Reencarnado en Harry Potter

Capítulo 52

- ¡¡¡VOY A MATARTE, BASTARDO!!!

El grito de Halley hizo a todos encogerse, incluído Voldemort, pues en el se sintió la enorme fuerza y la ira de la chica, además de su dolor y tristeza.

- ¿Y cómo lo harás? ¡Ni siquiera tu patético esposo pudo hacer algo!

- Te mostraré... ¡Voy a mostrarte todo lo que puedo hacer.

- Pues adelante, ¡Te aplastaré y tomaré este lugar!

...............

Neville, acompañado por Hannah, Susan, Astoria y Draco, se paró imponentemente frente a Bellatrix Lestrange, que como siempre tenía esa sonrisa demente en el rostro.

- ¡Vamos, niño! ¡Divierteme un rato!

- No seré tu diversión... Seré tu perdición. ¡Reducto!

Bellatrix esquivó, y contraatacó lanzando una maldición Cruciatus, que Neville logró bloquear con una losa de mármol.

Un hechizo cortante logró darle en la pierna al chico, haciéndolo sangrar, pero el consiguió dar un fuerte maleficio de piernas de gelatina en la bruja, haciéndola caer.

- ¡Expeliarmus!

Si varita fue separada de su mano antes de antes de poder aplicar el contra-maleficio, vió la trayectoria por la que su varita voló y la vió caer en la mano de Hannah.

- ¡Dame mi varita, maldita mestiza!

- ¡A mi novia no le hablas así! ¡Sectumsempra!

La maldición cortante golpeó a la bruja en el torso, separando su cuerpo en dos partes.

...............

Hermione, Luna, Susan, Delphine y Narcisa llegaron al Gran Comedor, donde encontraron a Halley y Voldemort gritandose el uno al otro.

Daphne también estaba ahí, abrazando el cuerpo de Isaac, quien mostraba su típica sonrisa.

- ¿¡Qué pasa!? ¿¡Qué le hicieron!? - gritó Susan.

- ¡No lo sé! Él... Voldemort... Me atrapó y amenazó con matarme... Hizo que Zack tirara la varita y... le dió con una maldición que no reconocí... ¡Le arrebató el alma! - logró decir Daphne entre sus lágrimas.

- ¿¡Qué!? ¿¡S-su alma... !? ¡Entonces... ! ¡Pero él... ! - farfulló Hermione.

- No... No puede ser... Eso es... ¡Simplemente no puede ser!

En lo que sabían era un acto inútil, todas se dejaron caer sobre el cuerpo del chico. Lo abrazaron, lo besaron, incluso lo golpearon, pero el no reaccionó a nada.

Levantaron sus miradas llenas de lágrimas y vieron al causante de su dolor, Voldemort se burlaba de Halley, que en sus manos tenía el corazón blanco que siempre veían en Isaac.

- ¡Voy a derrotarte y traer de vuelta a Zack!

Esas palabras hicieron brillar aún más fuerte al corazón blanco, haciendo que todos cerraran los ojos por la intensidad de la luz.