa su camino.

Vex: —Déjenme sola por una sola vez ¿Es tanto pedir?— Las llamas azules volvieron a alzarse sobre sus orejas, intimidando al resto. Dicho esto siguió su camino arrastrando su suéter negro por el suelo, y dejando atrás a las 3 murmurando entre sí.

Tristana: —Su nivel de negatividad es inmenso; No quiere más amigos, ni quiere llevarse de perlas con la gente ¿Qué es lo que le pasa?

Poppy: —Tal vez necesita un poco de tiempo a solas para que recapacite; Cualquiera se volvería loco del estrés en esta ciudad ¡¡Hablando de eso, debo presentarme en el Cuartel ahora mismo; Adiós chicas!!— Poppy sólo dejó un rastro de humo tras sí dejando solas a las 2 Yordles y una pequeña hada.

Lulu: —Bueno, parece que quedamos nosotras 2, Trist ¿Qué vamos a hacer primero?

Tristana: —Pueeees, yo tengo otros planes hoy...— Volteó la mirada evitando la vista de Lulu.

Lulu: —¿A qué te refieres? ¿Qué planes? Iré contigo.

Tristana: —¡¡No, no pu- puedes!!— Lulu reconoció esa cara de su amiga, la voz tartamuda y el leve sonrojo.

Pix: —Fiiii fiuuu...— Traducción: ¨Es él, lo sé¨.

Lulu: —Es por Teemo ¿No es así?— La impactó con mirada pícara, causando nerviosismo en la artillera.

Tristana: —¡¿Cómo sa- sabes?!

Lulu: —Me lo contó un hadita, jeje. Tranquila, puedes ir a tu ¨Cita¨.

Tristana: —¡No es u- una cita, vamos a salir a explorar los alrededores de Bandle; es una cit- quiero decir, una misión!— Lulu no pudo contenerse y cayó al suelo del ataque de risa, revolcándose como animal— Gozas de mi propia vergüenza, eres terrible como compañera.

Lulu: —Lo siento, es que eres muy graciosa, tienes tu encanto cuando tu piel toma ese color rojizo. Apuesto a que eso es lo que le atrae a Teemo de ti, aparte de tu firmeza en batalla, claro— Dió una ojeada rápida al cuerpo de su amiga, sonriéndole.

Tristana: —Ajá, como sea; Volverás a quedarte sola hoy ¿Entendiste?

Lulu: —Ah, cierto— Su semblante decayó junto con su autoestima. Tristana dió media vuelta y se alejó del lugar —Sola, otra vez.

1 Hora después

Isla de las Sombras

Un gran Abismo negro liberaba niebla negra y voces ahogadas de almas; A un lado del Abismo, se encontraba un Castillo tenebroso y casi abandonado estéticamente, más por dentro era diferente. Tenía un arreglo único y perfecto, con sus paredes limpias y muebles ordenados. En el centro de este había un Trono imponente, y sobre él se sentaba Viego.