INTER CINERES

Capitulo 13

-Señor, ¿está seguro de ver a la señora? ¿No es apresurado?

Cirian solo observaba como se alejaba de la Ciudad por la ventana, pero su semblante no cambio en ningún momento.

-Dentro de mis planes jamás estuvo embarazar a Iri, solo deseaba que me otorgara el divorcio para poderme casar con White...-Cirian dirigió su vista al retrovisor- Pero ahora los planes cambiaron. No solo se atrevió a marcarme sino que también tiene a mi sangre dentro de su vientre y que haya huido con ellos es imperdonable, no tendré piedad con él.

El conductor permaneció callado porque al ver los ojos de Cirian a través del retrovisor le hizo sentir escalofríos, si alguien se atrevía a contradecirlo en ese momento seguro no saldría vivo del coche. Así que solo se dispuso a conducir, esperaba llegar cuanto antes pues la tensión dentro del vehículo se podía cortar con un cuchillo.

Dilean aparcó frente al edificio de departamentos donde vivía Iri, este le agradeció y se dispuso a bajar del auto.

No muy lejos del lugar; un automóvil color negro se estaba estacionando; al ver la espalda de Iri frente a las escaleras no lo dudo, tomó el gran ramo de lirios, bajo del coche y cuando iba a acercarse al omega se detuvo en seco pues vio como otro hombre se acercaba apresuradamente para ayudar a Iri a subir las escaleras.

-Te he dicho que yo puedo solo.

-No debes forzarte.

Dilean rodeo con su brazo derecho la cintura del joven y tomo el brazo izquierdo de este para que lo pasará sobre el hombro y pudiera recargarse. Al ver esta escena el alfa tiro el ramo que tenía en sus manos al suelo, su mirada se volvió oscura y apretó tanto la mandíbula que una vena resaltó.

-¡Suéltalo!

Las personas que estaban subiendo las escaleras se detuvieron para poder dirigir su mirada al dueño de la voz. Cirian pasó por encima de los lirios, su paso era apresurado pues en un instante ya se encontraba quitando la mano que rodeaba la cintura de Iri.

-¿A qué debemos la visita del Señor Knight?

La sonrisa burlona en el rostro del abogado hizo que la furia del alfa aumentara cada vez más, no le gustaba que alguien se riera de él en su cara y menos que tocará lo que por derecho le pertenecía.

-¿Quién te crees que eres para hablarme de esa forma?

-Es cierto, la belleza jamás pudo presentarnos- Dilean se soltó del agarre de Cirian y extendió su mano a manera de saludo- soy Dilean Rider...-hizo una pausa, su sonrisa se amplió más y termino por decir: "el primer amor de Iri Damsel".

Al escuchar las últimas palabras el alfa quedo petrificado mientras que el omega solo contuvo su risa, sabía lo atrevido que era su amigo, siempre queriendo provocar a las personas; era un mal hábito pero ahora solo le parecía gracioso.

-¿Qué has dicho? Mi esposo jamás ha tenido otro hombre, solo yo.

Finalmente el omega decidió intervenir, volteándose y mirando cara a cara al alfa que había irrumpido en su espacio sin ninguna invitación o un aviso previo.

-En primer lugar, llámame Damsel porque no somos amigos para que me digas por mi nombre y en segundo lugar Dilean fue el primer hombre en mi vida que nunca te hayas querido interesar en saber acerca de mí es tu problema.

Cirian estaba a punto de abrir la boca pero ninguna palabra salió de esta cuando observo el vientre abultado del omega, ahí dentro se encontraban sus hijos; Iri se veía sumamente hermoso cargándolos. En la imaginación del alfa apareció el omega cargando en ambos brazos a los bebés y sonriéndoles, sin duda alguna esa escena era simplemente perfecta. La mirada de Cirian se relajó, extendió la mano para acariciar la panza de Iri pero este le soltó un manotazo.