CAPITULO 20

431 19 0
                                    

Con Lucius fuera de Azkaban y pendiente de Draco, la pareja tenía que andar con mucho cuidado.  Esta situación hacía que Draco y Hermione no pudieran verse todo lo que ellos deseaban.

Hermione últimamente pasaba mucho más tiempo con sus amigos del trío dorado, estaba volviendo a ver a Ginny a los entrenamientos de quidich, mientras también se pasaba gran parte del tiempo ayudando a alumnos más pequeños en pociones.

Harry y Ron pasaban más tiempo en el castillo, ya que estaban dando unos cursos sobre aurores para mostrar la labor de su trabajo en el ministerio, pasar ese tiempo extra con sus amigos la venía muy bien porque la hacía volver a los viejos tiempos en los que solo eran ellos tres.

Hermione estaba con Ginny en el gran comedor terminando de hacer unas tareas para pociones cuando Harry y Ron llegaron al comedor, Harry fue corriendo a los brazos de la pequeña pelirroja.

-Harry te he echado de menos, hace un montón que no nos vemos.

-Ginny..., nos vimos ayer.- La chica no quería seguir con la conversación y besó a Harry.

Ron y Hermione se miraban alegrándose por sus amigos y por lo bien que les iba, sin embargo esas sonrisas se desvanecían en la mesa de las serpientes. Draco miraba esa escena con una expresión de asco, aunque fuera novio de Hermione seguía sin soportar a esos dos chicos.

-Hermione.- Ron se acercó a la chica de manera tímida.- El otro día fuimos a Londres muggle y pasamos por una tienda y me acordé de ti a si que te he comprado un pequeño regalo.

-Ron, muchas gracias, no hacía falta que me regalarás nada.

El chico le extendió un paquete cuadrado pequeño con un gran lazo rojo, la chica lo abrió con mucho cuidado. Mientras Hermione abría el paquete Draco se llenaba de ira poco a poco al ver a esa zanahoria con patas regalarle algo a SU chica.

-Ron..., este regalo es maravilloso, muchísimas gracias. El paquete contenía un colgante de oro con una H y una pequeña piedra roja a su lado.

-Hermione no des las gracias es lo mínimo que te mereces.- Hermione le dio un fuerte abrazo a Ron, hacía mucho que no se daban abrazos como ese y eso reconfortaba a la chica. Draco no pudo aguantar más esa escena y decidió irse a tomar el aire.  

La chica tras un rato miró hacia la mesa de las serpientes esperando encontrarse con una mirada de aquel chico rubio, en cambio, se encontró con un sitio vacío. Hermione decidió salir a buscar a Draco sin que sus amigos notaran su nerviosismo.

Draco estaba apoyado en una pared del pasillo pensando en la imagen que acaba de ver en el gran comedor, cuando se giró vio una chica detrás de él:

- Draco...¿Qué te pasa?

-Hermione, lo siento...- La chica miró a Draco sin saber a que se refería con miedo de que iba a pasar tras esas palabras del chico.

-No sé porque te estás disculpando, no has hecho nada malo, además...- Draco en ese momento la cortó y se puso a gritar.

-¡Hermione no lo entiendes, yo nunca podré entrar en el gran comedor de tú mano, yo nunca podré delante de todo el mundo regalarte un collar como acaba de hacer el zanahorio, nunca te podré besar en público y gritar a los cuatro vientos que estoy enamorado de ti!.

Hermione no supo reaccionar ante esas palabras, no quería interrumpirle y lo único que supo hacer en ese momento fue abrazarle.

-Hermione, si lo hago mi padre te matará y si te mata a ti me muero yo. Eres lo más importante que tengo ahora y tengo miedo de que si te pierdo podría volver a ser el Draco de antes.

-Draco tú siempre has sido así solo que te daba miedo a mostrarlo y además yo te he elegido a ti y eso es elegir todo lo que llevas detrás, además ya sabes como soy y no me gustan las cosas fáciles.

Él chico abrazó a la chica por la cintura y la besó con intensidad pero en ese beso ambos reflejaban lo mucho que estaban enamorados los dos. No podían separarse, últimamente no había podido estar mucho tiempo juntos por el problema con el padre de Draco y querían aprovechar esos momentos juntos.

Oyeron unos pasos y una voz a lo lejos:- ¡Hermione!- Harry estaba buscando a Hermione, la chica se separó de Draco, no quería que Harry les pillara y solo se la ocurrió una alternativa:
-Malfoy, déjame eres un hurón que no sabe distinguir entre un centauro y una sirena a si que no me vengas a decir nada.

Harry cuando giró y vio aquella escena no le sorprendió en absoluto, ya que lo veía como algo completamente normal.

-Mira Greanger yo tengo más clase en un dedo que la que tú podrás conseguir en tú vida, y no es por bajarte de tú nube pero estamos igualados en las clases.

Los dos se iban acercando poco a poco conscientes de que estaba Harry mirando:-Vamos a ver Malfoy cuando Hermione esté en el ministerio y tú estés comiendo mierda en tú mansión hablaremos.

-Paso de discutir con estos desechos, a si que me voy a hablar con gente que me interese.

El chico se iba alejando, pero antes de desaparecer completamente se giró y le giño un ojo a Hermione cosa que para Harry no pasó desapercibida.

Los dos amigos habían pasado toda la tarde juntos dando paseos por el lago y poniéndose al día de todas las cosas que se habían perdido. Harry había querido desde el principio de la tarde hacerle a Hermione una pregunta que tenía miedo de la contestación de su amiga:

-Hermione, la pelea con Draco...

-Lo sé, siempre está igual no para de meterse conmigo pero después de tantos años no me importa.

-No, Herms os he visto discutir mil veces y la de hoy no ha sido como todas. Esta vez había algo en vuestra mirada que no ha sido como siempre, y tengo miedo de preguntar.

-Harry... te no es lo que crees...

-No Hermione, llevamos un montón de años siendo amigos, eres como mi hermana, eres mi familia y aunque me cueste si tú estás feliz yo soy feliz.- Hermione abrazó a su amigo, en ese momento la había parecido una estupidez escondérselo a Harry.

-Harry, yo no sabía como decírtelo creía que te ibas a enfadar y luego además está Ron, y... esto es la primera vez que me pasa, se que es complicado pero estoy enamorada y me da igual todo lo que eso lleva.

-Te apoyo y yo no se lo voy a contar a Ron pero creo que es mejor que se entere por ti que por otra persona.

-Harry, ahora que lo sabes me gustaría pedirte una cosa, como ya sabrás Lucius se ha escapado y está buscando a Draco, si se entera de lo nuestro me matará..

-Tranquila, desde el ministerio me encargaré de buscarle y también de protegeros a los dos.

Tras esa conversación con su amigo, Hermione se había ido a la cama mucho más tranquila y feliz por saber que su mejor amigo la apoyaba en su decisión.

Sentimientos prohibidosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora