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Al día siguiente, las dos chicas habían dormido en habitaciónes separadas, Emily seguía dormida, mientras que Diana se encontraba en la cocina tomándose un café medio dormida. 
Minutos después, Diana ve a Emily salir de la habitación somnolienta dirigiéndose hacia la cocina con su pijama sencillo con dibujos de gatos, al ver eso, la chica sonríe y le dice

- Buongiorno bella durmiente...

- Buenos días...

Cuando Emily se acerca a la isla de la cocina, la italiana le hacerca la taza de café a Emily y le dice

- Bébete el café y vístete que tenemos trabajo

Después de decirle eso, Diana se va del lugar dejando a Emily sola tomando el café.

Cuando las dos ya se habían vestido, se dirigen con el Maserati de Diana hasta el centro de la ciudad donde dicho coche lo dejan aparcado. Emily cuando baja del vehículo se queda anonada de la arquitectura del sitio, tan anonada que no se da cuenta de que Diana seguía avanzando, al darse cuenta corre tras ella hasta alcanzarla

- ¿A donde vamos?

- A una tienda de telas de alta calidad

-¿Y esta muy lejos?

Y antes de que Diana contestara, se para enfrente de una pequeña tienda con herramientas de costura y diferentes telas en su escaparate

- Aquí está, tessuti Linguini, la mejor tienda de telas y confección de toda Italia

Explica ilusinada la chica al ver la pequeña tienda y sin más espera entra, Emily sin comprender entra junto a ella. Al entrar se encuentra un montón de rollos de tela de diferentes colores, texturas e incluso relieves y ve como un hombre mayor con un bastón blanco para ciegos, se acerca a Diana

- ¡Señorita Salvatore! ¡Benvenuto de nuevo!

Las consecuencias del ArteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora