- ¡no soy una niña! ャ Jenlisa

16

—Oh, Dios, te amo.—Jennie se sonrojó cuando notó que Lisa se sentó en su regazo y la acostó por completo en la cama mientras gemía la oración. Se separó del beso mientras la veía fija, sorprendida. —¿Pasa algo?

—No-no... es sólo que... uhm, yo, yo tengo algo de hambre.—Traga saliva, respira con dificultad, e intenta acariciar la cintura de su novia, acariciándola, pero notó que seguía teniendo su linda falda. Parpadeó.

Bien, era algo nuevo. Su pequeña novia arriba de ella mientras parecía frotarse contra ella, que literalmente gimió al decirle que la ama y que, puede, que estaba sintiendo a alguien más despertar.

Sonrió nerviosa mientras se intentaba parar, pero notó que Lisa la miró preocupada.

—¿Estás incómoda o algo así?—Un puchero, y realmente, no, Jennie estaba en el cielo pero al mismo tiempo pendiente de todo.

Porque realmente, tener a su novia de 18 años, más de dos años menor que ella, pero eso la hacía ver más pequeña. Sólo soltó un 'Uhm' y negó, pero la menor bajó de su regazo, sonriendo.

—Está bien, lo siento, dijiste que todavía no te sentías cómoda para-

—Amor, no, no es eso, es sólo que yo quiero esperar un poco más para ti, ¿Sabes? Yo realmente no creo que tú estés-

—Yo ya te lo he dicho, estoy lista, ya soy mayor, pero veo que tú no, así que yo quiero esperarte a ti...

—Tú estás muy chiquita, am-

—Que no estoy chiquita, ya estoy harta de que tú y papá digan eso cada vez que quiero hablar de sexo, estoy lista para tener sexo contigo. Jennie sólo arqueó sus cejas e intentó acariciar la mano de la menor, pero esta la quitó de forma rápida, haciendo a la mayor bajar sus labios en señal de tristeza.

—Amor, es sólo que, mira, no...no lo digo por decir que eres una niña porque eso sería algo enfermo, pero es que, Lis, yo tengo 21 años y tú 18, siento que es algo muy grande aunque no lo es.—La menor la ignoró, pero aún así seguía prestando atención.

Sólo suspiraron, y Jennie se levantó, salió de la habitación, y Lisa escuchó cómo su novia había salido por la puerta principal. Y bien, habían tenido su primera pelea.

Llevó sus manos a su rostro mientras intentaba que las lágrimas no bajaran, pero segundos después escuchó la puerta abrirse de nuevo, y levantó la mirada, su novia de rodillas frente a ella, tomando su mano, y vio un anillo de césped en su dedo anular.

—¿Me perdonas con este anillo de reconciliación?—Lisa rió, asintiendo, y abrazó a Jennie mientras se dejaba llorar un poco en su hombro.—No me gusta que llores, menos por algo que dije o hice, es la primera vez que pasa pero me siento fatal, amor... no quiero volver a hacerte sentir mal...

—Está bien, no te preocupes, creo que entraré en mis periodo por estos días.

—Aún así no me gusta saber que derramaste una lagrima por mi, amor.—Y Jennie se encargó de besar cada centímetro de su rostro sonoramente mientras decía pequeños 'te amo'.—Te juro que no volverá a pasar, ¿Si?

Y Lisa asintió, riendo, viendo el anillo de césped que le acababa de hacer su novia.