٬ 📕 ․⠀Felix's Diary ˚ . ✦ (Hyunlix)

Página tres, carilla B.

El fin de semana había comenzado y el jóven pelirojo se encontraba sentado en el escritorio de su casa atando cabos sobre el diario de Felix, su vida literalmente giraba en torno a él y se sentía un completo inútil por no haberse dado cuenta de todo lo que ocurría bajo sus narices.
Se decidió a terminar de leer todo esos dos días que tenía libres, así en la semana sería más fácil sacarle información a los demás, a parte solo quedaban cuatro páginas ¿Que podría salir mal?

Quizá el hecho de que le quemaba en lo más profundo de su alma saber aquello, saber que por más que investigará Felix no volvería.

Tragó con fuerza y abrió el diario en la página tres, dando vuelta la hoja para leer la carilla B.

¿A quién se le ocurre escribir un diario suicida en menos de una hora? Así es, a mí. Realmente no puedo con el dolor de manos, pero no es más que el dolor que me ocasionaron ustedes en vida, tranquilos.

Voy a dedicar esta página a escribir sobre el delegado de la clase y perfecto estudiante Lee Minho, quién me habló para pasar San Valentín juntos hace unos pocos meses. Claramente acepté porque mi vida social estaba más muerta que yo ahora mismo y necesitaba amigos, pero al parecer el chico no pensaba lo mismo.
Mi expresión fue una obra de arte al verte entrar con tus amigos, no me lo esperaba pero simplemente lo dejé pasar, hasta que ocurrió lo que siempre ocurre, me intentaste meter mano sin mi consentimiento para que tus amiguitos creyeran que eres genial y esas cosas de millonarios populares.
¿Que tengo yo que atraigo a todos los abusadores? Me gustaría saberlo, quizá estoy haciendo algo mal.
Me trataste de perra provocadora cuándo te empujé para que te alejaras y te fuiste furioso junto a todo tu grupito, para después empezar a difundir rumores sobre que habíamos tenido relaciones sexuales. Eres detestable, Minho, tienes esa linda carita de ángel pero dentro tuyo hay un monstruo dispuesto a hacer lo que sea por un minuto de fama, espero sinceramente que la gente que lea esto pueda darse cuenta de ello.

—Lee Felix.

—¿Que mierda le pasa a la gente en la escuela? Dios santo ¿No saben que no es no?— Hyunjin se pasó las manos por el cabello mientras leía, no podía creer que hasta el delegado de la clase fuera un sucio bastardo que intentó aprovecharse de Felix ¡En un bar público!

—¿Hijo? ¿Que sucede?— La madre de Hyunjin entró a la habitación, habían pasado varios días desde que lo veía así de mal, necesitaba saber que estaba pasando.

—¿Recuerdas que te conté que mi compañero de trabajo se suicidó hace una semana?— Le dijo, dispuesto a contarle todo, su madre era el único apoyo que tenía. Ella asintió ante lo que su hijo había dicho y se sentó junto a él. —Pues.. resulta que yo estaba, mejor dicho, estoy, enamorado de él desde el primer momento en que lo ví, el hecho de saber que está  muerto y yo no pude hacer nada al respecto me hace mucho daño, ma.— Terminó de explicar antes de que las lágrimas rodarán por sus mejillas.

Su madre se sorprendió bastante, realmente no se lo esperaba, pero quería que su hijo estuviera bien, por lo que simplemente lo abrazó y acarició su espalda con cariño. —Tranquilo, mi niño, todo va a estar bien.

—¡No, nada va a estar bien!— Después de decir aquello le contó lo que leyó en cada una de las páginas de aquel diario, dejando a su madre totalmente horrorizada.

—¿¡Que!? A qué clase de secundaria te he metido..— Se levantó aterrada. —¿A tí no te hicieron nada de eso, verdad?

—No, ma, pero prescencie muchas de las cosas que Lix vivió y el simple hecho de no haberlo defendido me hace sentir igual de culpable que los demás.— Explicó en medio del llanto, el pobre Hyunjin necesitaba terapia realmente.

—Mi amor.. ¿No has probado hablar con los padres de Felix? Ambos sabemos que Lix no volverá, pero al menos podrían ponerle una demanda a la secundaria y clausurarla para hacer justicia por ella, a demás de demandar a todos los involucrados, claro. Sabes que yo soy abogada y cuentan conmigo en todo momento para cualquier procedimiento legal que necesiten.— Aconsejó, acariciando el cabello rojizo de su hijo.

—Creo que tienes razón, debería ir a hablar con ellos ¿No?— La miró mientras se secaba las lágrimas.

—Así es, vé mi niño, luego me cuentas como te fue.— Le sonrió de manera dulce y Hyunjin lo hizo igualmente.

El chico se levantó de su lugar y salió de su casa junto a su bicicleta en dirección a la casa de Felix, la cuál conocía ya que varias veces lo había acompañado hasta allí por las noches.
Al llegar, tocó la puerta con muchísima suavidad y dejó su bicicleta fuera, esperando por alguna respuesta.
Segundos después la puerta se abrió, dejando ver a una mujer de unos cincuenta años cruzada de brazos y manteniendo una expresión seria.

—¿Quién eres?— Preguntó, fría como el abismo, probablemente era la madre de Felix por el gran parecido que poseían.

—Soy Hwang Hyunjin, ex compañero de trabajo de Lee Felix, seré directo, no pretendo robarle su tiempo ni atormentarla más; su hijo sufrió muchísimo bullying, entre otro tipo de delitos, dentro de la secundaria Yonsei. Estuve hablando con mi madre que es abogada y está dispuesta a llevar el caso si usted decide denunciar a la institución.— Explicó nerviosamente y con una rapidez voraz, pero aún así dándose a entender perfectamente.

—Ajá, esa opción ya estaba contemplada, es solo que no teníamos dinero suficiente para un abogado. ¿Por qué a tí y a tu madre les interesaría esto? ¿Cómo sabemos que podemos confiar en ustedes?— Preguntó la mujer claramente insegura, no quería dar un solo paso en falso en cuanto a la muerte de su hijo.

—Porque yo amo a Felix, el fué una persona hermosa y todos los días me lamento por no haber hecho nada para evitar ese horrible final para él. Me hubiese gustado hacerlo feliz, pero no lo logré y ahora el ya no está conmigo.— Tragó saliva, aguantando las ganas de romper en llanto.

La señora vió sinceridad en los ojos del pelirojo, así que sonrió y tomó una de las manos de Hyunjin de forma comprensiva, ella también estaba pasando por ese dolor.

—Pásame el número de tu madre, pondremos la demanda contra la secundaria.