Capítulo 2

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A la Doctora Park pocas veces le tocaba ser portadora de tan malas noticias, por lo que llegó a su casa muy deprimida después de ver a los padres de Baekhyun de rodillas en el piso llorando sin consuelo, solo ellos sabían lo deseado que había sido su bebé y saber que la posibilidad de perderlo pendía sobre el como la espada de damocles era desgarrador, solo consiguió consuelo al ver a su hijo, Chanyeol, la miraba con curiosidad, no era común ver a su mamá llorando.
Chanyeol era un niño aventajado de   11 años, hablaba varios idiomas, tocaba piano y estaba comenzando sus lecciones de guitarra a la par de sus actividades en la preparatoria, además era un niño por demás empatico sensible y muy cariñoso,por eso al ver a su mamá en ese estado le ganó la curiosidad y le pidió que le explicara que pasaba y ese día escucho por primera vez un nombre que lo perseguiria por muchos años Byun Baekhyun, todos los días  Baek era tema de conversación por ser portador de esa rara enfermedad que lo hacía tan frágil ante las infecciones.
Sería mentira decir que Chanyeol no sintió algo de envidia por aquel chico que no conocía en persona pero del que increíblemente conocía todo su historial médico porque su madre podía hablar  de él por horas sin cansarse.

Los años pasaron y Baek entró y salió del hospital más veces que los años que tenía y simplemente asumió que su condición impedía que hiciera una vida normal, por lo que se volvió amante de los video juegos en línea y se encargo de absorber toda la información que podía de Internet sobre su enfermedad y sobre el mundo, incluso investigó a su Doctora descubriendo que tenía un hijo 5 años mayor que el, y cuando busco fotos se quedó prendado de la tierna sonrisa que formaba un hoyuelo al lado, se le hizo de lo más dulce, y decidió buscar más información sobre el, actualmente el tenía 16 o sea que Park Chanyeol tendría 21, la información en Google decía que estaba cursando el último año de la carrera de medicina, algo esperable siendo sus padres quienes eran, lo que no imaginaba Baek, es que aún sin conocerlo, él era el principal motor de Chanyeol para graduarse rápido y buscar la cura para su extraña condición.

Chanyeol ya conocía y sabía todo lo que hay que saber del Chediak Higashi y compartía la admiración de su madre al saber que Baekhyun había sobrevivido hasta los 16 años con una condición que a lo sumo les concedía 10 años de vida.

Un día cualquiera Chanyeol se encontraba en sus prácticas hospitalarias junto a su madre y la madre de Baek la llama para solicitar que lo atienda ya que ha tenido fiebre y aunque no refiere sentir algún dolor ella siempre está temerosa de cualquier sintoma, sin pensarlo la Dra Park le dice que se acerque al hospital para evaluarlo personalmente y hacer algunas pruebas. Poco más de media hora después Baekhyun acompañado de su madre entran al consultorio y Chanyeol quedó literalmente mudo al ver por primera vez al chico del que tantas veces había oído hablar, su madre jamás lo describió como lo que era... Un ángel, el ser humano mas precioso que el había visto en su vida, unos ojos grises tan brillantes como si el universo estuviera dentro de ellos. Su piel tan blanca pero lo que lo desconcertó fue esa perfecta sonrisa cuadrada que hacía que sus ojos casi desaparecieran, así Chanyeol no podía hablar, estaba paralizado en la mitad del consultorio de su madre con la boca en una perfecta O que hizo a Baekhyun sonreír a pesar de su malestar.
Baekhyun por su parte sentía que ya conocía a Chanyeol, pero le sorprendió y pensó que era muchísimo más apuesto en persona, con su altura infinita, su larga bata blanca que se ajustaba un poco a su fornido cuerpo, su cabello perfectamente peinado hacia atrás, en fin un Dios griego dentro del hospital, se imagino cuantas chicas y chicos podrían coquetearle todos los días en el hospital y eso le quito la sonrisa, el estaba en desventaja, era menor y estaba condenado así que jamás un Dios como él se fijaría en su persona.

Pensar eso lo entristeció mucho al punto de querer llorar y maldecir por lo bajo su condición, odiaba ser tan frágil, odiaba saber que en cualquier momento podría morir, odiaba saber que jamás conocería el amor porque quien en su sano juicio se sentiría atraído por el, quien querría arriesgarse a quererlo, quien podría ver belleza en su cabello blanco, su piel pálida y sus ojos grises, eso pensaba y pensaba Baek mientras veía la cara de sorpresa que no se le quitaba a Chanyeol, el pensó que este lo admiraba tal cual su madre, como un ratón de laboratorio, como un sujeto de experimentación, una estadística.

Ni en sus más dulces fantasías se imagino lo que realmente estaba pasando por la mente de Chanyeol, como aquel hombre estaba haciendo alarde de todo su autocontrol y ética  para no parecer un pedofilo babeando por un paciente. Pero la suerte no estaba de su lado o si?.
Su madre le pidió que examinará a Baek, este se cambió por una bata de paciente y se sentó en la camilla esperando que Chanyeol lo examinará.

Las mejillas de Baek tomaron un intenso color rojo por la anticipación de ser tocado por ese hombre que secretamente admiraba, el sudor perlaba la frente de Chanyeol a pesar de haber aire acondicionado en la sala, su corazón latía como un corcel desbocado ante la angelical presencia.

El chispazo de electricidad que ambos sintieron en el momento en que Chanyeol tocó su cabello hizo a Baek cerrar los ojos y a pesar de que el toque tendría que haber sido con el fin de examinar el lo sintió como una caricia y apoyo su cabeza hacia la mano que lo acariciaba de la manera más delicada.

Chanyeol trató con todas sus fuerzas de controlarse pero veía el pulso de Baek en su cuello tan desbocado como el suyo, coloco un termómetro en su boca para comprobar si había fiebre y alcanzó a rozar sutilmente esos finos labios que lo tenían imaginando cosas y situaciones que la moral, la ética y el planeta entero encontrarían aberrantes.

Pará el Baek era irreal, sus ojos del gris más precioso que había visto en su vida, observaban cada uno de sus movimientos cada uno de sus toques. Cuando llegó el momento de descubrir el pecho de Baek sólo pudo tragar saliva al ver esa piel casi transparente, esos pezones rosados que invitaban a perderse en ellos, escucho con mucho detenimiento el corazón de Baek y sus pulmones percatandose de sonidos anormales en estos últimos que sugerían una infección respiratoria que en el caso de Baek iba a ser mandatorio internarlo para vigilar.

Chanyeol sabía que desear a un paciente estaba mal, muy mal pero el era simplemente un humano que estaba frente a una visión, frente al hombre más hermoso del mundo, igualmente no podría jamás ni demostrarle su gusto y mucho menos iniciar cualquier tipo de relación con Baek.

Pero en el corazón y en el cerebro de Chanyeol se había instalado una única motivación  salvar a Baek.

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