"MUERDE AL LOBO" (Omegaverse)

Parte 6: Lobo desatado

6-Lobo desatado

**Starrk**

Corro sin parar atravesando el bosque infinito, sintiendo cómo las suelas de mis botas se han roto al esquivar ramas y arbustos pequeños, arañándome la piel de las piernas al rasgar mis pantalones por la velocidad que llevo. Mi respiración es sonora, agitada, desesperada, siento como si me fueran a estallar los pulmones en cada exhalación, pero aun así corro...y sigo corriendo, salivando, escupiendo cuando no puedo contener tanta saliva en la boca, entremezclándose con la sangre que aún expulso tras el golpe que me ha propinado mi hermano Zangetsu en su casa, partiéndome algún diente seguramente. Incluso aún puedo sentir su aroma a madera persiguiéndome, haciéndome gruñir, incluso gritar colérico mientras me aparto más de su territorio y regreso al mío, a mi pueblo, a mi comisaría, donde todo mi aroma está desperdigado por cada rincón, donde ese otro aroma a jazmín me espera, ardiente, desesperante...llamándome sin clemencia con una agonía que me arranca el corazón del pecho.

"Coyote...Starrk..." gruño salvajemente al oír mi nombre susurrado en mi cabeza y aumento más el ritmo de mi carrera, estampándome contra la puerta de la comisaría, que derrumbo por mi fuerza bruta y entro tropezándome para golpear los cerrojos de la puerta que lleva al pasillo de las celdas. Gimo angustiado al sentir mis manos torpes golpeando la puerta, sin tener el raciocinio suficiente para usar el manojo de llaves que llevo colgando de mi cinturón, gritando y casi aullando a la par que él hasta que consigo arrancar los cerrojos y entrar tambaleándome hacia la celda del fondo donde me quedo petrificado a ver la escena.

-Ah.....aaah.....- Soujun está echado boca arriba sobre el suelo en el centro de la celda, con ambas manos entre sus piernas, hundiendo sus dedos desesperadamente en su agujero, incluso con algo de violencia, masturbándose enloquecido, arqueando su cuerpo hacia arriba al correrse, dejándome ver algunas gotitas de sudor que salen despedidas de su pecho ante el movimiento brusco de su cuerpo al doblarse, con sus pezones duros y tiesos, enrojecidos, así como sus mejillas mientras jadea con la boca abierta y algunos mechones de su cabello metiéndose en ésta, los cuales rozan sus colmillos afilados. Bajo sus nalgas, hay un charco brillante de semen y su líquido omega, mezclándose en el aire con su propio olor a jazmín que se une al mío haciéndome inspirar con los ojos cerrados, estremeciéndome hasta que, al abrirlos, mi pupila se ha dilatado tanto que oculta mi iris celeste. Ya no soy un hombre.

**Soujun**

Jadeo casi sin fuerzas tras correrme de nuevo, notando que me falta el aire y mi cuerpo se desmadeja dejado caer mis manos a ambos lados de mi sudoroso rostro, con mis ojos entrecerrados, sumergido en la breve calma del orgasmo que desaparecerá en breve acrecentando el dolor de mi vientre no fecundado. Si sigo así, moriré de dolor y placer...nunca...había sentido tanta agonía en un celo y todo es porque mi aspecto humano es débil y no puedo controlarlo como mi cuerpo animal. Siempre...he conseguido lo que quería sin llegar a sentir este dolor intenso, esta necesidad por ser fecundado, esta prioridad que me lleva al borde del abismo....

Abro los ojos aun respirando agitado cuando escucho un gruñido ajeno y el aroma de Coyote Starrk me golpea como si me hubieran atacado haciéndome estremecer. Ladeo mi cabeza mirando hacia la puerta de la celda, observándole allí, parado, con las ropas desgarradas, su cabello sucio cayéndole sobre el rostro y sus ojos, tan oscuros como el abismo. Un cielo celeste oscurecido.

Jadeo cuando le veo agarrar dos barrotes de la celda, para separarlos mientras grita salvajemente, tensando todos los músculos de su cuerpo y consigue deformarlos para darle libertad para entrar en la celda. Yo sollozo aliviado y eufórico cuando viene andando pesadamente hacia mí y se deja caer sobre mi cuerpo, haciendo fuerza con sus manos y pies para no hacerme daño al tirarse sobre mí.