(13) Perdón.

2.1K 219 29
                                    


                   (Narra Izana)

En estos momentos me encontraba devastado caminado sin un rumbo aparente en medio de la noche, hacia frío y la gente de mal vivir Empezaba a salir.

hubiera preferido nunca haber hablado de nuevo con mi supuesta madre, de esa forma no estaría sufriendo de este modo...

Saber que todo fue una mentira no fue fácil para mí. Odio las traiciones y shinichiro lo sabia muy bien, odio esto. Odio el miedo de ser abandonado por las únicas personas a las que les preocupo, ¿que puedo hacer?, ¿qué puedo hacer para no sentirme de esta forma?, es algo que odio, odio sentirme así, débil.

Nunca fui alguien que mostrará debilidad con nadie, tal vez con mi supuesto hermano o supuesta hermana, pero nadie más había visto ese lado mio y de alguna forma tampoco quería que lo vieran, ¿la razón?, muy simple.

La gente se aprovecha de la debilidad de los demás, muchas personas vienen con su "amabilidad" y terminan siendo doble caras dispuestos a muchas cosas por beneficio propio.

Siempre fue así... Siempre. En el orfanato todos buscaban su propio beneficio, los que nos cuidaban solo lo hacían por dinero y obligación, nisiquiera era como si les importara  verdaderamente. No les importaba si entre los niños se pelearán o se lastimaran, nada de eso era importante mientras les pagarán.

Estaba acostumbrado a ese tipo de ambiente, claro, eso fue hasta que shinichiro vino a decirme la excelente noticia de que tenía un hermano mayor. Siempre quise eso, un hermano mayor, una familia de verdad. Se sentía como un sueño.

Pero incluso para ser parte de mi familia soy la segunda opción, no lo culpo, nisiquiera tengo la misma sangre que ellos.

Pero entonces... Apareció ella, eso fue unos meses después de conocer a shinichiro, el la trajo con el, una dulce niña a la cual juzgue rápido pensando que sería igual a los demás niños y niñas del orfanato.

"Seguro solo finge"

Fue uno de mis primeros pensamientos sobre ella cuando me empezó a hablar con una gran sonrisa.
En el orfanato tampoco fui una persona de tener amigos, preferia estar solo.

Pero ella no se rindió. Siguió hablando hasta que finalmente me decidí a responderle, jamás me arrepentí de responderle.

Luego de aquel día seguí hablando con ella pues venía a visitarme también, se volvió algo normal para mí verla. No se en que momento pasó pero ese sentimiento de amistad con los años paso al siguiente nivel.

Ella me gustaba.

Al principio no quise admitirlo por miedo y inseguridad lo cual también considero muy tonto de mi parte pero entonces aquel día que la fui a buscar y salimos de noche ella me beso y así supe por primera vez que era la primera opción de alguien.

Eso se sintió bien.

¿Entonces por qué tenía que pasar todo esto?

¿Por qué no podíamos ser felices?

¿Mi vida acaso estaba destinada a una muerte triste y abandonado por todos?

No, eso no era lo que quería, si no la tuviera a ella tal vez esa si sería una opción... Pero no, ahora nisiquiera puedo pensar en abandonarla.

𝗦𝘄𝗲𝗲𝘁 𝗚𝗶𝗿𝗹  [𝐼𝑧𝑎𝑛𝑎 𝑥 𝑙𝑒𝑐𝑡𝑜𝑟𝑎]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora