Prσmєѕαѕ dєl Dєѕtinσ || Chat Noir/Adrien × Lectora

❦Ikari Gozen❦

—¿Alguien más tiene la canción de My Little Pony en la mente o sólo yo?—preguntó Alix interrumpiendo las indicaciones de la TV.

Negué—No, yo también—afirmé.

—¡Uh! ¡Y yo!—coincidió Rosita levantando la mano.

Estamos en casa de Marinette, hoy es el famoso Día del Amigo, en París suelen crear juegos como este para hacer nuevas amistades en honor a este día. Así que, las chicas y yo, nos reunimos en casa de Marinette ya que es la más céntrica de la ciudad.

Alix y yo hicimos casi todo lo posible para que Nath también participara en este juego, pero él prefirió quedarse en casa de Marc, ya que este no era muy sociable y no le emocionaba la idea de jugar algo con una persona al azar que podría ser un desconocido, así que ninguno se inscribió.

Salí de la cas de Marinette al recibir mi acertijo—¿Quién dijo "Estén juntos, practiquen siempre la oración y esperen a que la promesa del Padre se cumpla en su corazón"?—murmuré.

Paré frente a la panadería mientras trataba de descifrar el acertijo.

—Eh, suena a palabra de sacerdote—solté sin pensar, pero luego releí nuevamente el acertijo—Padre, sacerdote... ¡Notre Dame!—exclamé con felicidad al ver que sí logré entenderlo.

Levanté mi mano y llamé un taxi, Notre Dame estaba un poco lejos y no había tiempo para perder.

Subí al auto y le indiqué al conductor el lugar al que quería ir—¡Vamo'!—sonreí extendiendo mi mano—¡Caballo que más le trote, sí! ¡Caballo que más le trote, no! ¡Caballo que más le trote le mando, le mando, le mando una burra!—cantaba con entusiasmo. 

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—Gracias, señor, tenga un buen día—sonreí bajándome del auto y pagando el dinero correspondiente.

Mi teléfono sonó al instante que puse un pie dentro de la iglesia, creí que era una notificación, pero era una llamada, tomé el dispositivo y conteste la llamada caminando a a salida para hablar afuera por respeto al lugar.

—Hola, canitas, ¿Y ese milagro que me llamas?—cuestioné divertida, sabía que era para pedirme algo.

Él rió—Iré al grano por que sé que los elogios no funcionan contigo—comentó ya sabiendo cómo era—Necesito que me prestes los apuntes de mañana—pidió dejándome desconcertada.

—Claro, pero ¿Pasó algo malo?—pregunté con cierta preocupación.

—No no—negó riendo—Audrey Bourgeois tendrá un Desfile de Modas en Toulouse, y cómo mi mamá es su modelo principal, Chloe y yo las estamos acompañando, ahora mismo estamos en el tren—relató a lo que yo asentí comprendiendo.

—Ósea que mañana no irás—completé para asegurar la información.

—Así es—afirmó, lo oí suspirar—Se supone que hoy participaría en el juego del Día del amigo, pero no podré—se lamentó dramáticamente—Incluso me llegó el acertijo y todo—chilló—Ahora debería estar en Notre Dame con mi amigo al azar—suspiró.

Puse los ojos en blanco—¿Qué acertijo te tocó?—cuestioné entrecerrando mis ojos, no podía tener esa mala suerte, no hoy.

—¿Quién dijo "Estén juntos, practiquen siempre la oración y esperen a que la promesa del Padre se cumpla en su corazón"?—leyó, casi caigo de espaldas al notar que era el mismo que el mío.