Mina ciertamente se veía apurada en todo, pero le gustaba estar de ese modo. Su rutina prácticamente se basaba en ir a visitar a Nayeon a su departamento para ayudarla con lo que pudiera para después realizar tareas y trabajos de la universidad, y agradecía que las clases no fueran tan tardadas como antes y a que al menos ya casi se acercaban los últimos exámenes para las calificaciones.
En cuanto a Nayeon, la omega se la pasaba casi todo el tiempo pensando en prácticamente dos personas; el bebé en camino y en Mina, pero más en la alfa. Sabe que Mina se esmera en el cortejo y la verdad era que Nayeon no esperaba que se esforzara de ese modo, ella pensaba que inclusive la abandonaría después de un tiempo al ver que no le hacía mucho caso.
Los omegas a veces suelen acepar al alfa después de pocos meses de cortejo, siempre había sido así, y prácticamente Nayeon había logrado mantener a la alfa a su lado durante un tiempo en el que algunos dirían que es más de lo necesario, pero para Nayeon estaba bien. Después de todo, a veces sin querer sus pensamientos terminaban en aquel alfa que la había abandonado hace un tiempo.
Pero era algo que no se podía evitar, después de todo había sido su primer amor y su primera decepción amorosa... Claramente no se iría de la noche a la mañana todos los recuerdos que tenía con él, además de que ahora venía en camino un cachorro que seguramente tendría alguna característica que le recordara a aquel alfa.
La diferencia ahora era que Nayeon no se sentía del todo triste... dejaría que aquel alfa se fuera convirtiendo en un recuerdo pasajero y se fuera desvaneciendo con el tiempo. Sería difícil en un principio, pero lograría su cometido y viviría al día a día con su nuevo cachorro y si era posible, con Mina.
—Esto es horrible. —Mencionó Mina, mirando algunas hojas. —¿De verdad escribí esto?
Nayeon no pudo evitar reír al escuchar aquellas palabras.
—No puede ser tan malo. —Dijo la omega, rodando los ojos.
—¡Claro que lo es! —Mostró una de las hojas a Nayeon, quien la tomó para poder leerla, y no tardó en reír al ver algunos errores demasiado graves en aquel escrito. —Es un desastre, ahora entiendo por qué la profesora mencionó que esto no era digno de mi persona.
Mina observó la mano de Nayeon y no pudo evitar sonreír levemente al ver aquel obsequio que le había entregado, se le veía precioso. Las manos de Nayeon hacen cualquier objeto resalte, inclusive si solo se trate de una pulsera de tela, podía apreciarse muy bien.
—¿Te sientes nerviosa? —La omega dejó de leer para mirar a Mina, y en un principio se había quedado un poco desconcertada, pero sabía a lo que Mina se refería. El embarazo no está en un carácter complicado, pero la realidad, era que sí que se encontraba ansiosa por ver a su bebé y poder entrar a la sala de partos, de cierto modo le daba algo de miedo.
—Un poco. —Mencionó Nayeon en voz baja. —Sólo espero que todo salga bien.
—Y así será, estaré allí contigo en todo momento, omega. No te abandonaré.
Nayeon asintió, se sentía sumamente agradecida por las acciones de Mina, definitivamente es una alfa grandiosa.
Llevó sus manos a su vientre para acariciarlo, y justo en ese momento sintió cómo su pequeño le daba unas pequeñas patadas. Miró con una sonrisa a la alfa y le pidió que se acercara.
—Está pateando...
—¿Puedo? —Nayeon asintió y Mina acercó su mano al vientre abultado de la omega. Sintió cómo su mano era pateada suavemente y no pudo evitar sonreír ante aquella sensación. —Bebé, eres un travieso... pronto te tendremos por aquí, tu querida mamá está ansiosa al igual que yo, así que no la lastimes con esas patadas.
Nayeon no se resistió a darle un beso a la alfa en la mejilla. Mina era demasiado dulce con ella para ser verdad, y de algún modo se sentía agradecida con lo que le pasó; si aquello no hubiera ocurrido, jamás hubiera conocido a Mina, y jamás hubiera encontrado a un amor real.
"INTENTARÉ REPARAR LO QUE ÉL SE HA LLEVADO DE TI"
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lazo roto ⋆ minayeon.
FanfictionNo todos los alfas son malos, no todos te rompen el corazón, no todos te dejan a la deriva con un bebe y un lazo roto. Im Nayeon aprendió de la peor manera el amor, ahora con un cachorro en su vientre, y un lazo roto por un alfa quien la ha despreci...