ℝed Carpet ★ KOOKMIN → JIKOOK

Nota 20

NOTA 20 - SOBRE NUESTRA EUPHORIA

Nuestra vida avanzó al igual que nuestra relación y carrera. Estábamos agotados, en medio de nuestro tour, y fue Jungkook quien pagó por aquello con una descompensación peligrosa. Los médicos nos obligaron a salir de la habitación donde lo estaban atendiendo, pero yo no iba a moverme de allí por nada del mundo. Jungkook era mi chico y yo estaría junto a él en los momentos más duros.

Cuando finalmente recuperó la compostura, cuando terminamos el concierto en Chile y estuvimos listos para volver al hotel a descansar, fue que tuvimos nuestra primera pelea; Jungkook creía que nos debía demasiado, cuando en realidad no era así.

— No debes sobre exigirte tanto, te está haciendo mal a la salud. Me preocupas.

— Se lo debo a todos ustedes, Jimin. También se esfuerzan y también llevan sus cuerpos a niveles impensados... ¿Por qué yo no debería hacerlo?

— Pues por este motivo - respondí con fastidio - porque no quiero que te ocurra nada.

— No me entiendes...

— Claro que te entiendo... y entiendo porqué crees que nos debes algo. Pero ninguno de nosotros se siente así con el resto de los miembros... eres solo tú, sobre exigiéndote porque crees que tienes algo que demostrar, porque crees que debes darnos algo extra por ser el más pequeño. Pues no es así, ¡no nos debes nada!

Jungkook gruñó con mala cara, enojado por lo que acababa de decirle. No solíamos pelear ni estar en desacuerdo, pero cuando lo estábamos, era difícil para nosotros no herirnos con nuestras palabras. Tal vez solo debía darle espacio y caminar hacia la habitación de Taehyung, pero algo dentro de mí me pidió que me quedara: mi parte inmadura y conflictiva.

— No te enojes... por favor - le rogué, viendo como nuevamente su rostro volvía a ponerse pálido - solo debes dejar de...

— Ya basta Jimin - Jungkook me detuvo en seco, haciendo que mi corazón se contrajera de dolor - no me entiendes y no solo eso, en vez de acompañarme, vienes a juzgarme. No quiero eso en este momento.

— Así que crees que estoy aquí para regañarte... pues no soy tu hermano mayor y mucho menos tu madre.

— ¡Eso ya lo sé! - Jungkook me gritó y llevó sus manos hacia su rostro, totalmente superado por la conversación - lo siento, no debí gritarte... es que...

Pero mi lado precavido había entrado en alerta y ahora era yo quien quería finalizar con la conversación. Quedarme significaría pelear con Jungkook hasta el cansancio, y nuestros impulsos harían que nos hiriéramos de manera irreversible.

— Te dejare a solas. Espero que te mejores - le dije ásperamente, haciendo que él se pusiera más nervioso aún. No podía evitarlo, mi lado orgulloso había salido a la luz - si te sientes mal nuevamente, me llamas.

— No, no, Mimi, espera, no te vayas... no quise gritarte - Jungkook avanzó hasta mi y me sujetó del brazo, pero sabia que no llegaríamos a un acuerdo en ese momento, ya que seria mejor tomarnos un tiempo y pensar - no quiero que te enojes...

— No estoy enojado, solo estoy preocupado. Vamos a descansar y hablaremos luego.

Me fui sin dejarlo responder y me sentí la peor mierda sobre la faz de la tierra, pero lo que Jungkook no sabia era que solo quería protegerlo a él.