Siempre es la misma rutina, levantarse a las 4:00 a.m. para arreglarse y ser la primera en llegar, pues quería sacar provecho siempre que podía.
Me levanto con la cosa que menos me esperaba, estaba en otra casa con una chica semi-desnuda al lado mío, no recordaba nada, seguramente me había emborrachado la noche anterior y tuve sexo con una chica del bar. En fin, lo olvidé y me metí a la ducha, después de salir me vestí con las misma ropa de ayer y salí de esa casa.
Me subí a mi auto con el cabello ya un poco seco y decido sacar mi buscapersonas cuando sonó, un trauma estaba por llegar al hospital, sin duda tenía que apurarme.
- Llegas tarde - escucho decir a mi mejor amigo Mark Sloan quién me veía entrar apurada al hospital con mi café en una mano y mi bolsa en la otra.
- Lo sé, pero ahora tengo un trauma que atender - comienzo a atarme el cabello hasta que Mark me interrumpió.
- No te molestes, ya lo atendieron - suspiro cansada, es la segunda vez en el mes que me pasa esto.
- Llegas tarde, otra vez - mi otro mejor amigo Derek Shepherd había llegado - y veo que tienes tus mismos chaqueta y pantalones de cuero que traías ayer, alguien paso un buena noche ayer.
- Ni siquiera logro recordarlo - Derek se ríe savuemente de mi.
- ¿Un trago esta noche? - Mark propuso tratando de aliviar la tensión que había entre el y Derek.
- Jaja, ni lo sueñes - respondió fríamente Derek y luego se fue.
- El no te volverá a hablar - siempre se lo recordaba pero Mark seguia insistiendo.
- Claro que lo hará, lo voy a recuperar - ambos nos quedamos en silencio por como había sonado eso - ¡Bueno ya ve y cambiate!
Amaba cuando Mark se ponía de novio arrepentido con Derek, ese par eran un caso.
Me fui a cambiar a mi uniforme de trabajo, saliendo me llamaron para un caso, iba para el lugar cuando me choque levemente con una chica.
- Lo siento - dijo apenada viendo como había tirado mi café.
- Esta bien, ya me lo iba a acabar - honestamente me sentí agradecida con la chica, no me gustaba el café, solo lo tomaba para tener energía.
- Oh por Dios, usted es la doctora Catore, Lexie Grey, interna - extendió la mano y yo le correspondí el saludo sorprendida por su nombre.
- ¿Grey? - dije asombrada.
- Oh seguramente también conoce a mi media hermana, Meredith Grey - estaba más sorprendida, media hermana, wow.
- ¡Tres! ¡¿Que esperas trae los estudios?! - Cristina Yang, mi residente favorita se acercó a nosotras gritandole a la chica "Lexie".
Lexie se fue corriendo levemente y Cristina la observó con cara de disgusto.
- ¿Tu nueva interna? - le pregunté abriendo la carpeta del paciente que me entregó Cristina.
- Lamentablemente, oh, hasta para caminar es inútil, lamento que haya tirado su café - parecía realmente disgustada por sus internos.
- De todas manera sabes que no me gusta el café - comenzamos a caminar hacia la habitación del paciente - así que Grey.
- Lo sé, tampoco puedo creerlo - al llegar a la habitación, Derek llegó y me quito la carpeta.
- Ni lo creas, es mi paciente - el siempre hacía esto, siempre hacia mi trabajo menos importante o me robaba los pacientes.
- La doctora Yang me llamó - mi favorita ¿ya lo mencioné?
ESTÁS LEYENDO
Running On Sunshine
RomanceLena Catore vive su vide de cirujana de trauma como siempre sin cambios, hasta que llega una persona que lo cambia todo para ella.