Reencarnado en Harry Potter

Capitulo 38

El Ministerio de Magia estaba en crisis.

Voldemort había vuelto de la muerte, los ataques a Muggles y los nacidos de estos se incrementaron, trayendo caos, el escuadrón de desmorización estaba ocupado prácticamente diario y el último ataque mortifago causó revuelo en todos lados.

El ataque mortifago del 31 de Octubre se llevó consigo la vida de muchos muggles, aurores y mortifagos. Pero de lo más importante se supo que de alguna manera Isaac Woodman se había puesto del lado de Voldemort y había secuestrado a Madame Bones, Jefa del Departamento de Aplicación de la Ley Mágica.

Cornelius Fudge estaba en la cuerda floja ya que el reemplazo de Madame Bones en el Departamento de Aplicación de la Ley Mágica, Rufus Scrimgeour, estaba investigando a todos en el ministerio, monitoreando sus empleados y ya habían descubierto no menos de 10 mortifagos, la mayoría eran aurores que el mantenía consigo para su protección.

De hecho el ya estaba prácticamente despedido, ya que justamente ese mismo día se llevaría a cabo una reunión de emergencia del Wisengamot. Una llamada por Lady Woodman, Halley Woodman.

- Estoy frito...

...............

- Sirius, ¿Hiciste lo que te dijimos?

- Si, ¿Pero por qué quieren que reclame la bóveda de los Lestrange?

- Tu solo házlo, te lo explicaremos después.

- Esta bien, solo recuerda explicarlo bien.

- Si, prometo que lo haré.

Halley cortó la conexión del espejo de comunicación y suspiró, la búsqueda y recolección de los Horrocruxes era difícil.

Eran 7 y ya habían 2 destruídos.

Su cicatriz, la copa, la diadema, el diario, la serpiente, el relicario y el anillo. Su cicatriz ya no era un Horrocrux, de hecho ya casi no se notaba, la copa era lo que Sirius buscaba, aunque no lo sabía, la diadema fue encontrada por Luna, quien también encontró la petición correcta para la Sala de Menesteres, el diario estaba destruido y en la oficina de Dumbledore, la serpiente estaba con Voldemort, el relicario aún no lo encontraban, ni siquiera sabían quien era R.A.B, el anillo tampoco lo tenían, no podían destruir las protecciones que rodeaban la choza de los Gaunt.

Así que en total tenían 2 y habían 2 destruídos, aun faltaban 3. Eso de la búsqueda y destrucción era más difícil de lo que creyeron en un principio.

Diciembre ya se cernía sobre Hogwarts y sus alrededores, siendo demostrado por las recurrentes lluvias de aguanieve.

- ¿Ya lo hizo? - preguntó Draco.

- Si, es solo cuestión de tiempo para tener la copa con nosotros.

- Bien, ¿Pero cómo los vamos a destruir?

- El Fuego Maldito, Fiendfyre, o la espada de Gryffindor.

- El Fuego Maldito suena accesible, podemos hacerlo, pero la espada de Gryffindor... ¿Cómo la vamos a conseguir?

- La va a conseguir Hermione, por supuesto. Ella es Lady Gryffindor, su anillo le da la capacidad de invocar la espada.

- Oh, genial... Entonces el único problema es conseguir los Horrocruxes.